Justicia hist¨®rica para la inmigraci¨®n

Hoy, 18 de septiembre, se votar¨¢n en el Senado las enmiendas al C¨®digo Civil en materia de nacionalidad, presentadas por los diversos grupos parlamentarios, que procuran hacer justicia hist¨®rica a toda la emigraci¨®n tradicional espa?ola y, en especial, a todos los descendientes del forzado exilio espa?ol despu¨¦s de la guerra civil.

Hasta ahora, han quedado claras las buenas intenciones de los grupos parlamentarios al haber incluido, todos ellos, enmiendas en las que consideraban a la descendencia (hijos y nietos) de los espa?oles que, por las causas que fueren, tuvieron que abandonar Espa?a.

Hoy no s¨®lo se debatir¨¢ el tema de nacionalidad espa?ola, sino que ser¨¢, tambi¨¦n, una prueba para la democracia espa?ola dado que, si en pro de lo justo y en conformidad con su Constituci¨®n, el Senado vota a favor de las enmiendas que mencionan a los hijos y nietos de espa?oles como derechohabientes a la nacionalidad, le har¨¢ justicia a todas las familias espa?olas en el destierro, ya fuera por hambre, ya fuera por ser republicanos.

Si decide no modificar el C¨®digo Civil, convertir¨ªa en m¨¢rtires a todas las familias espa?olas de ultramar, dado que se realizar¨ªa un acto inconstitucional, totalitario y, sobre todo, injusto; ya que la Constituci¨®n Espa?ola, a trav¨¦s de sus art¨ªculos 14¡ã y 42¡ã, nos reconoce como espa?oles al decir que no puede haber 'discriminaci¨®n alguna por raz¨®n de nacimiento (...) o cualquier otra condici¨®n o circunstancia personal o social', y obliga al Estado espa?ol a procurar nuestro retorno.

Somos espa?oles. Somos hermanos, hijos, nietos, sobrinos y primos de muchos de ustedes. Somos espa?oles, porque lo que la sangre ha dado no puede quitarlo un p¨¢rrafo del C¨®digo Civil. Tenemos abuelos, padres y hermanos espa?oles, y el Gobierno no nos quiere reconocer espa?oles s¨®lo porque le ha tomado 30 a?os acordarse de nosotros y ya hab¨ªamos cumplido la mayor¨ªa de edad.