El Tribunal Superior de Justicia ordena el cierre del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa

La sede del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa, en Chamart¨ªn, tiene los d¨ªas contados. El Ayuntamiento de Madrid ha recibido una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia que ordena el cierre del centro por carecer de licencia municipal y por molestar con sus ruidos a los vecinos. 'Vamos a dar dos meses para el cierre de las instalaciones', afirm¨® ayer el gerente municipal de Urbanismo, Luis Armada. El instituto dividir¨¢ sus departamentos y se trasladar¨¢, temporalmente, a distintas sedes. Dentro de dos a?os se ubicar¨¢ definitivamente en Cantoblanco.

El Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa es un organismo que depende del Ministerio de Justicia y que se dedica a prestar asistencia cient¨ªfica a las investigaciones judiciales y policiales, sobre todo en asuntos de droga y para esclarecer las causas de una muerte. La sede de este centro est¨¢ situada, desde 1986, en el n¨²mero 9 de la calle de Luis Cabrera (Chamart¨ªn) y, desde ese momento, est¨¢ funcionando sin licencia municipal. Adem¨¢s, los vecinos de la zona, seg¨²n public¨® ayer El Mundo, han denunciado en varias ocasiones al instituto porque, a su juicio, sus instalaciones emanan hedores y ruidos insoportables.

El Ayuntamiento, debido a que el instituto funcionaba sin licencia y a las denuncias de los vecinos a causa de los ruidos originados por el sistema de aire acondicionado, orden¨® su clausura en 1995. El centro interpuso entonces un recurso contencioso-administrativo contra la orden de clausura, que fue denegado por los jueces. El organismo recurri¨® ante el Tribunal Superior de Justicia, que, en 1999, volvi¨® a dar la raz¨®n al Ayuntamiento. Toxicolog¨ªa no se dio por vencido e interpuso otro recurso, esta vez ante el Supremo. En febrero pasado, el alto tribunal deneg¨® el recurso al centro, y, el viernes pasado, el Ayuntamiento de Madrid recibi¨® un auto del Tribunal Superior de Justicia por el que ordena la ejecuci¨®n de la sentencia y, en consecuencia, la clausura de la dede del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa.

'Esto es el final del proceso. Ahora vamos a dar a Toxicolog¨ªa dos meses para que cierre las instalaciones porque necesita tiempo para organizar el cambio y porque realiza una actividad muy importante', se?al¨® ayer Luis Armada, gerente municipal de Urbanismo. Fuentes del Ministerio de Justicia reconocieron que el instituto lleva 16 a?os funcionando de manera ilegal. 'Desde 1995, la direcci¨®n del centro est¨¢ buscando una nueva ubicaci¨®n. Es cierto que han pasado muchos a?os, pero no es f¨¢cil encontrar un lugar para unas instalaciones tan complicadas', apuntaron estas fuentes.

A la Universidad Aut¨®noma

De momento, los responsables del instituto descentralizar¨¢n su sede de la calle de Luis Cabrera y repartir¨¢n sus departamentos en distintos lugares, como el Instituto Anat¨®mico Forense, sito en el campus de la Universidad Complutense, y otras dependencias universitarias. 'Dentro de dos a?os nos trasladaremos a la Universidad Aut¨®noma, en Cantoblanco. Hemos llegado a un principio de acuerdo con el rector y estamos ultimando los detalles del traslado', explicaron fuentes del Ministerio de Justicia. Y a?adieron: 'El traslado se debe a que no tenemos licencia municipal, y no por las denuncias de los vecinos. No es agradable buscarse otro sitio'.

Sobre las denuncias vecinales, fuentes de Justicia admitieron que comprenden las preocupaciones de los residentes, pero agregaron que las medidas de seguridad del instituto siempre han sido extremas. 'En el instituto se trabaja con sustancias t¨®xicas, pero en peque?as cantidades, y no con grandes bidones. Los desechos que se producen, incluidos los restos humanos, no se queman, ni se evacuan a trav¨¦s de las alcantarillas, ni se tiran a la basura, sino que una empresa especializada en desperdicios peligrosos se los lleva', aseguraron estas fuentes. 'Los residuos no tienen contacto con la poblaci¨®n de los alrededores', subrayaron.

Respecto a los olores que producen los an¨¢lisis que se realizan en el instituto, las mismas fuentes indicaron que los extractores de aire impiden la salida de ning¨²n hedor. 'Adem¨¢s, el almac¨¦n de gases se elimin¨® hace a?os. Las empresas nos traen diariamente el suministro de gases que necesitamos para la jornada', concluyeron.

Un empleado del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa, sin embargo, se?al¨® que los malos olores y los humos al exterior son constantes. 'Este asunto es muy antiguo. El ministerio no ha puesto soluci¨®n y ahora estamos desahuciados', denunci¨®. En cambio, desde el Ministerio de Justicia apuntaron que, en los 16 a?os que el centro viene funcionando, nunca ha habido ning¨²n incidente.