El Obispado de Bilbao admite que no fue "acertado" invertir en Jersey

El Obispado de Bilbao aprovech¨® este fin de semana su mejor medio de comunicaci¨®n, la misa del domingo, para disculparse ante sus feligreses por haber realizado inversiones financieras en el para¨ªso fiscal de Jersey. Pese a recalcar 'la legalidad' y 'la buena voluntad que motiv¨®' el dep¨®sito de 1,33 millones de euros que mantuvo entre 1998 y 2000 en el BBV Privanza Jersey, el obispado reconoce que no fue la decisi¨®n 'm¨¢s acertada'. El obispo, Ricardo Bl¨¢zquez, subraya en su carta que en estos momentos 'est¨¢n depositados en Bizkaia' todos los valores y t¨ªtulos propiedad de la di¨®cesis.

Monse?or Bl¨¢zquez, que firma la carta junto a Carmelo Echenagusia, obispo auxiliar, dice querer ofrecer a los feligreses 'una informaci¨®n complementaria' a la nota explicativa del pasado martes sobre las pol¨¦mica inversiones en Jersey para ayudar a despejar 'algunas de vuestras dudas' y la 'inquietud razonable de muchos'. 'No pocos de vosotros', se?ala, 'os hab¨¦is preguntado por las razones que motivaron esa decisi¨®n y la hab¨¦is cuestionado desde vuestro convencimiento de que, en materia de dinero, la Iglesia ha de actuar con especial cuidado y limpieza'.

El objeto de la carta es recuperar la imagen y ganar la 'confianza' de los feligreses en 'la gesti¨®n financiera de la di¨®cesis'. Por ello, especifica que las inversiones financieras del obispado 'en ning¨²n caso' proceden del dinero que se entregan para las misiones, C¨¢ritas, Manos Unidas (m¨¢s de 1.500 millones de pesetas en 2000, un 40% de los ingresos totales); tampoco de las colectas y donativos en las parroquias (1.173 millones de pesetas en 2000), ni del dinero procedente del Estado a trav¨¦s de la Conferencia Episcopal y la asignaci¨®n tributaria en la declaraci¨®n del IRPF (461 millones de pesetas en ese a?o).

Por el contrario, el obispado especifica de qu¨¦ fondos se nutren las inversiones financieras como las realizadas en el BBVA Privanza Jersey y los rendimientos obtenidos el a?o 2000: 'fondos de las fundaciones p¨ªas, formadas a lo largo de los ¨²ltimos 50 a?os' (29 millones de pesetas); 'fondos procedentes de la venta de bienes' eclasi¨¢sticos (15,5 millones de pesetas de plusval¨ªas) y 'fondos procedentes de donaciones directas a la Di¨®cesis' (11,5 millones de pesetas de rendimiento en 2000). En ese sentido, se precisa que estas operaciones se han realizado con el conocimiento del Consejo Diocesano de Asuntos Econ¨®micos y se asegura que actualmente 'todos los valores y t¨ªtulos que componen el patrimonio financiero diocesano est¨¢n depositados en Bizkaia'.

Exenciones tributarias

El Obispado de Bilbao justific¨® el lunes pasado la inversi¨®n de 1,33 millones de euros (221 millones de pesetas) realizada en una cuenta depositada en el BBV Privanza de Jersey 'por raz¨®n de mejor gesti¨®n administrativa'. Sin embargo, la Iglesia podr¨ªa tener razones fiscales y de mayor rendimiento para situar sus inversiones en el extranjero, ya que el acuerdo firmado por el Estado espa?ol con la Santa Sede del 10 de octubre, que desarrolla el Concordato de 1979, establece que los incrementos econ¨®micos que obtenga la Iglesia fuera de Espa?a no pagan impuestos.

Este tipo de acuerdos es especialmente adecuado para una inversi¨®n en Bolsa, como era la que manten¨ªa el obispado. Es decir, la Iglesia en Espa?a s¨®lo tiene que pagar impuestos por rendimientos de actividades econ¨®micas y por incrementos patrimoniales. Sobre el resto de los tributos, como el impuesto de sociedades y el de transmisiones, la Iglesia est¨¢ exenta. De esta manera, la cartera de acciones mantenida en esta isla del Canal de la Mancha no pagar¨ªa ning¨²n tipo de impuesto: ni en origen, por ser Jersey un para¨ªso fiscal, ni al regresar a Espa?a, ya que se generaron en el extranjero.

'A la luz de todo lo acontecido, parece claro que, a pesar de su legalidad y de la buena voluntad que la motiv¨®, la decisi¨®n de depositar las inversiones en Jersey no fue la m¨¢s acertada', reconocen los obispos de Bilbao en su carta del domingo pasado. Al mismo tiempo, dicen aceptar 'de buen grado las cr¨ªticas razonables de personas y medios de comunicaci¨®n, mientras que rechazamos con firmeza las imputaciones falsas'.

La carta concluye con una apelaci¨®n a 'aprender de esta experiencia', lo que significa el compromiso, entre otros, de respetar estrictamente 'las obligaciones legales' y 'no invertir nunca en valores especulativos'.