Oriol Bohigas acusa a la cr¨ªtica conservadora de la tardanza en el reconocimiento de Gaud¨ª

Oriol Bohigas puso ayer el dedo en la llaga y acus¨® a la cr¨ªtica y a la historiograf¨ªa conservadora de ser una de las principales causantes del tard¨ªo reconocimiento internacional de Gaud¨ª como uno de los grandes innovadores de la arquitectura del siglo XX. Bohigas fue el primer arquitecto, junto a Norman Foster y Arata Isozaki, que glos¨® la figura de Gaud¨ª en el acto oficial de inauguraci¨®n del A?o Gaud¨ª, que presidi¨® la reina Sof¨ªa en el Sal¨® de Cent del Ayuntamiento de Barcelona. Jordi Pujol, presidente de la Generalitat, reivindic¨® el car¨¢cter 'catalanista y cristiano' del autor del parque G¨¹ell.

'Es evidente que los dos arquitectos m¨¢s importantes del inicio del siglo XX fueron Antoni Gaud¨ª y Frank Lloyd Wright, que dieron un paso definitivo para la superaci¨®n de los academicismos y los eclecticismos', afirm¨® Bohigas. Pero mientras Wright tuvo una gran influencia en la generaci¨®n europea de posguerra, Gaud¨ª no fue recuperado hasta el ¨²ltimo tercio del siglo, cuando aparecen las corrientes que valoran por encima de todo 'la libertad expresiva del volumen'. El arquitecto catal¨¢n se pregunt¨® por qu¨¦ ha tardado tanto en llegarle el reconocimiento a Gaud¨ª. Enumer¨® el aislamiento de Espa?a respecto a la cultura internacional; la contradicci¨®n entre el car¨¢cter conservador, religioso y af¨ªn a la aristocracia del arquitecto frente a las corrrientes bohemias y laicas de las vanguardias, y tambi¨¦n el hecho de que se necesitaba esta corriente moderna expresionista para revindicar su figura.

'Pero todav¨ªa hay otra consideraci¨®n que me parece decisiva: el papel negativo que han ejercido buena parte de sus ex¨¦getas, tanto los coet¨¢neos como los posteriores y, tal vez, incluso los actuales', a?adi¨® Bohigas. La insistencia en los asuntos t¨¦cnicos y constructivos frente a los expresivos realizados por la historiograf¨ªa tradicional han difuminado, a juicio de Bohigas, el verdadero inter¨¦s de la obra de Gaud¨ª, ya que, asegura, la nueva tecnolog¨ªa ha convertido en anacr¨®nico su sistema de proyectar. En este sentido, critic¨® que en la Sagrada Familia se est¨¦n utilizando ordenadores para construir unas superficies seg¨²n las indicaciones de Gaud¨ª que ya no son necesarias estructuralmente. A juicio de Bohigas, los valores realmente arquitect¨®nicos de Gaud¨ª, que en su opini¨®n fueron descubiertos por los fot¨®grafos Joaquim Gomis y Catal¨¤ Roca, son 'la expresi¨®n dram¨¢tica del volumen, la descripci¨®n del espacio, la cualidad textural, las innovaciones decorativas, la concepci¨®n del paisaje y del entorno urbano'.

Norman Foster asegur¨® que Gaud¨ª ha sido uno de sus 'h¨¦roes'. 'Surgi¨® en una ¨¦poca, en el pasado fin de siglo, que ha producido muchas figuras heroicas', afirm¨® Foster. 'Estoy pensando en hombres como Gustav Eiffel, Louis Sullivan o Wright, contempor¨¢neos de Gaud¨ª, que inventaron nuevas maneras de construir y entre todos cambiaron el rostro de la arquitectura para siempre'. Foster afirm¨® que la cr¨ªtica ha atribuido a Gaud¨ª un exceso de 'expresi¨®n escult¨®rica', pero que ¨¦l cree que es precisamente la manera en que resuelve influencias opuestas entre lo racional y lo rom¨¢ntico, lo cual comporta que la arquitectura de Gaud¨ª tenga fuerza po¨¦tica.

Foster cit¨® tambi¨¦n a Le Corbusier, que visit¨® Barcelona en 1928, dos a?os despu¨¦s de la muerte de Gaud¨ª, que lo alab¨® como gran artista a¨²n desconocido en su pa¨ªs. El arquitecto brit¨¢nico considera que Gaud¨ª no s¨®lo fue un artista, sino tambi¨¦n un inventor cuyos m¨¦todos para determinar las estructuras de los edificios 'hoy seguir¨ªan siendo revolucionarias'.

El tercer arquitecto que intervino -estaba anunciada la presencia de Frank O'Ghery, pero no pudo asistir- fue el japon¨¦s Arata Isozaki, quien explic¨® la originalidad de Gaud¨ª en relaci¨®n con el car¨¢cter perif¨¦rico de Barcelona respecto a los centros culturales de su ¨¦poca. Esta distancia del centro, que compar¨® con la de Jap¨®n, es lo que permiti¨® realizar, a su juicio, una arquitectura original.

Lleg¨® despu¨¦s el turno de los parlamentos pol¨ªticos, que abri¨® el secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, quien dijo que Gaud¨ª fue 'un hombre de s¨ªntesis geniales'. El alcalde de Barcelona, Joan Clos, situ¨® al arquitecto en el contexto de una ¨¦poca 'en que la ciudad expresaba su esp¨ªritu m¨¢s libre y creativo'.

Por su parte, Jordi Pujol insisti¨® en que Gaud¨ª no era s¨®lo 'un constructor de edificios', sino tambi¨¦n 'un configurador del alma colectiva de Catalu?a'. 'Gaud¨ª fue un gran catalanista y un cristiano muy profundo, y sin esto es dif¨ªcil entender su figura y su entorno y, seguramente, tambi¨¦n resultar¨ªa dif¨ªcil entender su arquitectura'. Pujol agreg¨® que la sociedad europea es m¨¢s rica, est¨¢ m¨¢s protegida y tiene m¨¢s libertad que nunca, 'pero est¨¢ m¨¢s insatisfecha'. Y para superar esta insatisfacci¨®n 'tendr¨¢ que recurrir a la sensibilidad, la fe y la fuerza moral, que son los mensajes que nos env¨ªa Gaud¨ª desde su arquitectura'.