Uribe pide a la ONU su mediaci¨®n para reanudar el proceso de paz en Colombia
El presidente electo s¨®lo aceptar¨¢ negociar la paz si la guerrilla 'silencia las armas'
El presidente electo de Colombia, ?lvaro Uribe, pedir¨¢ la mediaci¨®n de Naciones Unidas para intentar que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla m¨¢s poderosa del pa¨ªs, reanuden las conversaciones rotas el pasado mes de febrero con el Gobierno de Andr¨¦s Pastrana. Uribe, situado en el centro-derecha, pidi¨® una entrevista con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, para plantearle esa mediaci¨®n, que secundar¨ªan Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y Am¨¦rica Latina. Las condiciones impuestas a la guerrilla, de improbable cumplimiento, son que abandonen el terrorismo, los secuestros y acepten un alto el fuego. Podr¨ªan conservar las armas si las silencian.
Bruselas felicit¨® ayer a Uribe por su triunfo, y especialmente por su deseo de reactivar el proceso de paz, informa Bosco Esteruelas. La UE est¨¢ examinando la conveniencia de incluir en su lista de organizaciones terroristas a las FARC tras haber incluido anteriormente al grupo paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia.
Uribe reforzar¨¢ el Ej¨¦rcito para combatir a los insurgentes y pretende emular la ley antiterrorista espa?ola. 'Me gusta porque es dr¨¢stica'. Un perro polic¨ªa olfate¨® c¨¢maras, grabadoras y mesas de los periodistas extranjeros y del propio presidente electo, que ayer acudieron a la primera conferencia de prensa del hombre m¨¢s amenazado de Colombia, un pol¨ªtico que rompi¨® con la disciplina del Partido Liberal, abraz¨® un autoritario discurso contra la subversi¨®n, que conect¨® con la rabia nacional y gan¨® la presidencia de su pa¨ªs el pasado domingo sin necesidad de una segunda vuelta.
Sum¨® el 53,72% de los votos contra el 31,7% de su inmediato perseguidor, el candidato oficial del Partido Liberal. El partido conservador, dirigido por el presidente saliente, Andr¨¦s Pastrana, se encuentra sumido en una crisis interna de complicado arreglo. '?Qu¨¦ le dir¨ªa a Marulanda [Manuel Marulanda, anciano jefe de las FARC] si lo tuviera delante?,' se le pregunt¨® a Uribe. 'El mensaje se lo dar¨¢ la ONU', respondi¨®. 'Vamos a buscar un gran consenso con lo que se ha llamado el grupo de pa¨ªses amigos, con nuestros pa¨ªses vecinos, con los hermanos latinoamericanos, con la Uni¨®n Europea, con los Estados Unidos, pero pienso que la gran opci¨®n es pedirle esa mediaci¨®n directamente a Naciones Unidas'.
Uribe pidi¨® a Ecuador, a Brasil y Venezuela, y tambi¨¦n a Estados Unidos y M¨¦xico, que refuercen sus fronteras para impedir la entrada de guerrilleros, y el narcotr¨¢fico, principal fuente de financiaci¨®n de los grupos ilegales colombianos. 'Que la seguridad no sea la guerra del Estado, sino la disuasi¨®n de la guerra de los violentos. Para que esa seguridad sea democr¨¢tica cuidaremos profundamente las libertades p¨²blicas, los derechos sociales', hab¨ªa subrayado Uribe la noche del domingo, poco despu¨¦s de ser declarado vencedor de las presidenciales.
Serpa se retira
Horacio Serpa admiti¨® la derrota, su segunda en unas presidenciales, y anunci¨® que no volver¨¢ a intentarlo, y renunciar¨¢ a la direcci¨®n de los liberales. 'Pero seguir¨¦ en pol¨ªtica luchando por los derechos humanos y la justicia social', precis¨®. '?Oposici¨®n, oposici¨®n!', le ped¨ªan sus partidarios en la sede de campa?a, donde anunci¨® su parcial retirada. Abandonando el belicismo de la campa?a, Uribe pidi¨® la colaboraci¨®n de los aspirantes derrotados. 'No me las s¨¦ todas', reconoci¨®. El izquierdista Luis Eduardo Garz¨®n, cuyos planteamientos tratan de mantener quienes desean el nacimiento de una fuerza popular sin fusiles, bombas y secuestros, qued¨® en tercer lugar con un 6,2% de los sufragios. Le sigui¨® la independiente Noem¨ª San¨ªn, con un 5,8%, y fue quinta la candidata secuestrada por la guerrilla el pasado 23 de febrero, dos d¨ªas despu¨¦s de que terminara el proceso de paz, Ingrid Betancourt, con 0,49%. 'Le pido a Dios que le ilumine', dijo Serpa.
El abogado de Medell¨ªn de 49 a?os, que arras¨® sin la maquinaria del Partido Liberal, en poder de Serpa, necesitar¨¢ de la asistencia divina para arreglar Colombia. 'Ma?ana [por ayer], a primera hora, empezaremos a trabajar para apelar a una mediaci¨®n internacional, con objetivo preciso, con mandato determinado', anunci¨® en un discurso de 35 minutos, 'para buscar el di¨¢logo con los grupos armados al margen de la ley, sobre la base de que se abandone el terrorismo y se facilite un cese de hostilidades'. La abstenci¨®n en las elecciones del domingo fue alta, la m¨¢s alta de los ¨²ltimos ocho a?os, al alcanzar al 53,72% de los 24 millones de colombianos con derecho al voto. La intimidaci¨®n de los grupos armados, el analfabetismo, la desorientaci¨®n de los cerca de dos millones de desplazados, las distancias f¨ªsicas o la propia desesperanza la explican. De todas formas, desde que se instituy¨® la segunda vuelta electoral en la Constituci¨®n de 1991 nunca un candidato hab¨ªa ganado en la primera.
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