Ibarretxe debate hoy con el PNV si propone la superaci¨®n del Estatuto

El lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, abordar¨¢ hoy en la reuni¨®n de la Ejecutiva del PNV el an¨¢lisis de las opiniones vertidas sobre la vigencia o posible superaci¨®n del Estatuto de Autonom¨ªa en la Comisi¨®n Especial de Autogobierno creada en el Parlamento vasco a propuesta suya. El pasado jueves concluyeron las comparecencias de las 56 personalidades invitadas a exponer sus puntos de vista. La comisi¨®n debe emitir un informe o dictamen.

El trabajo de la comisi¨®n concluir¨¢ con ese dictamen, que ser¨¢ debatido en un pleno del Parlamento, que podr¨ªa realizarse el pr¨®ximo 12 de julio. Pero hoy, con la comisi¨®n trabajando ya en r¨¦gimen de ponencia, no hay certeza de lo que ocurrir¨¢: Ibarretxe duda entre la conveniencia de acelerar y concluir los trabajos ahora o prolongar la vida de la comisi¨®n. Ni siquiera est¨¢ decidido si ¨¦sta elevar¨¢ un dictamen al pleno de la C¨¢mara o har¨¢ un informe-balance de su trabajo. El propio Ibarretxe y el PNV tienen hoy la cuesti¨®n sobre la mesa, en la reuni¨®n semanal que celebra la Ejecutiva del PNV con presencia del lehendakari.

La Comisi¨®n Especial de Autogobierno fue concebida como uno de los elementos clave de la estrategia de Ibarretxe en su nuevo mandato. Ateni¨¦ndose a un gui¨®n que sigue a rajatable, el lehendakari ha ido cubriendo etapas de lo que entiende como cumplimiento de su 'triple compromiso', ¨¦tico, pol¨ªtico y democr¨¢tico, y su 'triple s¨ª' a la vida, al di¨¢logo y al respeto a la voluntad de la sociedad vasca. En las conclusiones de la comisi¨®n espera el lehendakari encontrar el respaldo parlamentario a su planteamiento de buscar un 'nuevo consenso' -'nuevo Pacto de Estado', seg¨²n sus palabras en el pleno monogr¨¢fico de autogobierno de octubre de 2001- superador del Estatuto. En su esquema, la consecuencia natural, materializadora del 'respeto a la voluntad vasca', ser¨ªa la convocatoria de una consulta popular.

Pero los elementos de la coyuntura -en particular, el debate pol¨ªtico vasco sobre la Ley de Partidos y las elecciones municipales de 2003- hacen dudar a Ibarretxe sobre la conveniencia de pisar el acelerador u optar por un ritmo m¨¢s pausado. A lo primero le empujan su socio de Gobierno, Eusko Alkartasuna, y el sector del PNV m¨¢s identificado con el camino independentista anunciado por Arzalluz. A la prudencia le induce otra parte del PNV, con responsabilidades institucionales, como los diputados generales de Vizcaya y Guip¨²zcoa, y el alcalde de Bilbao, as¨ª como su propia situaci¨®n de minor¨ªa, que hace peligrar incluso la posibilidad de un dictamen si no logra al menos la abstenci¨®n de un grupo parlamentario. La del PP est¨¢ descartada, y para lograr la de Batasuna tendr¨ªa que expresarse con una claridad y en unos t¨¦rminos que har¨ªan chirriar algunos ejes en su propio partido.

Los socialistas est¨¢n dispuestos a avalar la reclamaci¨®n de desarrollo ¨ªntegro y de exploraci¨®n de todas las posibilidades que el marco vigente ofrece para revisar el autogobierno. Pero cualquier referencia a la autodeterminaci¨®n o a la indefinida consulta comprometida en el programa de Gobierno tendr¨¢ su oposici¨®n, seg¨²n se?al¨® el representante del PSE en la ponencia, Jes¨²s Eguiguren.

Fuentes cercanas a Ibarretxe apuntan, sin usar estas palabras, a una resoluci¨®n de perfil bajo, pero de la que no piensan apear la referencia al derecho y la capacidad de decisi¨®n. Y auguran que en los a?os pr¨®ximos 'deberemos tomar decisiones de tanta trascendencia como las de la transici¨®n, porque ya no valen pa?os calientes'.

En la comisi¨®n se han escuchado opiniones de todo tipo y han pasado por ella los negociadores del Estatuto en 1979, miembros del Gobierno vasco actual -no as¨ª del central- y de los anteriores, as¨ª como diputados generales, alcaldes, juristas y profesores de Universidad, representantes de la patronal y de los sindicatos. Y ha habido una ausencia llamativa: la del lehendakari Ardanza, el que m¨¢s tiempo ha estado al frente del Gobierno (14 a?os), que no ha sido invitado ni por su partido.