El Vaticano descarta endurecer el C¨®digo de Derecho Can¨®nico contra los abusos a menores

El C¨®digo de Derecho Can¨®nico reformado por ¨²ltima vez en 1983, no requiere ulteriores cambios para endurecer las penas previstas contra los sacerdotes pederastas. As¨ª lo explic¨® ayer el presidente del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos, el obispo espa?ol Juli¨¢n Herranz. 'El canon actual que se ocupa del tema, el 1395, es lo suficientemente claro y preciso', dijo Herranz en una conferencia de prensa en el Vaticano. El tema de la convocatoria era la presentaci¨®n de una carta del Papa sobre el sacramento de la penitencia, pero buena parte de las preguntas se refirieron a la reuni¨®n celebrada en el Vaticano la semana pasada con los cardenales de Estados Unidos para tratar del esc¨¢ndalo de abusos sexuales que ha golpeado a la Iglesia de ese pa¨ªs. En el comunicado final del encuentro se propon¨ªa instaurar un proceso judicial especial para los casos de sacerdotes pederastas 'que no son del dominio p¨²blico pero en los que el sacerdote en cuesti¨®n es considerado una amenaza para la protecci¨®n de los ni?os y j¨®venes por el obispo diocesano'.

Seg¨²n Herranz, los p¨¢rrafos uno y dos del canon 1395, en los que se estipula el castigo para el eclesi¨¢stico que haya cometido delitos contra el sexto mandamiento, con menores de 16 a?os, 'incluyendo la p¨¦rdida del estado clerical' son suficientes y 'no necesitan reformarse'. 'Est¨¢ perfectamente configurada la tipolog¨ªa de los delitos que se pueden cometer en ¨¦ste ¨¢mbito', precis¨®.

El rigor punitivo en esta materia era mayor en el C¨®digo de Derecho Can¨®nico de 1917, que en el canon 2359, coma 2, que declaraba que 'debe ser suspendido y declarado infame, el religioso que comete actos impuros con menores de 16 a?os'.

El cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe (antigua Inquisici¨®n), uno de los purpurados de la Curia romana que particip¨® en las reuniones del 23 y 24 de abril, consider¨® prematuro hablar de la naturaleza de las comisiones mixtas propuestas en dicho encuentro, que podr¨ªan tener un papel a la hora de decidir la reincorporaci¨®n en su puesto de un sacerdote temporalmente suspendido, porque, dijo, 'todav¨ªa est¨¢n en fase de elaboraci¨®n los criterios nacionales, y las competencias de estas comisiones diocesanas'. El cardenal se limit¨® a decir que el encuentro con la jerarqu¨ªa estadounidense 'ha sido oportuno y fraterno, tambi¨¦n para conocer los diferentes puntos de vista y para comprender entre todos las ra¨ªces de la situaci¨®n'.

El cardenal Jorge Medina, prefecto de la Congregaci¨®n para el Culto Divino, se mostr¨® sorprendido cuando un periodista estadounidense le pregunt¨® sobre su posible sustituci¨®n por el cardenal de Boston, Bernard Law. 'No soy un profeta y no me gustar¨ªa ser adem¨¢s un mal profeta', dijo Medina, que ha cumplido ya los 75 a?os reglamentarios. 'Puedo morirme esta misma noche. No s¨¦ qui¨¦n me suceder¨¢ ni cu¨¢ndo, por eso solamente puedo tener ordenado el escritorio para cuando llegue el momento', dijo.