Scola evita otro batacazo local

El Tau evit¨® la cat¨¢strofe en el ¨²ltimo segundo de un partido en el que su mayor capacidad de recursos rompi¨® la f¨¦rrea resistencia que le plante¨® el Joventut. Fue un triunfo ag¨®nico, que alivi¨® a una grada que vivi¨® dram¨¢ticamente los vaivenes del marcador y que tuvo que digerir el car¨¢cter indomable que exhibi¨® hasta las ¨²ltimas consecuencias el equipo de Badalona. Fue, la ¨²ltima, una jugada que pareci¨® sencilla por la perfecci¨®n con que la interpret¨® el Tau, que hizo llegar el bal¨®n a las manos del p¨ªvot argentino Scola a la velocidad del rel¨¢mpago, la que exig¨ªan los nueve segundos que quedaban. Desde unos tres metros, un poco escorado a la izquierda del aro, Scola la clav¨®.

El equipo local, muy cercano todav¨ªa su fracaso de hace dos a?os, cuando fue eliminado a las primeras de cambio por el Estudiantes, y tambi¨¦n lo que le sucedi¨® al Madrid en la final de la Copa de f¨²tbol, se salv¨® de jugar una pr¨®rroga que, tal y como estaba el panorama, le habr¨ªa supuesto un aut¨¦ntico calvario. El Joventut hab¨ªa perdido ya dos minutos antes del final a Baston por faltas personales y sus titulares fueron los ¨²nicos que estuvieron a la altura de las exigencias del partido. Pero, aun as¨ª, nadie se fiaba ya en el pabell¨®n Fernando Buesa. Porque, cuando no era Rafa Jofresa, era Beard y, cuando no, Espil y, al final, tambi¨¦n Mumbr¨² quienes devolv¨ªan una por una todas las canastas.

El Tau no encontr¨® manera de marcar la diferencia en un partido que escenific¨® el encuentro de dos estilos absolutamente contrapuestos: el estereotipo del baloncesto numeroso en efectivos y recursos e intimidatorio en lo f¨ªsico del Tau frente al estilo de la vieja escuela, con jerarqu¨ªas claramente establecidas y muy fiado a la calidad de sus estrellas. Con Rafa Jofresa, Beard y Baston se bast¨® el Joventut para mantener en jaque al Tau, al final ayudados por los seis extraordinarios triples de Espil y Mumbr¨². Nada menos, pero tambi¨¦n nada m¨¢s. Porque el banquillo del cuadro verdinegro no aport¨® un solo punto y apenas un par de rebotes. El Joventut fue el vivo reflejo del viejo orden: pocos cambios, que jueguen los mejores.

La labor de zapa del Tau no produjo el efecto arrollador que cab¨ªa esperar de ella, de su inmensa superioridad reboteadora, con la que se procur¨® 13 capturas m¨¢s que su rival, del trajinar de Nocioni, de la frescura f¨ªsica que le reportaban los relevos de jugadores con un nivel de calidad pareja. S¨®lo cuando Comas dio descanso a Jofresa y Beard recibi¨® su equipo un serio castigo: un parcial de 14-3 compensado en parte porque hab¨ªa adquirido previamente seis puntos de ventaja. El Tau se atragant¨® tambi¨¦n con las defensas alternativas que plante¨® Comas, ahora al hombre, ahora en zona. Y as¨ª se lleg¨® con igualdad a un ¨²ltimo tramo en el que la aparici¨®n de Bennett fue toda una bendici¨®n para el Tau, ya que rompi¨® la fluidez que Rafa Jofresa dio a los suyos y, adem¨¢s, rob¨® un par de balones en los instantes finales que valieron su peso en oro y sin los que, en definitiva, Scola no habr¨ªa dado la puntilla.