Un 'master' en t¨¢ctica y sistemas

Puesto que Camacho sostiene que parte de sus cr¨ªticos no distinguen una lechuga de un bal¨®n, qu¨¦ mejor que darles un master t¨¢ctico. Eso, por sorprendente que parezca, sucedi¨® ayer en el hotel de concentraci¨®n de Espa?a. Mientras los jugadores disfrutaban por la ciudad de su d¨ªa libre, Camacho invit¨® a los periodistas a una sesi¨®n de v¨ªdeo y clase t¨¢ctica. En un mini-cine, con dos de sus ayudantes, Fraile y Nieto, frente a un ordenador cada uno y un mont¨®n de v¨ªdeos de cabecera, Camacho, de pie frente a una pantalla, se situ¨® junto a una pizarra con fichas magn¨¦ticas. Lo primero que subray¨® es que sus 'esp¨ªas' auscultar¨¢n hasta el pr¨®ximo d¨ªa 9 un total de ocho partidos, tanto de los rivales de Espa?a en la primera fase como los posibles enemigos en rondas sucesivas. Luego, papeles en mano, especific¨® que dispone de un seguimiento puntual de todos los jugadores espa?oles. Sin que se distinguiera a lo lejos, ense?¨® la ficha de Xavi, por ejemplo, en la que dos empresas especializadas le han examinado cu¨¢ntas veces golpea con la derecha, con la izquierda, de tac¨®n... Todo un arsenal estad¨ªstico.

A continuaci¨®n, ya recostado sobre la pizarra magn¨¦tica, el seleccionador dijo que no tiene dudas sobre el sistema. El punto de partida siempre ser¨¢ 4-3-2-1. Cuidado, con alguna variante, subray¨® mientras deslizaba las fichas como en un tablero de ajedrez. 'En defensa, Valer¨®n tendr¨¢ que apoyar al medio centro y la t¨¢ctica se convertir¨¢ en un 4-4-1-1'. Es decir, con el canario incrustado en la l¨ªnea de medios y Ra¨²l por delante. Convencido de que Espa?a 'depende ofensivamente de Valer¨®n y Ra¨²l' quiere que ambos 'jueguen con orden'. Por ejemplo, matiz¨® mientras mareaba los imanes de un lugar a otro, 'si el portero contrario saca en largo, todos deben replegarse para coger el rechace; si saca en corto a un lateral, Ra¨²l y Trist¨¢n (bueno, sus supuestas fichas) deben presionar al que recibe'.

Para alimentar la lecci¨®n, Camacho solicit¨® a Nieto y Fraile una demostraci¨®n en v¨ªdeo. En la pantalla, revoltosa en ocasiones, se reprodujeron im¨¢genes del ¨²ltimo Eslovenia-Espa?a, el partido de la Eurocopa de 2000: los saques en largo de su portero, la posici¨®n de sus tres centrales... Porque, de nuevo de vuelta a la pizarra, Camacho explic¨® qu¨¦ se debe hacer ante defensas con tres centrales o retaguardias con cuatro. Frente a las primeras, moviendo el bal¨®n de banda a banda. En el segundo supuesto, desubicando de su zona al lateral y avanzando por las orillas.Otra de las materias sobre la que profundiz¨® fueron los saques de banda. Bajo una lluvia de imanes sobre la pantalla explic¨® que quiere que siempre se saquen hacia al ¨¢rea, cuando la posici¨®n lo permita, claro; y tambi¨¦n se detuvo en los c¨®rneres, en los que los encargados de su ejecuci¨®n tendr¨¢n la orden de enga?ar al contrario la primera vez y luego cumplir con los deseos del entrenador.

Vamos, que en el sal¨®n de v¨ªdeo, todo parec¨ªa estar atado y bien atado, 'otra cosa es lo que hagan los futbolistas, porque puedes insistir en la presi¨®n, pero algunos se pasan de frenada y no hay nada que hacer, o bien puedes insistir en c¨®mo remata los c¨®rneres De Boer, pero luego nadie le marca con..., bueno ese lenguaje que utilizamos en el f¨²tbol y a algunos les parece mal, y te marca un gol'.

En suma, que Camacho quiso demostrar que lo tiene todo cient¨ªficamente estudiado, con toda una pirotecnia digital a su servicio. Pero que depende de los jugadores. A los que por cierto suministra toda la informaci¨®n que en parte exhibi¨® ante los medios 'en corto y al pie, todo muy resumidito'. Una informaci¨®n que, asegur¨®, se llevar¨¢ consigo cuando acabe su ciclo en la Federaci¨®n.