El Defensor del Pueblo denuncia que se vulnera la ley con los menores marroqu¨ªes

El Gobierno incumple su Ley de Extranjer¨ªa en las reagrupaciones familiares de los menores marroqu¨ªes. As¨ª lo establece una investigaci¨®n del Defensor del Pueblo, que a finales de marzo envi¨® a la Delegaci¨®n del Gobierno en Melilla y a la Consejer¨ªa de Bienestar Social de esa ciudad varias recomendaciones para que se garanticen los derechos de los ni?os en su devoluci¨®n a Marruecos. La instituci¨®n que dirige Enrique M¨²gica denuncia el desamparo de los menores que son entregados en la frontera sin que se conozca el paradero de sus familias y a sabiendas de que la polic¨ªa marroqu¨ª no los conducir¨¢ hasta ellas.

El documento, enviado a finales de marzo a la delegaci¨®n del Gobierno en Melilla y a la Consejer¨ªa de Bienestar Social de la ciudad aut¨®noma, supone un fuerte tir¨®n de orejas al Ejecutivo por el procedimiento seguido en los procesos de reagrupaci¨®n familiar de los menores inmigrantes acogidos por los servicios sociales de Ceuta y Melilla, y coincide en muchos aspectos con los informes presentados recientemente por las ONG Human Rights Watch (HRW) y Amnist¨ªa Internacional (AI) que denunciaban 'expulsiones inmediatas de menores no acompa?ados'.

En sus investigaciones, el Defensor del Pueblo comprob¨® c¨®mo en los expedientes de reagrupaci¨®n de menores no constaba que se hubiesen realizado gestiones para localizar a sus familias, ni que se hubiera contactado con los servicios de protecci¨®n de menores de Marruecos, tal y como la legislaci¨®n de Extranjer¨ªa obliga a realizar antes de decidir sobre la procedencia de la devoluci¨®n. 'Tampoco existen documentos que permitan deducir que se ha realizado un estudio individualizado de la situaci¨®n socio-familiar del menor y del entorno al que se le va a devolver para comprobar que no existe situaci¨®n de riesgo o peligro para ¨¦ste', se?ala el informe del Defensor del Pueblo que tiene el Gobierno.

'P¨¢rrafo modelo'

Seg¨²n el documento, la ¨²nica justificaci¨®n de la devoluci¨®n se recoge en 'un p¨¢rrafo modelo' inserto en todas las resoluciones 'en el que se afirma que la medida de reintegraci¨®n familiar es la procedente al ser el entorno familiar el mejor para el desarrollo de los menores'. El Defensor estima equivocada esa justificaci¨®n y considera 'obvio' que, en su mayor¨ªa, 'los menores no acompa?ados proceden de familias rotas y con una situaci¨®n econ¨®mica precaria'.

La sospecha de la inexistencia de esa investigaci¨®n se deduce tambi¨¦n de la brevedad del plazo en que se tramita la 'reagrupaci¨®n familiar', que seg¨²n el Defensor no llega a un mes desde que la delegaci¨®n tiene noticias del acogimiento del menor. El informe pone el ejemplo de un ni?o marroqu¨ª acogido el 10 de julio de 2001. El d¨ªa 16 los servicios sociales melillenses informaron de su acogimiento a la delegaci¨®n del Gobierno, que 15 d¨ªas m¨¢s tarde, el 1 de agosto, decret¨® su reintegraci¨®n familiar entreg¨¢ndolo ese mismo d¨ªa a la polic¨ªa marroqu¨ª.

'La polic¨ªa de fronteras a la cual se entrega al menor no se ocupa de ¨¦l ni efect¨²a contacto alguno con su familia', argumenta el Defensor al recordar que, con 'notoria frecuencia', los menores devueltos regresan a Melilla a veces s¨®lo algunas horas despu¨¦s de la ejecuci¨®n de la medida. Ahora bien, el retorno del menor 'no provoca un nuevo estudio del problema, dado que se vuelve a ordenar la entrega del menor transcurridos uno o varios d¨ªas'.

Seg¨²n el informe, este 'automatismo en las repatriaciones constituye una pr¨¢ctica indeseable que debe ser evitada', ya que 'la entrega precipitada vuelve a conducirles a la misma situaci¨®n de desamparo' que la ley trata de evitar al ordenar la acogida.