Dos nuevos f¨¢rmacos se presentan como alternativa terap¨¦utica

Dos nuevas familias de f¨¢rmacos que impiden que el VIH penetre en las c¨¦lulas sanas se presentar¨¢n en la Conferencia del Sida que se abri¨® ayer en Barcelona. Los expertos creen que estos f¨¢rmacos, que se han ensayado con resultados esperanzadores, pueden revolucionar el tratamiento del sida como ya sucedi¨® con los c¨®cteles de antirretrovirales presentados en Vancouver en 1996. Un estudio realizado en San Francisco indica que una de cada cuatro nuevas infecciones es por un virus resistente a los tratamientos actuales.

Las actuales terapias basadas en una combinaci¨®n de antirretrovirales con inhibidores de la proteasa pueden rebajar la carga viral de las personas seropositivas a niveles m¨ªnimos, pero no llegan a eliminarla. Los dos nuevos grupos de medicamentos que se dar¨¢n a conocer impiden que el VIH penetre en las c¨¦lulas no infectadas y que se integre en su genoma. Josep Maria Gatell, co-presidente de la XIV Conferencia del Sida de Barcelona, afirma que estos medicamentos, combinados con los actuales c¨®cteles de f¨¢rmacos, pueden dar lugar a tratamientos m¨¢s potentes que permitan a los cient¨ªficos replantearse de nuevo la posibilidad de lograr la erradicaci¨®n viral en personas ya infectadas. A?os atr¨¢s ya se hab¨ªa planteado esta posibilidad, pero hasta el momento se ha tenido que descartar, ya que las actuales terapias han demostrado que no pueden eliminar por completo la carga viral de los seropositivos.

Gatell explica que los nuevos f¨¢rmacos se agrupan en dos familias: los inhibidores de la fusi¨®n, que impiden la penetraci¨®n del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en las c¨¦lulas, y los inhibidores de la integrasa, que no permiten que el virus se integre en el material gen¨¦tico celular. Los primeros podr¨ªan empezar a comercializarse antes de un a?o, ya que los ensayos que se han realizado han superado todas las fases y est¨¢n listos para ser presentados ante las agencias del medicamento correspondientes para su aprobaci¨®n. Los inhibidores de la integrasa tardar¨¢n alg¨²n tiempo en salir al mercado, pues los ensayos se encuentran en una fase m¨¢s preliminar.

La ventaja de estos nuevos f¨¢rmacos consiste en que los infectados por el VIH podr¨¢n dejar de tomarlos despu¨¦s de un tiempo de iniciar el tratamiento sin riesgo de que el virus reaprezca. Las terapias combinadas con antirretrovirales, en cambio, han de mantenerse durante toda la vida del paciente si se quiere evitar que la carga viral aumente de nuevo.

Resistencias

La obtenci¨®n de nuevos f¨¢rmacos que act¨²en en una fase diferente del proceso de infecci¨®n es vital para progresar en el ¨¢mbito terap¨¦utico, pues uno de los problemas que han surgido en los ¨²ltimos a?os es el aumento de las resistencias a los medicamentos disponibles. Al menos uno de cada cuatro nuevos infectados en la ciudad de San Francisco se ha contagiado ya por una cepa del virus resistente a uno o varios de los f¨¢rmacos que ahora componen el c¨®ctel antirretroviral. El estudio, realizado por la Universidad de California, es uno de los que se presentan al congreso sobre el preocupante fen¨®meno de las resistencias.

La investigaci¨®n ha mostrado adem¨¢s que las resistencias afectan especialmente a los f¨¢rmacos que, por ser m¨¢s baratos, son susceptibles de ser utilizados antes en los pa¨ªses pobres. La aparici¨®n de resistencias plantea graves problemas terap¨¦uticos, pues cuesta el triple de tiempo de tratamiento controlar la infecci¨®n con el resto de medicamentos disponibles, si es que se consigue.

Los especialistas consideran que las nuevas familias de f¨¢rmacos son importantes, especialmente si se tiene en cuenta que la posibilidad de obtener una vacuna es lejana. Con esta perspectiva en el horizonte, miembros de unas 500 organizaciones encabezadas por la americana Aids Healthcare Foundation participaron ayer en una Marcha por la Vida para exigir a los laboratorios que permitan el acceso a los antirretrovirales a los 40 millones de enfermos que hay en el mundo. Las ONG plantean como primer objetivo dar tratamiento a por lo menos dos millones de personas antes de la pr¨®xima Conferencia del Sida de Bangkok.