Mas relativiza las amenazas de Arenas y se niega a variar su pol¨ªtica

Ni el Gobierno catal¨¢n ni Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) temen, al menos p¨²blicamente, sumirse en la inestabilidad parlamentaria en Catalu?a de cumplirse las amenazas lanzadas por el Partido Popular (PP). Ayer, un prudente conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, advirti¨® de que la federaci¨®n nacionalista continuar¨¢ su 'independencia de criterio' respecto al Gobierno central y que, de momento, mantiene las convocatoria de las elecciones auton¨®micas en Catalu?a para el oto?o de 2003, o sea, en la fecha prevista.

Los nacionalistas no entienden el revuelo pol¨ªtico y el distanciamiento producido entre CiU y PP tras la huelga general. Para Artur Mas, la federaci¨®n no alent¨® el paro y, quien diga lo contrario, es un 'manipulador'. 'Basta ya de manipulaciones. CiU y el Gobierno [catal¨¢n] no han estado detr¨¢s de esta huelga. Pero el PP tiene que entender que no siempre se puede estar al lado del Gobierno [central] y en este caso han fallado las formas'.

Mas se esforz¨® ayer en relativizar las advertencias del secretario general del PP, Javier Arenas, sabedor de que los nacionalistas no pueden tensar m¨¢s la cuerda con sus fieles aliados parlamentarios. Pero a la vez, deben saber distanciarse con prudencia del PP hasta las elecciones si quieren mantener el electorado del centro nacionalista. 'El PP est¨¢ en su perfecto derecho de hacer oposici¨®n a CiU, pero nosotros no vamos a variar nuestra pol¨ªtica', manifest¨® Artur Mas. De momento, y si los populares no dan marcha atr¨¢s, CiU tiene desde hace m¨¢s de dos meses el compromiso verbal del PP de apoyar los pr¨®ximos Presupuestos del Gobierno catal¨¢n. En cualquier caso, y repitiendo el mensaje oficial de la federaci¨®n, el conseller en cap precis¨® que CiU pretende llegar tranquilamente al oto?o de 2003, pero no 'a cualquier precio'.