Un hombre con explosivos en los zapatos paraliza el aeropuerto de San Francisco

Ayer se produjo un nuevo susto en un aeropuerto de Estados Unidos, esta vez en el de San Francisco, a causa de otro posible terrorista de zapato bomba. La terminal tuvo que ser evacuada durante m¨¢s de tres horas despu¨¦s de que los agentes de seguridad detectaran restos de explosivos en las suelas de un pasajero, quien incre¨ªblemente logr¨® escapar tras una espectacular persecuci¨®n. El incidente revel¨®, una vez m¨¢s, que el riesgo de nuevos atentados persiste, al igual que la vulnerabilidad de los aeropuertos norteamericanos.

A primeras horas de la ma?ana, hacia las 6.50, cuando los aeropuertos de EE UU registran una mayor actividad de los vuelos de commuting (vuelos dom¨¦sticos cortos), en la fila de control de San Francisco los agentes realizaban un registro rutinario de los equipajes de mano cuando notaron algo sospechoso. Le pidieron al pasajero que se apartara para pasarle otra vez un pa?o por los zapatos y al ponerlo en el detector encontraron residuos de explosivos. El hombre, de raza blanca y de unos 40 a?os, ech¨® a correr y logr¨® burlar la seguridad del aeropuerto.

Hubo momentos de caos al principio hasta que los inspectores desalojaron a los 3.000 pasajeros que se encontraban en las 27 puertas abiertas de las 30 que hay en la terminal. Al cabo de unas tres horas la reabrieron, pero el presunto terrorista del zapato hab¨ªa escapado sin dejar otro rastro que el pa?o. Las autoridades de aviaci¨®n y el FBI segu¨ªan anoche posibles pistas sobre su paradero.

En la ¨²ltima semana se han producido varios fallos de seguridad en otros aeropuertos de EE UU (en Miami un hombre pas¨® varios controles con una pistola el lunes pasado), pero el incidente de ayer cobr¨® m¨¢s relevancia porque se produc¨ªa horas despu¨¦s del discurso anual a la naci¨®n del presidente. George Bush anunci¨® que se hab¨ªa reforzado la seguridad a¨¦rea y destac¨® el papel de las azafatas -presentes durante su alocuci¨®n en el Congreso-, que hab¨ªan detectado al terrorista del zapato, Richard Reid, el mes pasado en un vuelo Par¨ªs-Miami. Reid espera juicio por varios cargos de intentar destruir un avi¨®n y pertenecer a la organizaci¨®n terrorista Al Qaeda de Osama Bin Laden.

El 31 de diciembre entraron en vigor parte de las nuevas medidas de seguridad tras los atentados del 11 de septiembre. El ministerio de Transportes implant¨® un sistema de control de las maletas con los pasajeros y una mayor revisi¨®n manual y mec¨¢nica de los equipajes, pero a¨²n quedan muchas ¨¢reas vulnerables.

El Gobierno admite que es una pesadilla log¨ªstica. Por ejemplo, tienen todav¨ªa que contratar a 30.000 inspectores de equipaje e instalar 2.000 m¨¢quinas de detecci¨®n de explosivos que cuesta cada una m¨¢s de un mill¨®n de d¨®lares. El plan es instalarlas antes de fin de a?o en 400 aeropuertos, pero s¨®lo hay 160 en 50 aeropuertos.

Mientras tanto se est¨¢n utilizando todos los m¨¦todos al alcance, desde m¨¢quinas de rayos X hasta perros. EE UU estudia tambi¨¦n la creaci¨®n de una tarjeta de identidd de los pasajeros frecuentes y la instalaci¨®n de sistemas de control biom¨¦trico, por ejemplo de los rasgos faciales a trav¨¦s de c¨¢maras de v¨ªdeo en los puntos claves de las terminales.

El director del nuevo departamento de seguridad antiterrorista, Tom Ridge, reconoc¨ªa hace s¨®lo dos d¨ªas que la creatividad de los terroristas desaf¨ªa muchas de las precauciones que cualquier gobierno pueda tomar.