C¨²per, otra vez ante el drama del ¨²ltimo partido

El desenlace de la estridente Liga italiana ha vuelto a situar a H¨¦ctor C¨²per al borde del precipicio. El argentino se ha convertido en el t¨¦cnico m¨¢s shakesperiano del planeta. Lo suyo es un drama tras otro. Perdi¨® una final de la Recopa y otra de la Copa con el Mallorca, dos de la Liga de Campeones con el Valencia y con este mismo equipo, la pasada temporada, fue desterrado de la Champions con un gol de Rivaldo en el ¨²ltimo segundo de la Liga. Con estos precedentes, C¨²per, ahora al frente del Inter, afrontar¨¢ ma?ana otro d¨ªa de pasi¨®n. El Inter, con un punto de ventaja sobre el Juventus y dos sobre el Roma, se juega un t¨ªtulo que se le resiste desde la temporada 1988-89. El conjunto interista visita al Lazio romano. Su rival, por mucho apetito que tenga de fastidiar a su vecino del Roma, necesita una victoria para clasificarse para la Copa de la UEFA. El Juventus es el que mejor lo tiene, puesto que visita al Udinese, que nada se juega. Por ¨²ltimo, el Roma, que entrena Capello, viaja a Tur¨ªn para medirse con el Torino, el gran enemigo del Juventus, que, como el Udinese, espera el partido muy relajado, en la zona media de la tabla. En Italia, en caso de empate a puntos, lo que s¨®lo puede producirse entre Inter y Juve o Inter y Roma, habr¨ªa un partido de desempate.

En Ly¨®n, Jacques Santini, el t¨¦cnico, tiene que pechar con la condici¨®n de favorito y las exigencias de su presidente, Jean-Michel Aulas, un hombre con ambiciones pol¨ªticas. Incluso estuvo a punto de ser destituido en dos o tres oportunidades. Internacionales como Vairelles o Dhorasoo dejaron en su d¨ªa al Ly¨®n por su desacuerdo con su rigidez t¨¢ctica. El tiempo dio la raz¨®n a Santini: ha clasificado a su cuadro en cuatro ocasiones consecutivas para la Liga de Campeones. Pero esta vez no basta: hay que ganar.

M¨¹ller tambi¨¦n quiere hacerlo para sacarse de encima la fama de perdedor en el ¨²ltimo tramo. Durante sus a?os en el Metz vio varias veces c¨®mo el t¨ªtulo se le escapaba a tres o menos jornadas. Ahora, con el Lens, teme vivir algo parecido, pues su equipo ha desperdiciado una ventaja de ocho puntos al conseguir s¨®lo dos triunfos en los ¨²ltimos ocho partidos.

Pero la Liga tambi¨¦n est¨¢ al alcance del equipo del t¨¦cnico franc¨¦s Ars¨¨ne Wenger y que lideran los jugadores tambi¨¦n franceses Henry y Pires. El Arsenal viaja precisamente el mi¨¦rcoles a Old Trafford para encarar una cita apasionante que le puede dar el trofeo. Con cinco puntos de ventaja sobre el Manchester cuando a ambos s¨®lo les quedan dos partidos, le basta un empate para proclamarse campe¨®n. La derrota no ser¨ªa una tragedia, ya que tiene el colch¨®n de su encuentro siguiente, el s¨¢bado, con el Everton, en su coqueto y antiguo Highbury.

De confirmarse, el triunfo del Arsenal le consagrar¨ªa como el ¨²nico cuadro capaz de hacer sombra al riqu¨ªsimo Manchester en el futuro inmediato. Ahora, con el proyecto ya aprobado de construir un gran estadio cerca de Highbury y encumbrado como el club m¨¢s popular de Londres, con permiso del Chelsea, el Arsenal tiene ante s¨ª la oportunidad de crear una plataforma econ¨®mica que rompa la asfixiante hegemon¨ªa del Manchester.