Hombres enmascarados ejecutan sumariamente a 11 palestinos acusados de informar a Israel
Ocho de ellos se encontraban bajo custodia policial en el momento de su asesinato

Once palestinos acusados de colaboracionismo con Israel fueron sumariamente ejecutados ayer en tres incidentes separados en Tulkarem, Qalquilya y Bel¨¦n (Cisjordania). Tanto los ocho supuestos colaboracionistas de Tulkarem como los dos de Qalquilya se encontraban bajo custodia policial antes de la entrada de los tanques israel¨ªes. En el ¨²ltimo mes, 16 palestinos han sido asesinados por otros palestinos por sospechas de traici¨®n. 'S¨ª, he o¨ªdo que han matado a un colaboracionista esta madrugada', relataba sin demasiado inter¨¦s por profundizar en el tema un joven de Bel¨¦n.
Se trataba de Mahmud Rahamie, de 21 a?os, que hab¨ªa enviado informaci¨®n por e-mail a Israel. Unos periodistas de Reuters pudieron grabar su ejecuci¨®n, pero los asesinos incautaron la cinta. 'Ha debido de ser ah¨ª, detr¨¢s de esas casas', se?alaba el joven, indicando el entramado de callejuelas que se extiende a la derecha de la iglesia de la Natividad. 'No es el primero, ya mataron a otros dos: pasaban informaci¨®n por ordenador a los israel¨ªes', a?ade como si fuera una justificaci¨®n.
No hay huellas de la ejecuci¨®n. Nadie sabe qu¨¦ ha pasado con el cad¨¢ver ni qui¨¦nes son sus parientes. Y, si lo saben, no quieren dar detalles. La traici¨®n, probada o no, es un gran deshonor para una familia palestina. Las l¨¢grimas se derraman en casa, y la mayor¨ªa de las veces ni siquiera se tiene una tumba a la que llevar flores.
'En Law siempre hemos condenado las ejecuciones sin un proceso legal como es debido', manifest¨® ayer a EL PA?S Jader Shukeirat, director general del cap¨ªtulo palestino de esa organizaci¨®n de defensa de los derechos humanos. 'Reiteramos nuestro llamamiento a que, incluso en las actuales circunstancias, se respete el Estado de derecho', dijo antes de a?adir: 'sin el ataque israel¨ª, estas muertes no se hubieran producido'.
Seg¨²n los testimonios recogidos por Law, ante el avance de los carros de combate israel¨ªes sobre Tulkarem, los responsables de la c¨¢rcel optaron por liberar a los detenidos. Los ocho sospechosos de colaboracionismo, sin embargo, fueron trasladados a una comisar¨ªa, donde dos hombres armados y enmascarados les ejecutaron a sangre fr¨ªa. Los polic¨ªas que les vigilaban hab¨ªan abandonado el puesto.
Poco antes, en la tambi¨¦n sitiada ciudad de Qalquilya, testigos relataron que se hab¨ªan encontrado en la calle los cuerpos de dos 'colaboracionistas de Israel' con signos de balas. Eran Iyad Abu Ishab, de 20 a?os y Walid Radwan, de 22 a?os. Al parecer, hab¨ªan sido detenidos con anterioridad por la Seguridad Preventiva palestina y fueron ejecutados.
Estas venganzas siempre han constituido un asunto delicado para los responsables palestinos. Durante la primera Intifada, las atribu¨ªan a la ausencia de un sistema judicial propio, pero, establecida la Autoridad Palestina, resultan altamente embarazosas. 'Por supuesto que estamos en contra, pero ?qu¨¦ podemos hacer para evitarlo?', se disculpaba un ministro de Arafat. Al Haq es otra organizaci¨®n palestinas que se ha mostrado activa en denunciar los asesinatos de los sospechosos de traici¨®n. Sin embargo, en la noche del s¨¢bado al domingo, soldados israel¨ªes entraron en sus oficinas de Ramala y detuvieron al empleado que montaba guardia en ellas. Su voz en defensa del respeto a los derechos humanos ha quedado silenciada.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
