Cr¨ªtica flamenca
El pasado martes se dio el pistoletazo de salida a la XII edici¨®n de la Bienal de Flamenco. Con el Alc¨¢zar por testigo y un cartel de aut¨¦ntico Poder¨ªo, los aficionados al flamenco pudimos disfrutar de una irrepetible velada. Hoy en d¨ªa es muy dif¨ªcil hacer coincidir sobre las tablas de un festival a artistas de la talla y solera de Bernarda de Utrera o la Paquera de Jerez. Quiz¨¢ sea ese el motivo por el cu¨¢l la cr¨ªtica especializada no encontraba palabras para describir lo acontecido en el viejo mexuar de Pedro I. Sin embargo, cu¨¢l ser¨ªa mi sorpresa al abrir el jueves 5 de septiembre el diario EL PA?S y encontrarme con el desafortunado art¨ªculo firmado por Margot Molina.
Y para ejemplo un bot¨®n. 'A la Macanita, la m¨¢s joven del cartel, le toc¨® romper el hielo tras la traducci¨®n al japon¨¦s de Poder¨ªo y lo hizo, junto a la guitarra de Diego del Morao, con una ton¨¢'.
Cualquier aficionado al flamenco que se precie sabe de sobra que la ton¨¢ es un cante ad libitum, es decir libre, por tanto se ejecuta sin acompa?amiento de guitarra tal y como Tomasa Guerrero lo hizo el pasado martes. Poco tiempo antes de que Diego del Morao subiese al escenario para tocarle por sole¨¢ en su segundo cante. Seamos serios por favor. Vale que el flamenco est¨¦ de moda, pero cualquiera no est¨¢ capacitado para opinar.-
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