La marca de las suspicacias

'Se?or Blatter, ?le parece conveniente que el italiano Pier Luigi Collina vaya a dirigir la final cuando es uno de los reclamos publicitarios de la firma Adidas, la misma que patrocina a la selecci¨®n alemana?'. 'Esa compa?¨ªa tambi¨¦n es uno de los principales socios comerciales de la FIFA y que el se?or Collina haya hecho anuncios para Adidas no creo que suponga un conflicto en absoluto?'

Puede que para el presidente de la FIFA no sea motivo alguno de discordia, pero s¨ª lo es entre muchos brasile?os, vestidos por Nike, a quienes no les ha hecho demasiada gracia. Para quitar hierro al asunto, Luiz Felipe Scolari, el seleccionador brasile?o, se mostr¨® ayer encantado con su designaci¨®n y apunt¨®: 'Ganar dinero con un patrocinador no me parece ning¨²n delito, yo tambi¨¦n lo hago'.

A sus 42 a?os, este italiano de ojos disparados y cabellera segada, se ha convertido en el ¨¢rbitro m¨¢s promocionado del mundo. Ning¨²n ¨¢rbitro ha sabido explotar mejor su imagen. Collina se maneja tan bien en las pasarelas como Beckham o Ronaldo, y explota su imagen siempre que puede. Las firmas le aceptan como si fuera un goleador m¨¢s y ¨¦l jam¨¢s se inmuta ante las suspicacias que despierta. Tiene su propia p¨¢gina de Internet, en la que exhibe fotos con pelo, cuenta su vida y se excusa en la portada por no poder contestar todas las peticiones de aut¨®grafos o fotograf¨ªas que recibe.

Hijo de un funcionario del estado italiano y de una maestra, Collina, licenciado en Econ¨®micas y Comercio, pas¨® su juventud como defensa hasta los 15 a?os, cuando un compa?ero de pupitre le convenci¨® para que se hiciera ¨¢rbitro. A los 31 a?os debut¨® en la primera divisi¨®n del calcio y, desde entonces, su carrera ha sido vertiginosa. Dirigi¨® la final de los Juegos Ol¨ªmpicos de Atlanta en 1996, la incre¨ªble final de la Liga de Campeones entre el Bayern M¨²nich y el Manchester United en 1999 y la vuelta de la eliminatoria europea de esta misma temporada entre el Real Madrid y el Barcelona.

Su designaci¨®n para ese partido levant¨® la misma polvareda que ahora con el Alemania-Brasil. Poco antes hab¨ªa participado en un acto publicitario con Ra¨²l y Zidane, entre otros.

Pero a Collina, siempre exportador de una amplia sonrisa, no le importa. Y a la FIFA, por lo que se ve, tampoco. Su presencia con el silbato y la cartera con las tarjetas en la final era esperada e inevitable una vez consumada en octavos la eliminaci¨®n de la selecci¨®n italiana. Collina, de hecho, ya sab¨ªa antes de que empezara el Mundial que, a menos que Totti, Vieri y c¨ªa lo evitaran, el mediod¨ªa del domingo 30 de junio tendr¨ªa que trabajar en Yokohama (Jap¨®n).

En opini¨®n de Lennart Johansson, el sueco presidente de la UEFA, 'Collina es el mejor ¨¢rbitro del mundo'. Quiz¨¢ por ello su rostro, su cabeza pelada inconfundible, figuraba ayer en el principal anuncio publicitario de la web mundialista de la FIFA, patrocinada, por supuesto, por Adidas.