El origen de la ruptura del consenso

El pleno del Consejo General del Poder Judicial, integrado por 21 miembros (20 vocales m¨¢s el presidente), s¨®lo puede funcionar cuando acuden a la sesi¨®n al menos 14 representantes del ¨®rgano de gobierno de los jueces.

El sector progresista, elegido a propuesta de PSOE (siete vocales) e Izquierda Unida (1), tiene votos suficientes para bloquear cualquier decisi¨®n del Poder Judicial indefinidamente. Ese instrumento de protesta fue esgrimido el pasado 23 de enero, mi¨¦rcoles, cuando el pleno del Consejo pretend¨ªa cubrir cuatro vacantes al Tribunal Supremo.

Las ternas elegidas con anterioridad por la comisi¨®n de nombramientos del Poder Judicial conced¨ªan todas las papeletas para alcanzar el puesto a los jueces propuestos por el sector mayoritario, que tan s¨®lo representa al 60% del Consejo y ha sido elegido a propuesta de un partido pol¨ªtico, el Partido Popular, que en las ¨²ltimas elecciones generales logr¨® el 44,5% de los votos.

Tras el primer amago de plante de los miembros del sector progresista, el pleno del Poder Judicial se inici¨® con todos los vocales en sus puestos, y los conservadores coparon las plazas imponiendo su mayor¨ªa absoluta.

Aqu¨ª arranc¨® la crisis, que amagaba con aflorar desde que el nuevo Consejo General del Poder Judicial inici¨®, hace ahora tres meses, su andadura con el respaldo casi un¨¢nime del Parlamento (98%). Los motivos de roce han sido, desde entonces, m¨²ltiples. Y la divisi¨®n absoluta en las votaciones ha sido constante hasta el ¨²ltimo episodio, del mi¨¦rcoles pasado, cuando 12 vocales votaron a favor de la suspensi¨®n de los magistrados de la Audiencia Nacional que excarcelaron a Carlos Ruiz Santamar¨ªa, Carlos El Negro, y nueve lo hicieron en contra.