Nada es como parece

Algunas personas han nacido para la simetr¨ªa. Nicolas Cage y su mujer, Lisa Maria Presley, est¨¢n hechos el uno para el otro porque el primero rod¨® Leaving Las Vegas, y la segunda es hija de Elvis, el hombre que hizo Viva Las Vegas. Del mismo modo, Ana Palacio y Colin Powell se mueven en un paralelo similar: ambos, en comparaci¨®n con los respectivos gobiernos a que pertenecen, son Rosa Luxemburgo y Martin Luther King. Sobre todo la ministra, que ha mejorado mucho desde que ha decidido prescindir de la asesor¨ªa en abalorios Tudor con que nos torturaba, y planea del orbe por sus confines con el set de complementos justo. Fuera agobios, y ni rastro de Gast¨®n & Daniela sobre los hombros. Vi¨¦ndoles juntos, a la ministra y a su no s¨¦ si llamarlo Hom¨®logo (en todo caso, s¨ª puedo llamarlo De Color, creo), ganas me dieron de que se casaran tambi¨¦n, a ser posible en Hawai.

Pero esto de las simetr¨ªas y de los adornos no significa nada. No hay mujer en el PP m¨¢s sencilla que otra Ana, la Mega-Mato, y ello, no obstante, a m¨ª me da m¨¢s miedo que el maxilar inferior de Acebes, que muestra una tensi¨®n considerable a lo Hannibal Lecter, en claro distanciamiento o asimetr¨ªa en relaci¨®n con sus dulces ojos. Si se me permite el rodeo, dir¨ªa que mientras los ojos de Acebes es como si cantasen Las ma?anitas, una cosa muy de al aire libre, la mand¨ªbula de Acebes es como si amenazara con Las mazmorritas, que m¨¢s de Interior no pueden ser.

La verdad es que, en este agosto, que, lo pilles por donde lo pilles, por continente o por contenido, es una desgracia, par¨¦ceme excesivo tener que soportar un planeta recalentado (ay, dolor de Praga) y, adem¨¢s, con el agravante de que en cualquier momento puede caernos la se?ora Mato repartiendo broncas. Pienso que el gran fracaso de Aznar, que por otra parte ha conseguido un Gobierno neocentrista gris marengo con las corbatas low profile que da mucho el pego, y que incluso ha logrado encerrar a Zaplana en la gama sobria sin que le vibre el tup¨¦, su gran fracaso, digo, es que de vez en cuando se les escape la Mato, la cual, sin collar ni pa?oleta alguna, consigue infundir ese p¨¢nico que provoca la mujer-mujer que siempre gusta a los hombres porque, como dec¨ªa la gran Rebecca West, no cabe duda de que es mala. Mala no s¨¦, pero redundando, Rebeca, s¨ª. Concretamente, la se?ora Danvers, pero en versi¨®n Patrones y Labores. Cuando pienso que los cronistas cre¨ªamos que el doberman del PP era ?lvarez Cascos... No cont¨¢bamos con el Ama de Claves.

Y es que nada es como parece. Parecer¨ªa que un Gobierno de derechas deber¨ªa fortalecer y apoyar a la polic¨ªa. Parecer¨ªa que una madura libertaria como yo deber¨ªa preferir un Estado con la polic¨ªa debilitada. Pues no y, adem¨¢s, no. La otra noche solt¨¦ el moco al enterarme de que el agente que muri¨® en el tiroteo de Madrid habr¨ªa salvado la vida si hubiera llevado puesto un chaleco antibalas como los protagonistas de la serie Polic¨ªas de Nueva York. 'Si lo quieres, te lo tienes que pagar, y con la miseria que ganamos no podemos gastarnos cien mil pesetas', vino a decir el representante del sindicato policial que hablaba por la radio. Y ah¨ª fuera, mientras tanto, al acecho, el Crimen Organizado. M¨¢s le vale a Acebes que tenga verdaderamente un buen plan para aumentar la seguridad ciudadana sin que se le queden los agentes en el intento; o bien que se decida a enviar de patrulla a la Dober Woman, aunque s¨®lo sea para que efect¨²e redadas de cacat¨²as entre los canap¨¦s de Embassy.

Retomando lo que dec¨ªa al principio, tengo que comentar que la afirmaci¨®n hecha en Washington por la ministra de Exteriores respecto a que el mundo estar¨ªa mejor sin Sadam Husein, no estoy plenamente de acuerdo. Es Irak lo que mejorar¨ªa much¨ªsimo. Al mundo, as¨ª en plan urgente y generalizado, quienes le sobran (incluso, o sobre todo, hablando en t¨¦rminos medio ambientales) son Donald Rumsfeld, Dick Cheney y la camarilla que ellos representan. Como los propios Palacio y Powell, por otra parte, no ignoran.

Viva la simetr¨ªa.