El misterio de la mujer terrorista
El atentado suicida cometido por una palestina rompe los esquemas de los servicios de inteligencia de Israel
Shihaz al Amoudi se ha convertido en la primera mujer bomba en la historia de los ataques terroristas palestinos contra Israel. Su martirio, el pasado domingo en la calle Jaffa de Jerusal¨¦n Oeste, donde se inmol¨® matando a un anciano israel¨ª e hiriendo a cerca de 200 viandantes, ha desconcertado a los servicios de seguridad israel¨ªes y destruido el perfil cl¨¢sico de los suicidas palestinos.
Veinticuatro horas despu¨¦s del atentado, Shihaz, de 20 a?os, estudiante de qu¨ªmicas en la Universidad de A Najah, es una desconocida. Ninguno de los grupos radicales palestinos ha reivindicado la autor¨ªa de la operaci¨®n, ni ha hecho sobre ella el paneg¨ªrico que habitualmente suele emitirse sobre los que mueren en operaciones similares. M¨¢s preocupante a¨²n, los servicios de seguridad de ambos lados dudan de que ¨¦ste sea su verdadero nombre o de que fuera estudiante en activo de esta universidad, situada en Nabl¨²s y considerada como uno de los principales baluartes de Ham¨¢s en Cisjordania.
A pesar de todas estas dudas, el nombre de la muchacha -certificado por la cadena de televisi¨®n Al Manara, de Hezbol¨¢ en Beirut- ha sido inscrito ya en lista de mujeres activistas palestinas, con una especial referencia: primera suicida. Se trata de una corta lista en la que se encuentran, entre otras, Fatma Bernawi, que en 1967 intent¨® volar el teatro Zion de Jerusal¨¦n; Leila Jaled, que en la d¨¦cada de los a?os setenta particip¨® en el secuestro de ocho aviones; Lamya Maaruf y Zahara Said Hasan, que en 1984 secuestraron y asesinaron a un soldado israel¨ª; Suha Bishara, que cuatro a?os despu¨¦s intentar¨ªa asesinar al general Antoine Lahad, el jefe del Ej¨¦rcito del Sur de L¨ªbano; Iman Gazawi, que el pasado mes de agosto fue detenida cerca de la estaci¨®n de autob¨²s de Tel Aviv llevando una carga explosiva, o Amana Muna, la 'dama negra de Internet', que el a?o pasado logr¨®, a trav¨¦s del ordenador, seducir, secuestrar y asesinar a un muchacho israel¨ª.
'El atentado suicida de Shihaz nos ha colocado en una nueva situaci¨®n; nos ha roto el esquema y el perfil que ten¨ªamos hasta ahora de los suicidas palestinos', confesaba ayer un responsable de los servicios de seguridad israel¨ªes, quienes desde hace meses trabajan para componer el retrato robot de los suicidas.
El perfil cl¨¢sico de los hombres bomba, que hasta hace poco era la de un muchacho de unos veinte a?os, soltero y afiliado o vinculado a las organizaciones isl¨¢micas de Yihad o de Ham¨¢s, empez¨® a resquebrajarse hace unos meses cuando los activistas de las organizaciones laicas, desde Fatah al Frente Popular de Liberaci¨®n de Palestina, protagonizaron acciones suicidas contra Israel. Un reciente informe de la Oficina de Coordinaci¨®n del Gobierno en los Territorios hab¨ªa tratado hace poco de recomponer el retrato distorsionado de los suicidas, explicando que la mayor¨ªa de ellos anteponen las motivaciones nacionalistas por encima de las religiosas, o ese profundo sentimiento de venganza que la mayor¨ªa de ellos sienten por da?os que el Ej¨¦rcito israel¨ª infringi¨® un d¨ªa a un familiar o a un amigo.
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