La familia, nuestra mejor inversi¨®n
'?Dar¨ªas la vida por tu hijo? ?Y una tarde? Comparte la responsabilidad afectiva con tu pareja'. Este es el lema del cartel con el que este a?o, desde la Consejer¨ªa de Asuntos Sociales, nos sumamos a la conmemoraci¨®n del D¨ªa Internacional de las Familias que hoy se celebra. Esta fecha, instaurada por la Asamblea General de Naciones Unidas en el a?o 1993, pretende llamar la atenci¨®n sobre la importancia de la familia como unidad fundamental de la sociedad que brinda un espacio natural donde los individuos aprendemos lecciones claves para el resto de nuestras vidas.
La familia es la instituci¨®n m¨¢s valorada por los andaluces. En esencia, constituye la primera y m¨¢s entra?able expresi¨®n de solidaridad que percibimos los seres humanos, por lo que merece el m¨¢ximo respaldo por parte de las administraciones p¨²blicas.
Pero el concepto que tenemos hoy d¨ªa de la familia ha cambiado, al igual que han surgido nuevos problemas y nuevas realidades dentro del seno familiar. En la actualidad, a inicios del siglo XXI, hablar de familia es hablar de diversidad. El concepto var¨ªa dependiendo de la libertad de cada uno a elegir su forma convivencial sin sujeci¨®n a unas determinadas normas. Tambi¨¦n es familia una pareja de hecho independientemente de su opci¨®n sexual y una monoparental.
Pero adem¨¢s la familia, en su concepto m¨¢s tradicional, ha sufrido cambios por la incorporaci¨®n de la mujer al mercado laboral. A pesar de que el hombre dedica cada vez m¨¢s tiempo a las tareas dom¨¦sticas el peso de la casa sigue recayendo mayoritariamente en la mujer, que se ha convertido en la gran cuidadora social pero no debe ser la que pague los platos rotos del Estado de Bienestar.
La conciliaci¨®n entre la vida familiar y la laboral, aun afectando sobre todo a la mujer y a sus derechos, debe recaer sobre toda la familia. Con la intenci¨®n de respaldar y consolidar el bienestar de las familias andaluzas el Gobierno andaluz aprob¨® el pasado 30 de abril el Decreto de Apoyo a las Familias Andaluzas, que tiene la vocaci¨®n de ofrecer ayudas econ¨®micas y, sobre todo, una serie de servicios de apoyo a las clases baja y media andaluzas, que conforman el 80% de la poblaci¨®n de nuestra comunidad.
As¨ª, la Junta ha establecido distintos tipos de ayudas econ¨®micas por hijos, apostando no por una pol¨ªtica natalista sino por el fomento del derecho de las parejas a tener descendencia. Adem¨¢s, se han establecido incentivos para la contrataci¨®n estable de las mujeres que interrumpieron su actividad laboral para cuidar sus hijos, se va a ampliar notablemente el n¨²mero de plazas de guarder¨ªas infantiles y su horario, y se van a potenciar las actividades extraescolares, entre otras muchas ayudas. A esto hay que sumar iniciativas solidarias con nuestros mayores incentivando la ayuda a domicilio, la atenci¨®n especializada y las unidades de respiro familiar, adem¨¢s de aumentar el n¨²mero de plazas en residencias.
En el a?o 2050 Espa?a ser¨¢ el pa¨ªs m¨¢s viejo del mundo, y un pa¨ªs sin j¨®venes es un pa¨ªs sin futuro. En relaci¨®n con los distintos territorios de la Uni¨®n Europea, Espa?a se sit¨²a a la cola, rezagado en lo que se refiere a gasto p¨²blico respecto al PIB dedicado a la protecci¨®n de la familia que ha ido descendiendo en los ¨²ltimos a?os. En nuestro pa¨ªs, s¨®lo un 5% de los menores de 0 a 3 a?os ocupa plaza en una guarder¨ªa p¨²blica, mientras que la media en la Uni¨®n Europea supera el 30%. En relaci¨®n a los mayores, el 3% de los espa?oles de m¨¢s de 65 a?os tienen garantizada su vejez en una residencia, mientras que este ¨ªndice es del 5,5% en el resto de los pa¨ªses europeos.
Las pol¨ªticas dirigidas a las familias deben basarse, pues, m¨¢s que en los beneficios fiscales en los servicios de apoyo a sus miembros. No hay nada m¨¢s insolidario que tratar a las familias s¨®lo desde el punto de vista fiscal, porque eso siempre beneficiar¨¢ a los que m¨¢s tienen.
El Plan de Apoyo a las Familias constituye un instrumento para que Andaluc¨ªa progrese en su camino de convergencia con Europa. Quienes entendemos que la convivencia en democracia pasa por la puesta en marcha de pol¨ªticas sociales solidarias consideramos que es necesaria una reformulaci¨®n del gasto p¨²blico para hacer frente a los servicios de ayudas a las familias y una legislaci¨®n estatal que fortalezca sus derechos.
Desde la implantaci¨®n de la democracia en nuestro pa¨ªs no se ha formulado ninguna normativa de ¨¢mbito nacional que proteja a las familias, que es justo lo que ha hecho un Gobierno progresista como el de Andaluc¨ªa, para el que la familia es la mejor inversi¨®n.
Isa¨ªas P¨¦rez Salda?a es consejero de Asuntos Sociales.
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