El viaje de las 'majas' de Goya a EE UU atiza la pol¨¦mica sobre el traslado de grandes obras

Goya sigue vivo: los expertos no dejan de hacerse preguntas, de escudri?ar su pintura a trav¨¦s de los rayos X para ver qu¨¦ hay debajo, de esbozar hip¨®tesis y tratar de acercarse al prol¨ªfico genio de Fuendetodos (1746-1828). Las ¨²ltimas novedades est¨¢n en Goya, tomo que re¨²ne 21 aportaciones de 20 especialistas internacionales salidas de un ciclo de conferencias de la Fundaci¨®n Amigos del Museo del Prado. La presentaci¨®n, ayer, sirvi¨® para atizar la pol¨¦mica sobre el inminente viaje de las majas a Washington. Los cuadros, que s¨®lo han salido tres veces de Espa?a, han sido asegurados en 120 millones de euros, pero la experta Isadora Rose fue rotunda: 'Son sagradas, no deber¨ªan moverse de aqu¨ª'.

Isadora Rose-de Viejo es una de los 20 grandes especialistas en Goya y su tiempo que colaboran en este volumen, editado por Galaxia Gutenberg-C¨ªrculo de Lectores, que re¨²ne art¨ªculos de, entre otros autores, Miguel Artola, Yves Bonnefoy, Francisco Calvo Serraller (dos), Fernando Checa, Manuela Mena, Priscilla E. Muller y Hugh Thomas.

El indudable inter¨¦s del volumen (409 p¨¢ginas; 35,50 euros), que aporta nuevas l¨ªneas de investigaci¨®n en torno a m¨²ltiples asuntos goyescos (vida, personajes, iconograf¨ªa, contexto literario, atribuciones dudosas...) y origina -dijo Rose- 'm¨¢s preguntas que respuestas', qued¨® ensombrecido por la salida a la palestra, en la conferencia de prensa, de dos asuntos. Uno, la reacci¨®n de estupor de Isadora Rose ante el inminente pr¨¦stamo del Prado a la National Gallery de Washington, para la exposici¨®n Goya y la imagen de la mujer, clausurada ahora en Madrid, de 15 goyas, pero sobre todo de La maja vestida y La maja desnuda. Y, dos, la petici¨®n p¨²blica de Francisco Calvo Serraller para que el Prado cree una comisi¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica que analice 'la f¨ªsica y la qu¨ªmica de todas las obras' del artista aragon¨¦s que posee el museo ('m¨¢s del 50% de las que se conocen'). Eso 'aclarar¨ªa los matices y puntos oscuros sobre autor¨ªa, dataciones, composici¨®n e interpretaciones', y servir¨ªa, afirm¨® Calvo, como primer paso hacia un cat¨¢logo definitivo, menos 'vacilante' que el actual.

Isadora Rose fue tajante al ser preguntada por el pr¨®ximo viaje de las majas (Washington inaugura el 2 de marzo). Explic¨® que en los ¨²ltimos 50 a?os s¨®lo han salido de El Prado tres veces: a la National Gallery de Londres, a Jap¨®n, y al Ermitage de San Petersburgo. Y a?adi¨®: 'El Prado deber¨ªa hacer una lista en sangre, cemento o acero inoxidable de las obras que no pueden salir del museo. Las majas no deben moverse, como Las meninas, La rendici¨®n de Breda, La familia de Carlos IV o La venus de Tiziano. Son obras sagradas, demasiado sagradas para viajar. Adem¨¢s, mucha gente viene a Madrid s¨®lo para verlas. ?Y si llegan y no est¨¢n aqu¨ª?'.

Miguel Zugaza, director del Prado, quiso destacar ayer 'el car¨¢cter excepcional de este intercambio, que se ve favorecido por las garant¨ªas que da el museo de Washington y por la colaboraci¨®n entre las dos pinacotecas'.

Rose puso como ejemplo el Museo de la Academia de San Fernando, que ha vetado todo pr¨¦stamo del retrato Manuel Godoy. 'El Prado deber¨ªa tenerlo igual de claro. La imagen de las majas entrando en la bodega de un avi¨®n da escalofr¨ªos. Aunque no les pase nada, deben quedarse. Son parte de la cultura y la historia de este pa¨ªs. Parte irreemplazable. Y, por cierto, cuando fueron a Londres les pusieron un cristal y ya nunca se lo quitaron'.

Fuentes del museo achacaron ayer a 'cuestiones de Estado' el cumplimiento final del intercambio con la National Gallery, y explicaron que los goyas 'han sido valorados y asegurados correctamente' para su viaje: el valor dado por la compa?¨ªa de seguros a las majas es de 10.000 millones de pesetas (60 millones de euros) cada una. 'Pero es evidente que no hay dinero que alcanzara a reparar la p¨¦rdida de esas obras', afirman esas mismas fuentes.

El Prado facilit¨® ayer a este diario la nota que emiti¨® tras una reuni¨®n de la comisi¨®n permanente en octubre de 2001, en la cual, despu¨¦s de estudiar los cambios suscitados por los sucesos del 11 de septiembre, el museo se reafirm¨® en cumplir lo decidido en una reuni¨®n del patronato de junio de ese a?o, cuando 'tras largas y arduas conversaciones' y el visto bueno de la jefa de Conservaci¨®n (Manuela Mena), se aprob¨® el intercambio, que supondr¨¢ que las majas est¨¦n fuera tres meses.

Ese intercambio consiste en que el museo de EE UU presta cinco goyas (entre ellos, La marquesa de Pontejos) para la exposici¨®n Goya y la imagen de la mujer, mientras que el Prado deja 15 obras del pintor a Washingon.

En compensaci¨®n, la National Gallery prestar¨¢ tambi¨¦n 'dos obras important¨ªsimas de Vermeer', y 'entre ocho y diez pinturas de la escuela impresionista francesa', para sendas exposiciones en los pr¨®ximos a?os.

Entre los goyas que viajar¨¢n a EE UU en los pr¨®ximos d¨ªas est¨¢n, junto a las majas de la discordia, El columpio, Josefa Bayeu y La pradera de San Isidro.