Muehlegg, a fondo

Un esquiador espa?ol de origen alem¨¢n, Johann Muehlegg, aspira hoy a subir al podio con alguna de las segundas medallas que se disputan en la apertura de los Juegos. Tras las femeninas de los 15 kil¨®metros, la pista de Soldier Hollow, al sureste de Salt Lake City, ser¨¢ el escenario. A Juanito, como le llaman sus compa?eros desde hace m¨¢s de tres a?os, s¨®lo le falta la gloria ol¨ªmpica despu¨¦s de ganar una Copa del Mundo y un t¨ªtulo mundial. Y los 30 kil¨®metros estilo libre, el del patinador, el que mejor le va -diferente del cl¨¢sico, en el que los esqu¨ªs deben ir siempre paralelos- es su primera y gran oportunidad.

Muehlegg tendr¨¢ muy dif¨ªcil el oro ante el n¨²mero uno del fondo, el sueco Per Elofsson, y el noruego Thomas Alsgaard, pero incluso puede lograrlo. En todo caso, sus posibilidades son muy grandes. 'Elofsson, Alsgaard, el austriaco Hoffman, muy bueno en las subidas, y otro noruego, Bjorndalen, ser¨¢n mis principales rivales', comenta, 'pero estoy muy bien y tengo mi t¨¢ctica preparada'. No la explica, pero es clara: atacar pronto para tratar de despegar as¨ª a los que son m¨¢s r¨¢pidos que ¨¦l ante una hipot¨¦tica llegada al sprint. 'Alsgaard me ganar¨ªa entonces', confiesa; 'puedo parecer un Indur¨¢in, pero, desde luego, no un Freire'.

Los otros dos espa?oles, Juan Jes¨²s Guti¨¦rrez y Aritz Zunzunegui, ver¨¢n a Muehlegg desde muy lejos. Guti¨¦rrez, que acaba de ganar en Italia la Marcialonga, prueba sobre 62 kil¨®metros del circuito mundial, quiz¨¢ se lamente del tiempo de preparaci¨®n perdido por culpa de una operaci¨®n de hernia, aunque tambi¨¦n est¨¢ muy fuerte y animado.

Juanito ya conoce el duro recorrido: muchas subidas y bajadas que cuadran con su tremenda fuerza. En enero de 2001, en la pasada Copa del Mundo, gan¨® dos carreras, precisamente los 30 kil¨®metros libres y los 15 cl¨¢sicos, aunque en aquella ocasi¨®n, un mes antes de los Mundiales, no estuvieron sus grandes adversarios. 'Pero les llevo ventaja', dice, 'porque conozco la pista'.

Muehlegg ha preparado tambi¨¦n con esmero los efectos de la altitud. Soldier Hollow se halla entre 1.670 y 1.790 metros, casi al borde de lo permitido para las competiciones por la Federaci¨®n Internacional. La falta de ox¨ªgeno se suma al aire helado, por lo que la respiraci¨®n es a¨²n m¨¢s angustiosa. Pero las previsiones indican que s¨®lo habr¨¢ 7 grados cent¨ªgrados bajo cero, lejos de los 20 que har¨ªan prohibitiva la prueba. Se ha estado entrenando en Idaho, el estado vecino, en condiciones similares y en Sun Valley se permiti¨® mostrar su forma al ganar sobre 10 kil¨®metros.

Esta temporada la ha enfocado hacia los Juegos y no va tan bien en la Copa, en la que s¨®lo ha ganado los 15 kil¨®metros libres de Brusson (Italia), el 12 de diciembre, y ha sido el quinto en tres: los 10 y 30 cl¨¢sicos de Cogne y Val di Fiemme (Italia) y los 10 libres de Nove Mesto (Rep¨²blica Checa), el pasado mes. Adem¨¢s, una gripe le afect¨® a finales de a?o y ha tenido problemas en la elecci¨®n de las ceras y los esqu¨ªs con su nuevo equipo t¨¦cnico. Pero ahora todo est¨¢ a punto.

La ceremonia de entrega de medallas ser¨¢ la que m¨¢s espectadores albergue en la historia ol¨ªmpica: en el centro de la ciudad, en una plaza al lado del gran templo de los mormones, con gradas para 20.000 personas. Y, tambi¨¦n por primera vez, las medallas, que pesan m¨¢s que nunca -otro r¨¦cord curioso-, se dar¨¢n en orden inverso al tradicional: del bronce al oro. Juanito quiere ofrecer la suya al rey Juan Carlos.