El desquite de Beckham

Salieron tan orgullosos, a la cabeza de sus respectivas selecciones, los dos compa?eros de equipo en el Manchester United, Beckham y Ver¨®n. La ¨²ltima vez que los dos hab¨ªan jugado en equipos opuestos fue cuando se enfrentaron Argentina e Inglaterra en el Mundial de 1998. Beckham fue expulsado en aquel partido y las fotos mostraron a Ver¨®n pidiendo a gritos al ¨¢rbitro que le mostrara la tarjeta roja. Pero Beckham no guarda rencor a Ver¨®n. Los dos son amigos y, como han declarado muchas veces, se guardan un gran respeto mutuo.

Pero anoche se suspendieron las amistades. Cuando se enfrentan Argentina e Inglaterra en un partido de f¨²tbol, como todo el mundo sabe, es la guerra por otros medios. Beckham y Ver¨®n no s¨®lo eran los capitanes de sus selecciones, sino tambi¨¦n los generales, los encargados en cada caso de dirigir el juego. ?Qui¨¦n ganar¨ªa finalmente el duelo?

La verdad -gloriosa para Beckham y triste para Ver¨®n- es que no hubo mucho duelo. Beckham no hizo uno de sus mejores partidos. Reconoci¨® despu¨¦s que, aunque jug¨® los 90 minutos, no estaba en tono todav¨ªa tras la lesi¨®n -causada por un jugador argentino, el deportivista Duscher- que sufri¨® en el pie izquierdo hace ocho semanas. Pero hizo dos o tres buenos pases, no perdi¨® el bal¨®n y, en el minuto 44, marc¨® de penalti el gol de la victoria.

Ver¨®n, en cambio, jug¨® como ha jugado a lo largo de la mayor parte de la temporada pasada en el Manchester. Por debajo de las grandes expectativas que su talento crea. No tuvo ninguna penetraci¨®n en el pase, constantemente intentaba cosas que no le sal¨ªan y perd¨ªa balones de manera innecesaria. En el descanso, Marcelo Bielsa le sustituy¨® no por lesi¨®n, sino, como apunt¨®, 'por razones t¨¢cticas'.

El duelo lo hab¨ªa ganado Beckham, y en 45 minutos. Pero no s¨®lo Beckham, sino tambi¨¦n sus otros dos compa?eros del Manchester United, Scholes y Butt, que durante el primer tiempo ejercieron un dominio admirable sobre el territorio de Ver¨®n.

Pero, aunque Scholes y Butt fueron las estrellas de Inglaterra ayer, el que se llev¨® la gloria fue Beckham. No s¨®lo por el gol, sino porque con la victoria sobre Argentina puso punto y final al gran drama personal que ha vivido desde su famosa expulsi¨®n en 1998, consecuencia de una acci¨®n inmadura que, seg¨²n la opini¨®n p¨²blica inglesa, acab¨® cost¨¢ndole a Inglaterra el partido y la eliminaci¨®n del Mundial. Beckham fue crucificado por la prensa y denigrado por los aficionados de los equipos rivales del Manchester a lo largo de un a?o. Tal fue la intensidad del acoso que en cierto momento pens¨® en abandonar el f¨²tbol, seg¨²n ha reconocido.

Pero desde que asume la capitan¨ªa de la selecci¨®n inglesa la vida de Beckham se ha convertido en un cuento de hadas. Marc¨® el gol que dio a Inglaterra la clasificaci¨®n para el Mundial, lo cual le convirti¨® en h¨¦roe nacional, y ahora el gol contra Argentina que borra de una vez y por todas la amarga memoria de 1998 y lo coloca en un puesto a¨²n m¨¢s elevado, si eso es posible, entre los dioses ingleses.