Madrid, al completo

Una inmensa ciudad futurista, con decenas de rascacielos y 300.000 viviendas con la m¨¢s avanzada tecnolog¨ªa o un desastre urban¨ªstico y ecol¨®gico que ahogar¨¢ Madrid entre el tr¨¢fico, la poluci¨®n y los residuos. La capital camina hacia la culminaci¨®n de su desarrollo urban¨ªstico. Y todo, porque los dirigentes locales de Madrid, del PP, han decidido, a un a?o de las elecciones regionales y municipales, extender el mapa de la capital por los cuatro puntos cardinales y, con ello, agotar el suelo de Madrid urbanizable. La oposici¨®n (PSOE e IU) considera que este inmenso proyecto perjudicar¨¢ a la capital y la convertir¨¢ en un conglomerado de viviendas, vaciar¨¢ el centro hist¨®rico y transformar¨¢ la vida de los madrile?os en una experiencia insufrible.

La oposici¨®n denuncia que la capital ser¨¢ una jungla insufrible para el ciudadano

'El peligro es que la gente joven abandone el centro de Madrid', denuncia IU

Mientras Madrid crece, en la Puerta del Sol hay pisos de 25 metros sin gas y con aseos comunes

Dentro de 20 a?os, los actuales callejeros quedar¨¢n obsoletos, los taxistas har¨¢n carreras mucho m¨¢s largas, habr¨¢ nuevas asociaciones de vecinos y peri¨®dicos locales, tambi¨¦n equipos de f¨²tbol nuevos y, quiz¨¢s, nuevas universidades. ?C¨®mo se proyecta este enorme desarrollo y por qu¨¦ esta premura ahora por llenar la capital de viviendas? En 1992, responsables en temas de urbanismo de la ciudad (del Ayuntamiento, del Gobierno regional y del Ministerio de Fomento) se sentaron para pensar qu¨¦ es lo que quer¨ªan hacer con Madrid: la ciudad se estaba quedando obsoleta respecto a las grandes capitales europeas. El Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) de 1985 no daba respuesta a la demanda de vivienda ni a la de equipamientos. 'El proceso de discusi¨®n fue muy dilatado y produjo largos debates entre las tres administraciones para ver qu¨¦ es lo que iba a pasar con la capital y c¨®mo se pod¨ªa renovar', explican fuentes de la Concejal¨ªa de Urbanismo.

Tras largas horas de debate, de extender planos de la ciudad y de intensas discusiones naci¨® el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) de 1997, donde se desarrolla la expansi¨®n de Madrid y se decide agotar todo el suelo que quedaba por urbanizar. El proyecto total inclu¨ªa la construcci¨®n, a medio plazo, de alrededor de 300.000 viviendas, entre los nuevos barrios y las nuevas promociones de las zonas ya consolidadas de la capital. 'Madrid no se puede resignar a no crecer y a tener una foto fija. Hay que dar sentido a todos esos suelos que no tienen valor agr¨ªcola, forestal o medioambiental. Lo m¨¢s razonable es convertirlos en ciudad', explica el concejal de Urbanismo, Ignacio del R¨ªo. Pero, seg¨²n el PSOE e IU, este proyecto de ciudad no incluye, precisamente, el concepto de vivir en un lugar habitable. '?D¨®nde est¨¢ el concepto de ciudad? El PP se est¨¢ olvidando de que este inmenso desarrollo puede enfatizar los problemas m¨¢s graves que ya sufre Madrid, como el tr¨¢fico o la poluci¨®n', denuncia la concejal socialista Matilde Fern¨¢ndez.

Al norte se proyectaron cinco nuevos barrios: Sanchinarro, Arroyo del Fresno, Montecarmelo, Las Tablas y Valdebebas. En los cuatro primeros se construir¨¢n unas 37.000 viviendas. En Valdebebas habr¨¢ un gran parque central de 530 hect¨¢reas (cuatro veces El Retiro) y 100 hect¨¢reas para nuevas viviendas donde se levantar¨¢n unos 13.000 pisos. Este desarrollo albergar¨¢ tambi¨¦n la futura Ciudad Deportiva del Real Madrid y una ampliaci¨®n de los recintos feriales. La edificaci¨®n ser¨¢, adem¨¢s, de calidad, ya que al norte de este desarrollo se ubican las zona residencial de lujo de La Moraleja. 'Pero la mitad de las viviendas, tal y como lo dicta la Ley del Suelo del Gobierno regional, tienen que ser protegidas', recuerda el concejal de Urbanismo. Es decir, que a ella s¨®lo pueden acceder las unidades familiares con unos ingresos inferiores a los 2.400 euros mensuales.

A pesar de que los promotores pueden elegir el tipo de vivienda que quieren construir y d¨®nde, tradicionalmente ha sido el norte de la capital el ¨¢rea preferido por las constructoras para desarrollar all¨ª viviendas de mayor calidad. 'Hay muchas diferencias medioambientales y climatol¨®gicas entre el norte y el sur. Por eso la ciudad ha crecido hacia el norte y el sur se ha quedado desgajado de ese proceso de expansi¨®n', reconocen en Urbanismo.

Adem¨¢s, el norte se extender¨¢ como una mancha de aceite con la Operaci¨®n Chamart¨ªn. Este proyecto, el m¨¢s importante de todos los que hay programados en Madrid, consiste en construir, sobre las actuales v¨ªas f¨¦rreas de la estaci¨®n de Chamart¨ªn, una nueva estaci¨®n, alrededor de 25.000 viviendas, miles de oficinas y entre 10 o 15 rascacielos. Las obras, seg¨²n el Ayuntamiento, empezar¨¢n al final del verano y, con este inmenso proyecto, el paseo de la Castellana se prolongar¨¢ 3,4 kil¨®metros desde el nudo Norte (junto al hospital de La Paz) hasta la M-40. A ¨¦sto hay que unir las cuatro grandes torres que se levantar¨¢n en los terrenos de la actual Ciudad Deportiva del Real Madrid, tambi¨¦n en el norte de la capital.

El proyecto del PP de extender la capital no se acaba en el norte. Todav¨ªa hay m¨¢s viviendas. Contin¨²a en el sureste, con siete nuevos barrios donde habr¨¢ 150.000 pisos y en ellos vivir¨¢n cerca de medio mill¨®n de personas, una poblaci¨®n cercana a la de Zaragoza. En uno de los barrios, el Ensanche de Vallecas, los pisos empezar¨¢n a construirse en pocas semanas. El resto, en cambio, va para largo: hasta dentro de cinco a?os, como m¨ªnimo, no habr¨¢ viviendas.

En el sur, el suelo se agota con la Operaci¨®n Campamento -se construir¨¢n 18.300 viviendas nuevas sobre los nueve millones de metros cuadrados que el Ministerio de Defensa posee en el distrito de Latina- y con otro nuevo barrio en Carabanchel con otras 6.000 viviendas. Con la Operaci¨®n Campamento, el departamento que dirige Federico Trillo-Figueroa retomar¨¢ una vieja idea que se lleva barajando desde finales de los ochenta: la construcci¨®n en los terrenos de los viejos cuarteles del paseo de Extremadura de una nueva sede que agrupe las actuales instalaciones del ministerio, las de los tres ej¨¦rcitos y la del cuartel del Estado Mayor, lo que formar¨ªa un aut¨¦ntico Pent¨¢gono a la espa?ola.

El desarrollo del sur y el consiguiente equilibrio con la zona norte ha sido una de las reclamaciones hist¨®ricas de la oposici¨®n pol¨ªtica local (PSOE e IU), que considera que el PP siempre ha estado m¨¢s 'pendiente' de desarrollar el ¨¢rea norte con viviendas e infraestructuras y ha dejado olvidada la parte sur.

Y con todo esto se termina el suelo de la capital porque al este el vertedero de Valdeming¨®mez y los pol¨ªgonos industriales no hacen la zona apta para viviendas; al noreste est¨¢ la amplicaci¨®n del aeropuerto de Barajas y, al oeste, la Casa de Campo y el monte de El Pardo impiden cualquier desarrollo urban¨ªstico. Ahora, el Ayuntamiento y las promotoras privadas tienen que encargarse de que los nuevos barrios salgan adelante ya que, seg¨²n fuentes de Urbanismo, en la ciudad hay 'una gran demanda de viviendas'. 'Parad¨®jicamente, la poblaci¨®n de Madrid tiene un crecimiento lento pero cada vez que se anuncia una promoci¨®n de pisos se agota', explican desde Urbanismo.

Esta visi¨®n no la comparte Justo Calcerrada, concejal de Izquierda Unida en el Consistorio madrile?o. 'No es cierto que la capital necesite tantos pisos, ni siquiera pensando en que la poblaci¨®n inmigrante est¨¢ aumentando. Los inmigrantes son de paso, vienen y van y, normalmente, ahorran para volver a su pa¨ªs de origen o para invertir en ¨¦l y muy pocos piensan en comprarse un piso en Madrid', asegura Calcerrada.

La extensi¨®n de la capital se basa, adem¨¢s, en las grandes v¨ªas que cruzan Madrid (la M-40, la M-30, la reci¨¦n inaugurada M-45 y la futura M-50), y que conectar¨¢n unos desarrollos urban¨ªsticos con otros. El Gobierno regional (PP), que preside Alberto Ruiz-Gallard¨®n, tambi¨¦n tiene previsto ampliar algunas l¨ªneas del metro para acercar esos nuevos barrios.

Pero, ?qu¨¦ va a haber en esos barrios aparte de pisos? ?Habr¨¢ grandes parques, hospitales, equipamientos deportivos, zonas de ocio? ?Ser¨¢n zonas habitables o una sucesi¨®n de viviendas y m¨¢s viviendas? 'El problema hist¨®rico de las ciudades dormitorio es que carec¨ªan de dotaciones y ese modelo ya se ha quedado obsoleto. Ahora, en cada sector nuevo habr¨¢ suficientes equipamientos', aseguran fuentes de Urbanismo.

En cambio, PSOE e IU tienen 'serias dudas' de que la futura ciudad que proyecta el PP sea un lugar donde a la gente le pueda apetecer vivir. 'En todo este desarrollo s¨®lo se est¨¢ teniendo en cuenta al urbanismo. Pero el medio ambiente tiene que cuidarse y evitar ahogar con tanta construcci¨®n a los pulmones verdes de la capital: la Casa de Campo, el Retiro y el monte de El Pardo', comenta la concejal socialista Matilde Fern¨¢ndez. Adriano Garc¨ªa-Loygorry, concejal del ¨¢rea (PP) indica que, desde el Ayuntamiento, se est¨¢n llevando a cabo pol¨ªticas medioambientales para proteger la naturaleza de la capital. 'Vamos a intentar que el monte de El Pardo y el resto de la ciudad no sufran. Para ello, estamos realizando varias campa?as: desde el tratamiento de aguas residuales o prevenci¨®n de la contaminaci¨®n ac¨²stica y atmosf¨¦rica hasta que se generen menos basuras', comenta Garc¨ªa-Loygorri. En cambio, los ecologistas no comparten la opini¨®n del Ayuntamiento. 'Los residuos van a aumentar y tambi¨¦n la contaminaci¨®n. El Consistorio dice que va a intentar controlar el impacto, pero no sabemos si las medidas van a ser suficientes', denuncia Juan Garc¨ªa, de Ecologistas en Acci¨®n.

El modelo de ciudad que vende el PP se acerca, seg¨²n el concejal Del R¨ªo, m¨¢s a las ¨¢reas mediterr¨¢neas que a las grandes ciudades de Estados Unidos. 'Los nuevos barrios no van a ser extensos, sino que tendr¨¢n la plaza p¨²blica como centro de la vida urbana. Se construir¨¢n ejes comerciales con tiendas y equipamientos l¨²dicos para que los residentes puedan hacer la vida en su barrio sin tener que trasladarse al centro de la capital', explica Del R¨ªo.

Adem¨¢s, las viviendas que construya el Ayuntamiento a trav¨¦s de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV) contar¨¢n con la tecnolog¨ªa m¨¢s avanzada, seg¨²n el concejal del ¨¢rea, Sigfrido Herr¨¢ez. 'Las viviendas ser¨¢n bioclim¨¢ticas, con menos consumo de energ¨ªa y dise?adas por los mejores arquitectos europeos', explica Herr¨¢ez. Para el concejal, los nuevos residentes est¨¢n reclamando viviendas sencillas, no muy grandes y que respeten el medio ambiente. 'El comprador joven tiene inquietudes medioambientales y quiere que eso se refleje en su vivienda aunque le cueste un poco m¨¢s. Los pisos del futuro tendr¨¢n, por ejemplo, aislamientos ac¨²sticos y t¨¦rmicos y paneles solares', comenta Herr¨¢ez.

Y mientras la capital se extiende por los cuatro costados con proyectos de viviendas modernas, el centro se vac¨ªa y envejece. 'El peligro que tiene este desarrollo es que la gente joven va a ir abandonando el centro para irse a los nuevos barrios y la poblaci¨®n de la parte hist¨®rica cada vez ser¨¢ m¨¢s vieja', denuncia el concejal de IU en el Ayuntamiento de Madrid Justo Calcerrada. Esta preocupaci¨®n la comparte el edil de Vivienda y Rehabilitaci¨®n Urbana del Consistorio madrile?o, Sigfrido Herr¨¢ez (PP): 'No sirve de nada hacer un desarrollo estupendo si no se cuida el centro hist¨®rico para que no envejezca o lo tome la marginalidad. Si se muere el coraz¨®n de la ciudad, se muere la ciudad', advierte Herr¨¢ez.

En barrios como Lavapi¨¦s, en pleno centro de la capital y cerca de la Puerta del Sol, todav¨ªa quedan alrededor de 1.800 infraviviendas. Son casas de menos de 25 metros, sin ventilaci¨®n, sin calefacci¨®n, sin gas y sin agua caliente. Los aseos son comunes y est¨¢n en los pasillos de los inmuebles. Las personas que viven en estas chabolas suelen ser personas mayores y con pocos recursos. Los alquileres van desde los 1,50 euros hasta los 60. El Ayuntamiento, que tiene varios planes para rehabilitar la zona centro, concede ayudas para reformar estos edificios donde existen chabolas y se encarga tambi¨¦n de realojar a sus habitantes. Pero para rehabilitar estos inmuebles todos los vecinos tienen que ponerse de acuerdo y ah¨ª surjen los problemas. Muchos de los residentes utilizan sus viviendas para especular, seg¨²n denuncian los vecinos y tambi¨¦n la oposici¨®n.

'Lo ideal ser¨ªa poder expropiar a estas personas, pero la legislaci¨®n no nos lo permite y est¨¢ claro que tenemos que mejorar en este tema', reconoce el concejal de Vivienda.

Madrid envejece y, a la vez, crece. Una paradoja que dar¨¢ como resultado una capital nueva dentro de 15 o 20 a?os. Hasta esa fecha no podremos conocer el resultado de esta renovaci¨®n de la ciudad: una capital a nivel europeo, como promete el Partido Popular, o un lugar inhabitable, ahogado por el tr¨¢fico y la poluci¨®n.