Schr?der defiende a Mobilcom

La decisi¨®n de France T¨¦l¨¦com de retirarse de Mobilcom pone al borde de la suspensi¨®n de pagos a esta empresa alemana, propietaria de una licencia de la nueva telefon¨ªa m¨®vil UMTS. El canciller Gerhard Schr?der llam¨® por tel¨¦fono al presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, para convencerle de que evitara la salida de la compa?¨ªa gala. El intento fue en vano.

Para salvar los cerca de 5.000 puestos de trabajo de Mobilcom, el Gobierno alem¨¢n y el Estado federado de Schleswig-Holstein eval¨²an ahora la concesi¨®n de garant¨ªas p¨²blicas que permitan mantener la financiaci¨®n de la compa?¨ªa, la primera que cotiz¨® en el Neuer Markt de Francfort. Las acciones perdieron ayer un 37,78%. 'Lo que podamos hacer para salvar los empleos, lo haremos. Con ello, sin embargo, no podemos distorsionar el mercado', sostiene Schr?der en una entrevista que se publica hoy en el peri¨®dico regional Neue Presse.

Las negociaciones entre la empresa y el Gobierno federal y regional tendr¨¢n lugar este fin de semana. Schr?der, que el domingo 22 se enfrentar¨¢ en las urnas al conservador Edmund Stoiber, ya hab¨ªa intentado en 1999 salvar de la quiebra a una empresa, en este caso la constructora Holzmann, que finalmente suspendi¨® pagos en marzo pasado.

El fundador de Mobilcom, Gerhard Schmid, anunci¨® que pedir¨¢ 'miles de millones de euros' en indemnizaciones a France T¨¦l¨¦com, que hab¨ªa tomado un 28,5% en su empresa en marzo del 2000, en plena euforia del UMTS. Mobilcom adquiri¨® una licencia para la nueva telefon¨ªa m¨®vil en Alemania por 8.400 millones de euros. Los altos costes de construcci¨®n de la correspondiente red y la conflictiva personalidad de Schmid y de su esposa, tambi¨¦n accionista de la empresa, condujeron a un paulatino distanciamiento entre ambas partes que ahora ha desembocado en una ruptura definitiva.

Las deudas de Mobilcom con diversos bancos acreedores y los proveedores de dispositivos Nokia y Ericsson ascienden a 6.400 millones de euros, de los que France T¨¦l¨¦com se har¨¢ cargo, seg¨²n la agencia alemana DPA.