El carpetazo al 'caso Soria' abre la v¨ªa para archivar las causas de Chile y Argentina

Tanto la fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional como la defensa del ex militar argentino Adolfo Scilingo, el ¨²nico a disposici¨®n de la justicia espa?ola, se preparan para conseguir el archivo de las actuaciones en los casos de los cr¨ªmenes de las dictaduras argentina y chilena a partir del auto dictado por la secci¨®n tercera de la Sala de lo Penal del citado tribunal el pasado 31 de mayo, en el cual rechaz¨® la jurisdicci¨®n espa?ola para investigar el crimen de Carmelo Soria, el funcionario de la ONU de nacionalidad espa?ola secuestrado, torturado y asesinado el 14 de julio de 1976 en Santiago de Chile. La decisi¨®n afectar¨¢ tambi¨¦n a la solicitud de extradici¨®n del militar Ricardo Cavallo, detenido en M¨¦xico.

El origen de la decisi¨®n adoptada el viernes 31 de mayo se remonta a hace exactamente un a?o, cuando Joan Garc¨¦s, abogado de Laura Gonz¨¢lez-Vera, viuda de Carmelo Soria, funcionario espa?ol de Naciones Unidas, secuestrado, torturado y asesinado en julio de 1976 en Chile, solicit¨® al juez Baltasar Garz¨®n una orden de detenci¨®n internacional contra el ex ministro de Defensa de la ¨¦poca, Herman Brady, por el crimen de su esposo. El 8 de mayo de 2001, Garz¨®n dict¨® un auto en el que admit¨ªa una ampliaci¨®n de querella contra los militares chilenos y envi¨® la orden de detenci¨®n a Interpol. Brady, empero, no se hallaba en Hamburgo (Alemania) como se cre¨ªa.

La fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional recurri¨® la ampliaci¨®n de querella y la orden de detenci¨®n. Seg¨²n se?al¨®, Espa?a carec¨ªa de jurisdicci¨®n para juzgarle. Tambi¨¦n arguy¨® que en Chile se investigaban los hechos. El juez Garz¨®n desestim¨® el recurso. No exist¨ªa, por otra parte, ninguna causa abierta en Chile por el caso Soria, despu¨¦s del archivo definitivo de la causa en agosto de 1996. La fiscal¨ªa, pues, recurri¨® la decisi¨®n en queja ante la sala tercera de la Audiencia Nacional.

Durante casi un a?o, el recurso qued¨® en espera de resoluci¨®n en la sala tercera, integrada por Francisco Castro Meije, presidente, y los magistrados ?ngela Murillo y Luis Mart¨ªnez de Salinas. En los primeros d¨ªas de marzo de 2002, ?ngela Murillo fue nombrada presidenta del tribunal de la Operaci¨®n Temple, para sustituir al magistrado Carlos Cez¨®n. Tanto Cez¨®n como sus dos compa?eros de la sala cuarta de la Audiencia Nacional, Juan Jos¨¦ L¨®pez Ortega y Carlos Ollero, hab¨ªan autorizado para salir de la c¨¢rcel al narcotraficante El Negro, miembro activo de la Operaci¨®n Temple, hecho que dio lugar a una querella por un delito de prevaricaci¨®n por parte de la Fiscal¨ªa General del Estado.

A primeros de marzo pasado, la magistrada Murillo fue sustitu¨ªda en la sala tercera por Flor S¨¢nchez Mart¨ªnez. La citada sala convoc¨® el 4 de abril una vista oral para debatir el recurso de la fiscal¨ªa en el caso Soria y otro recurso de la defensa del ex militar Adolfo Scilingo. Sin embargo, mientras la acusaci¨®n argentina fue citada, Joan Garc¨¦s, abogado de la familia Soria, no. La vista se suspendi¨®.

La sala tercera convoc¨® a todas las partes para una nueva vista el pasado 27 de mayo. Pero ese mismo d¨ªa, al acudir a la Audiencia Nacional, el abogado de la familia Soria fue informado de que la vista se hab¨ªa aplazado. M¨¢s tarde, se le llamaba desde la sala tercera para convocarle de urgencia. La vista, pues, tuvo lugar ¨¦se mismo d¨ªa.

Cerrar de un plumazo

El auto del 31 de mayo supone cerrar de un plumazo el caso Soria, admitido a tr¨¢mite en mayo de 2001. Ahora en el punto de mira de la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional hay un objetivo m¨¢s ambicioso: solicitar a Garz¨®n el archivo de todas las actuaciones sobre Chile y Argentina. Las consecuencias, pues, son de gran alcance. La defensa de Scilingo, ¨²nico militar acusado de terrorismo, genocidio y tortura, ha anunciado que pedir¨¢ la libertad de su cliente ya que Espa?a carece, a partir del auto del 31 de mayo, de jurisdicci¨®n para juzgarle. Asimismo, la solicitud de extradici¨®n de Ricardo Cavallo, ex militar argentino bajo arresto en M¨¦xico desde agosto de 2000, ser¨¢ tambi¨¦n cuestionada por la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional con el apoyo de la citada resoluci¨®n.

Con todo, el juez Garz¨®n va a mantener su posici¨®n favorable a la juridicci¨®n, lo que elevar¨¢ la causa de Argentina y Chile nuevamente a la Sala de lo Penal. En este caso el pleno de todos los magistrados tendr¨¢ la oportunidad de pronunciarse.