ETA intensifica su estrategia de hacer rotar a sus terroristas en 'comandos' itinerantes
La Ertzaintza ten¨ªa identificado en el 'complejo Vizcaya' a un detenido en Francia
Los ¨²ltimos arrestos de etarras realizados por la polic¨ªa francesa confirman que la organizaci¨®n terrorista ha intensificado el modus operandi aplicado tras la tregua, basado tanto en la itinerancia geogr¨¢fica de los comandos como en el tr¨¢nsito fluido de sus miembros de un grupo a otro. La ¨²ltima confirmaci¨®n de esta t¨¢ctica es la presencia de ?ngel Mar¨ªa L¨®pez Anta entre los cinco detenidos en Niort (Francia) en la ¨²ltima operaci¨®n antiterrorista. L¨®pez Anta hab¨ªa sido identificado por la Ertzaintza como presunto integrante del actual complejo Vizcaya de ETA. Antes form¨® parte del comando Bolueta, que operaba en Vizcaya, junto a los ya encarcelados Unai Bilbao Solaetxe y ?scar Calabozo Casado.
'Os vamos a volver locos con la itinerancia, con nuestros movimientos'. Con estas palabras se despach¨® ante la polic¨ªa tras su detenci¨®n Asier Carrera Arenzana, el presunto etarra que accion¨® el bot¨®n del coche bomba que el 22 de febrero de 2000 acab¨® en Vitoria con la vida del dirigente socialista Fernando Buesa. S¨®lo hab¨ªan pasado ocho meses desde aquel atentado que conmocion¨® a la sociedad vasca y a¨²n era pronto para poder descifrar estas palabras.
Pero Carrera, que se enfrenta ahora a una petici¨®n del fiscal de 103 a?os de c¨¢rcel por un atentado que declar¨® haber preparado concienzudamente durante la tregua, sab¨ªa de lo que hablaba. El entonces dirigente de ETA Francisco Javier Garc¨ªa Gaztelu, Txapote, hab¨ªa creado una red de unos 20 comandos legales que dependieron directamente de sus ¨®rdenes hasta que fue detenido en febrero de 2001.
El activo principal de esos grupos, el que les diferenciaba de la hasta entonces adscripci¨®n compartimentada de cada comando a un determinado territorio, era su itinerancia. Varios de ellos fueron desarticulados durante 2001 y la polic¨ªa pudo constatar los movimientos de estos taldes, que planeaban operaciones hasta en cuatro autonom¨ªas diferentes, como en el caso del comando Soxua, desarticulado por la polic¨ªa en junio de 2001.
Adem¨¢s, expertos antiterroristas de la Ertzaintza y de las Fuerzas de Seguridad del Estado han podido constatar durante los ¨²ltimos a?os c¨®mo la direcci¨®n de ETA ha ido recambiando a los integrantes de los diferentes comandos hist¨®ricos -Donosti, Vizcaya, Andaluc¨ªa o Madrid- de forma que se dificultaba la identificaci¨®n de los terroristas. Cuando eran identificados a trav¨¦s de alguna huella dactilar, el terrorista, el grupo al completo o parte de ¨¦l ya hab¨ªa sido sustituido por otro u otros terroristas.
Fin del 'estilo cl¨¢sico'
En mayo de 2001, consejero vasco de Interior, Javier Balza, admiti¨® p¨²blicamente que ETA hab¨ªa 'cambiado mucho su operativo' desde el final de la tregua, en diciembre de 1999. 'El estilo cl¨¢sico de situar un comando fijo en un determinado territorio son f¨®rmulas que en todos estos ¨²ltimos atentados se ha demostrado que ha dejado de ser as¨ª, han dejado de actuar con ese estilo', asegur¨® entonces. El tiempo transcurrido hasta hoy ha ido apuntalando dicha afirmaci¨®n.
De ah¨ª la dificultad a?adida que, por ejemplo, est¨¢n encontrado los expertos en la lucha antiterroristas para determinar con certeza la responsabilidad de los ¨²ltimos atentados con coche bomba en Madrid. Dificultad que les ha llevado en muy pocas semanas a pasar de hablar de un grupo itinerante, tras el atentado en la capital de Espa?a contra la sede de Repsol, el 22 de abril, a apostar por la hip¨®tesis de la reorganizaci¨®n del comando Madrid o a investigar, como admiti¨® el viernes el ministro del Interior, Mariano Rajoy, la posible conexi¨®n de los cinco detenidos en Niort (varios de ellos ex miembros del ¨²ltimo comando desarticulado en Madrid), con el coche bomba que ETA coloc¨® cerca del estadio del Bernab¨¦u, el Primero de mayo.
La Ertzaintza admite este mismo problema. Angel Mar¨ªa L¨®pez Anta, nacido en Ortuella (Vizcaya) el 11 de julio de 1975, est¨¢ acusado de formar parte del comando Bolueta y de haber participado en la colocaci¨®n en Neguri (Getxo, Vizcaya) de un coche bomba el 22 de enero de 2001, que fue desactivado por la polic¨ªa vasca. La Ertzaintza ten¨ªa su foto entre la de los posibles integrantes del actual complejo Vizcaya, pero L¨®pez Anta y su presunto compa?ero de comando, Unai Bilbao Solaetxe, hab¨ªan abandonado esta provincia hac¨ªa unos siete meses, dejando s¨®lo en ella al tercer presunto integrante del comando, ?scar Calabozo Casado, arrestado en Trapaga a finales de marzo.
El primero ha sido detenido ahora en Francia; el segundo, Unai Bilbao, que fue condenado en 1999 a un a?o de prisi¨®n por des¨®rdenes p¨²blicos y kale borroka, fue detenido por la Guardia Civil el pasado 25 de marzo en San Sebasti¨¢n. Bilbao se hab¨ªa incorporado en un tiempo r¨¦cord al Donosti y est¨¢ acusado por la polic¨ªa de participar en el asesinato del edil socialista Juan Priede en Orio (Guip¨²zcoa). Su detenci¨®n posibilit¨® llegar hasta el ¨²ltimo integrante del Bolueta, Calabozo.
Es por esto que la Ertzaintza ha puesto en cuarentena las identificaciones de los presuntos integrantes del actual complejo Vizcaya que hizo tras el asesinato del magistrado de la Audiencia vizca¨ªna, Jos¨¦ Mar¨ªa Lid¨®n, el 7 de noviembre del pasado a?o, y que situaban en el grupo a Kemen Uranga Artola, nacido en Ondarroa en 1969; Garikoitz Azpiazu Rubina, nacido en Bilbao en 1973, y Oier Eguidazu Berna, nacido en 1975.
La Ertzaintza, adem¨¢s, cuenta con el retrato robot de una mujer integrante del Vizcaya, que fue elaborado gracias a las declaraciones de testigos despu¨¦s del atentado con bomba trampa en el que ETA intent¨® asesinar a dos ertzainas en el parque Etxebarria de Bilbao el pasado 21 de noviembre. Esta persona es la misma que, seg¨²n la polic¨ªa, pudo remitir los paquetes explosivos dirigidos contra tres periodistas en Vizcaya.
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