Pocas dificultades para comprar 'pirulas' en una noche de marcha

?Resulta dif¨ªcil comprar pastillas para los fines de semana? Redactores del EL PA?S salieron la noche del viernes y del s¨¢bado por las zonas de marcha de sus respectivas provincias para comprobar sobre el terreno el grado de facilidad o la trabas que encuentran los j¨®venes para hacerse con este tipo de drogas.

- C¨®rdoba. Una pastilla adornada con una flecha ('No, es una A, el sello de Armani', explic¨® el vendedor) cost¨® 6 euros, un precio de favor, en la puerta de una discoteca de una c¨¦ntrica calle de Priego. El intercambio se hizo con total naturalidad. Otra pastilla se obtuvo en la capital, en el barrio de Ciudad Jard¨ªn, y cost¨® nueve euros. 'Es MDMA, vamos ¨¦xtasis puro nada de anfetaminas de esas que te revientan el coraz¨®n', asegur¨® el vendedor.

- Granada. 'Esta noche ni loco aparezco por all¨ª', dec¨ªa el s¨¢bado un vendedor de pastillas a cierta distancia de la sala Industrial Copera, en un descampado pr¨®ximo, para no levantar las sospechas de los agentes de la Guardia Civil presentes en la zona. Despu¨¦s de explicar los milagros de sus pastillas nos recomienda dos de ellas: el coraz¨®n rojo y, sobre todo, una de color azul llamada acid house, ambas a nueve euros cada una.

- C¨¢diz. En los lugares habituales de venta de pastillas en C¨¢diz, nadie parec¨ªa el s¨¢bado saber nada al respecto. Los vendedores hab¨ªan desaparecido. 'Es que han cogido esta noche a 10 que vend¨ªan', lamentaba un joven alertado por la mayor presencia policial. Un chico de no m¨¢s de 18 a?os nos conmin¨® a ir a una discoteca en la zona de la movida. Pasadas las cinco de la madrugada, varios j¨®venes nos ofrecieron por separado dos pastillas supuestamente id¨¦nticas, blancas y con el dibujo del emblema de Superm¨¢n, que costaron 8 y 9 euros.

- Almer¨ªa. Hasta el m¨¢s advenedizo en eso de colocones y marchas a tumba abierta pudo el s¨¢bado noche hacer intendencia. En un c¨¦ntrico pub de la llamada zona de las cuatro calles las pastillas estaban a seis euros. Si una primera intentona result¨® infructuosa, un poco de paciencia bast¨®. A las 2.30 un joven de no m¨¢s de 30 a?os ofrec¨ªa las pastillas. 'Lo siento, hoy no puedo ofreceros c¨¢psulas, se me han agotado. S¨®lo llevo pastillas', espet¨®.

- Sevilla y M¨¢laga. Sin dificultad alguna. Se recurre a un amigo que conoce a un colega de un colega que pasa pastillas. Tras el tr¨¢mite de contactar con el vendedor se fija el sitio y s¨®lo hay que ir a recogerlas al lugar pactado. Dos pirulas de ¨¦xtasis a seis euros cada una.