Voces del tendido

Grit¨® una voz popular: '?sta es la primera plaza del mundo y no se pica; ?qu¨¦ verg¨¹enza! Y le respondi¨® otra: 'C¨¢llate, borracho'. La primera surgi¨® de los tendidos de sol, y por el timbre pertenec¨ªa a un aficionado constante; la segunda, de la sombra y, apu¨¦stense lo que quieran a que era su primer festejo en este San Isidro. El de sol continu¨® su denuncia y otras voces de la sombra lo volvieron a vestir de limpio. A todo esto, el presidente sac¨® tajada de la situaci¨®n y dej¨® al novillo en el ruedo y se consum¨®, una tarde m¨¢s, el enga?o. El de sol no se calla, pero tiene m¨¢s raz¨®n que un santo. En la sombra, por lo general, prefieren hacer la vista gorda. Cosas del di¨¢logo norte-sur.

Y as¨ª nos va. Por cierto, no hay constancia de que el aficionado de la solanera hubiera empinado el codo m¨¢s de la cuenta. El borracho era el segundo novillo, cuya invalidez provoc¨® tan edificante di¨¢logo. Lo cierto es que Salvador Vega pag¨® los platos rotos y se las tuvo que ver con una largatija beoda que s¨®lo le permiti¨® mostrar buenas maneras. A eso, el de la sombra no dijo ni p¨ªo.

A pesar de todo, a pesar de los novillos mal presentados y ayunos de fortaleza, los tres novilleros demostraron unas enormes ganas de triunfo, manejaron los enga?os con variedad y torer¨ªa y dejaron abierta la esperanza para el futuro.

Uno de ellos, Mat¨ªas Tejela, sali¨® a hombros por la puerta grande despu¨¦s de recetar dos buenas estocadas, -sobre todo la segunda-, lancear con m¨¦rito por faroles y gaoneras y manejar con soltura la muleta. Especialmente vistoso result¨® un galleo por chicuelinas que cerr¨® con una larga cambiada de rodillas. En su primero hizo una faena larga en la que destacaron dos tandas de naturales bien ligados con el de pecho. En el otro, voluntarioso y porfi¨®n ante un animal parado.

Vega s¨®lo pudo lucirse con el capote por chicuelinas muy ce?idas y una media de cartel.La invalidez de su lote le impidi¨® incidir en el buen toreo que, sin duda, encierra.

Y el tercero, Iv¨¢n Garc¨ªa, busc¨® el triunfo con ansiedad. En el primero, se luci¨® con el capote, coloc¨® banderillas con espectacularidad, traz¨® bien los muletazos y los lig¨® con la planta muy quieta. Cuando ten¨ªa la oreja ganada, la espada cay¨® muy baja y el chaval se llev¨® las manos a la cabeza. En el otro fall¨® con los garapullos, pero exprimi¨® con temple las cortas embestidas de su oponente. Esta vez, no fall¨® con la espada, y el p¨²blico le premi¨® con una merecida oreja.

A¨²n resuenan los improperios contra el de sol. La vida...

La corrida de hoy: Corrida de la Prensa. Toros de distintas ganader¨ªas para Eloy Cavazos, Enrique Ponce y Miguel Abell¨¢n. A las siete de la tarde.