Zaplana desata la ira sindical con una confusa defensa de la flexibilidad del despido
Las centrales avisan que el Gobierno se puede encontrar con una movilizaci¨®n contundente
El ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, defendi¨® ayer la necesidad de abrir un debate sin plazos sobre la flexibilidad y el coste del despido. Una afirmaci¨®n que provoc¨® una contundente respuesta de los sindicatos y que el ministro se vio obligado a matizar. Las centrales UGT y CC OO aseguraron que, si el Gobierno adopta alguna medida en ese sentido, se encontrar¨¢ con 'una movilizaci¨®n contundente'. En unas declaraciones posteriores, Zaplana precis¨® que el Ejecutivo no tiene intenci¨®n de abrir ninguna reflexi¨®n sobre la regulaci¨®n del despido.
El ministro Zaplana desat¨® ayer la cuarta pol¨¦mica de su breve mandato como ministro de Trabajo al asegurar que 'hay algunos debates que, en este pa¨ªs, no s¨¦ por qu¨¦, tenemos especialmente miedo a plantear y que es un error'. En concreto se refer¨ªa a un debate sobre el abaratamiento del despido, planteado por el economista Ram¨®n Tamames en un desayuno de F¨®rum Europa organizado por Nueva Econom¨ªa y Europa Press, y sobre el que el titular de Trabajo admiti¨® que, mientras se est¨¢ abriendo en otros pa¨ªses, en Espa?a no se est¨¢ planteando.
'Cuando estamos en periodos de tranquilidad, de serenidad', a?adi¨®, 'cuando no tenemos que tomar una medida acuciante para ma?ana, yo creo que esos di¨¢logos sobre cuestiones tremendamente complejas y conflictivas, desde el punto de vista del debate, son necesarios'. Sobre una eventual reforma de la normativa que regula los convenios colectivos, Zaplana asegur¨® que 'el Gobierno ha demostrado que cuando tiene que hacer una cosa, la hace', y que intentar¨¢ hacerla desde el di¨¢logo.
Esas propuestas lanzadas por el ministro desataron la ira de los sindicatos y del principal partido de oposici¨®n. El secretario de Acci¨®n Sindical de UGT, Antonio Ferrer, advirti¨® al Gobierno de que si adopta una medida de esas caracter¨ªsticas se agravar¨¢ su 'posici¨®n autoritaria', lo que merecer¨¢ 'una respuesta contundente, amplia y unitaria' de las centrales sindicales. Para el sindicalista, el problema de Espa?a no es el coste del despido, sino la precariedad del empleo que est¨¢ aumentando con las ¨²ltimas decisiones unilaterales del Ejecutivo de marzo de 2001 y del decretazo de mayo pasado. La UGT cree que el tema de la indemnizaci¨®n del despido ya se abord¨® en la reforma pactada de 1997, vincul¨¢ndolo a acentuar la estabilidad del empleo.
El secretario de organizaci¨®n de CC OO, Jos¨¦ Luis S¨¢nchez, afirm¨® que, 'cuando el di¨¢logo social se encuentra en un momento dif¨ªcil tras el decretazo y la huelga general, parece que el ministro tiene una actitud m¨¢s de charlat¨¢n que de prudente'. Con similar contundencia, el secretario de Pol¨ªtica Econ¨®mica del PSOE, Jordi Sevilla, manifest¨® que 'el se?or Zaplana ha hablado hoy desde la ignorancia del novato, buscando hacerse famoso con la provocaci¨®n y la modificaci¨®n unilateral de la negociaci¨®n colectiva'.
Tras producirse esas cr¨ªticas, el ministro de Trabajo aclar¨® que el Gobierno no pretende abrir ning¨²n debate o reflexi¨®n sobre la regulaci¨®n del despido. En declaraciones a Europa Press precis¨® que en ning¨²n momento hab¨ªa afirmado que el Ejecutivo tenga intenci¨®n de dar el primer paso: 'La pregunta que se formulaba [del economista Tamames], adem¨¢s, habla, en t¨¦rminos generales, de flexibilizar el mercado laboral, y esto no tiene por qu¨¦ ser sin¨®nimo de despido'.
Cuarta pol¨¦mica
Se trata de la cuarta vez que Zaplana, en su etapa de ministro de Trabajo iniciada hace algo m¨¢s de dos meses, se ve inmerso en una pol¨¦mica y obligado a enmendar anteriores declaraciones. La anterior se produjo el pasado 10 de septiembre cuando, en el Parlamento, propuso un debate para introducir la gesti¨®n mixta (p¨²blica y privada) en los servicios p¨²blicos y que requiri¨® una aclaraci¨®n de que eso no inclu¨ªa a las pensiones de la Seguridad Social.
El 30 de julio, en la reuni¨®n con los sindicatos para explicarles las l¨ªneas generales de los Presupuestos Generales de 2003, Zaplana mostr¨® su disposici¨®n a abrir una negociaci¨®n sobre el salario m¨ªnimo interprofesional requerida por las centrales para una sensible mejora. Otros miembros del Ejecutivo negaron que exista ese prop¨®sito, ya que se abrir¨¢ un mero periodo de consultas para comunicar que el salario m¨ªnimo aumentar¨¢ en 2003 tan s¨®lo lo que la inflaci¨®n prevista (el 2%). En relaci¨®n a la violencia dom¨¦stica, descalific¨® hace tres semanas la proposici¨®n de ley presentada por el PSOE, para al final tener que aceptar debatir una propuesta con todos los grupos pol¨ªticos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.