La productividad cae en Espa?a hasta situarse en los niveles m¨¢s bajos de la UE

La econom¨ªa espa?ola pierde el paso en los avances tecnol¨®gicos, formaci¨®n o nuevas formas de gesti¨®n empresarial. As¨ª lo reflejan los nuevos datos sobre productividad, publicados por Eurostat, que sit¨²an a Espa?a a la cola de los 15 pa¨ªses de la UE, con s¨®lo Suecia, Portugal y Grecia en peor situaci¨®n. Si en 2001 la productividad espa?ola representaba el 92% de la media de la UE (igual a 100), hace diez a?os la posici¨®n espa?ola era mejor (94,8%).

El indicador de la productividad est¨¢ de moda entre los expertos, ya que se considera la raz¨®n del largo y potente ciclo de expansi¨®n que ha vivido la econom¨ªa estadounidense hasta hace un a?o. Incluso en la ¨²ltima etapa de recesi¨®n, la productividad en EE UU ha mostrado altos crecimientos, derivados de la fuerte apuesta por los avances tecnol¨®gicos y un alto grado de flexibilidad.

Seg¨²n los ¨²ltimos datos de Eurostat, si se toma como media la productividad de la Uni¨®n Europea (igual a 100), la de Estados Unidos represent¨® el pasado a?o un 138,5%, un punto m¨¢s que un a?o antes. Dicho de otra forma, un empleado en Estados Unidos es capaz de producir lo mismo que uno europeo y 38,5 unidades m¨¢s porque tiene mejor formaci¨®n, cuenta con medios m¨¢s avanazados o/y est¨¢ mejor dirigido.

Ventaja estadounidense

Con el tiempo, esa relaci¨®n ha mejorado en favor de la econom¨ªa estadounidense. Hace diez a?os, su productividad representaba el 130,14 sobre la media de la UE, de forma que ha ganado algo m¨¢s de ocho puntos en ese periodo. Esta evoluci¨®n explica la apuesta de los mercados por situar a la econom¨ªa estadounidense en mejores condiciones para superar la actual fase recesiva, y de forma m¨¢s r¨¢pida y con m¨¢s fuerza, que el conjunto de la UE. Est¨¢ tambi¨¦n en el origen de la fortaleza del d¨®lar frente al euro.

Si las comparaciones se hacen puertas adentro, ¨²nicamente Luxemburgo (su productividad dobla la media de la UE) supera a Estados Unidos. Tanto Francia como Alemania se encuentran ligeramente por encima de la media. Claramente por detr¨¢s se sit¨²an Portugal (64,9%), Grecia (83,6%), Suecia (91,1%) y Espa?a (92%). En el caso de Espa?a, la evoluci¨®n es a la baja si se compara con hace diez a?os, cuando la productividad representaba el 94,8% de la media de la UE.

Los datos de la contabilidad nacional publicados la pasada semana por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) tambi¨¦n reflejan que la productividad se ha debilitado en 2001 respecto del a?o anterior. El crecmiento fue del 0,4%, la mitad que en 2000. Esta ca¨ªda responde a que la ca¨ªda del crecimiento econ¨®mico (del 4,1% en 2002 al 2,8% en 2001) ha sido superior a la del empleo (del 3,1% al 2,4%).

No todo el crecimiento se ha traducido en m¨¢s empleo, pero la relaci¨®n respecto del pasado a?o ha bajado. En 2000, el diferencial entre crecimiento y empleo fue de un punto, y en 2001 ha sido de cuatro d¨¦cimas. Es decir, m¨¢s personas ocupadas han sido capaces de producir menos. El problema es que la econom¨ªa espa?ola tiene a¨²n una tasa de actividad baja (el 89,2% de la media de la UE) y un nivel de paro excesivo (el 164,4% sobre la media de la UE).

Las comparaciones con la UE explican que en Espa?a no se d¨¦ un mayor equilibrio entre eficiencia y el bienestar social de un alto nivel de empleo. El gasto en investigaci¨®n y desarrollo en relaci¨®n al PIB es s¨®lo la mitad de lo que representa la media europea y el stock de capital tecnol¨®gico sobre el PIB se encuentra en apenas un 40%. El gasto p¨²blico en educaci¨®n alcanza s¨®lo el 70,6% de la media europea.