'El Milan nos va a necesitar y tendremos que estar ah¨ª'

Jorge Paulo dos Santos Futre (Montejo, Portugal, 1966), el ingenioso ejecutivo que ha conseguido sacar este verano diez futbolistas de una chistera vac¨ªa, enciende un cigarrillo light, deja que el cenicero patine sobre la mesa y sonr¨ªe. Es el mismo tipo que hace 15 a?os cruzaba el c¨¦sped del estadio Calder¨®n en un zig-zag imposible de detener. El mismo que en 2000 lleg¨® como salvavidas de un equipo roto que malviv¨ªa en la Segunda Divisi¨®n. Ahora, con la corbata desanudada y la camisa remangada, conversa sobre su dif¨ªcil tarea como director deportivo del Atl¨¦tico.

Pregunta. Luis Aragon¨¦s ha dicho que no le convence el modelo que usted representa, el de los directores deportivos.

'Todos los clubes estamos en crisis, pero nosotros m¨¢s por la intervenci¨®n judicial'

'Los milanistas no me han dicho nada sobre Torres. S¨®lo el Inter me ha preguntado por ¨¦l'

Respuesta. Lo s¨¦ y lo respeto, pero lo m¨¢s importante es el club. Lo que todos queremos es que las cosas funcionen bien y est¨¢n funcionando bien. Ten¨ªamos un objetivo, el ascenso, y lo conseguimos. De todos modos, tenemos una relaci¨®n muy buena. Cuando yo era jugador y ¨¦l mi entrenador, nos dijimos muchas cosas a la cara y sabemos c¨®mo es el car¨¢cter de cada uno.

P. ?l dice que as¨ª es el f¨²tbol moderno y que se ha de adaptar.

R. Antes de llegar, ¨¦l sab¨ªa lo que hab¨ªa. Pero Futre est¨¢ con Luis y Luis con Futre. Sabemos lo que hay que hacer para que el club llegue a donde debe estar.

P. Salvo Esteban, ning¨²n jugador de los que pidi¨® Luis.

R. Si ¨¦l ha tenido alguna duda con alguno de los que yo he hablado, cerca de 50, lo ha dicho. Lo contrario ser¨ªa una tonter¨ªa. Est¨¢ clar¨ªsimo que cada uno tiene que saber d¨®nde est¨¢ y lo que le corresponde hacer.

P. ?C¨®mo uno de los clubes con menos recursos ha sido el que m¨¢s se ha reforzado?

R. Con mucha imaginaci¨®n. Yo creo que lo m¨¢s importante fue la forma de pago. Por Contra y Javi Moreno, los m¨¢s caros, no empezaremos a pagar hasta septiembre de 2003. Y despu¨¦s, con muchos plazos, a cuatro a?os. S¨®lo hemos tenido que pagar al contado un mill¨®n de euros por Jorge por los problemas de Las Palmas.

P. ?Y c¨®mo consigui¨® que los clubes de origen de los cedidos paguen el 80% de sus fichas? No parece un buen negocio.

R. El f¨²tbol est¨¢ as¨ª. Igual que nosotros tenemos que pagar al Getafe un 50% de la ficha de Juan Carlos porque nos interesaba. Es as¨ª de claro. Y eso que Juan Carlos es nuestro ¨²nico cedido del que pagamos una parte de la ficha.

P. Sigue sin parecer un buen negocio

R. Sus clubes lo hacen para que los futbolistas vengan a una Liga en la que se pueden revalorizar y luego venderlos.

P. ?Por qu¨¦ casi todos sus refuerzos vienen del Milan?

R. El Milan nos hizo un favor muy especial. Ma?ana, seguro que nos va a necesitar y tendremos que estar ah¨ª.

P. Pero nadie hace favores a cambio de nada, ?no?

R. Est¨¢ claro que tengo una relaci¨®n especial con ellos [sus directivos y sus t¨¦cnicos], magn¨ªfica. Pero todos sabemos c¨®mo es este mundo: habr¨¢ que estar ah¨ª cuando nos necesiten.

P. O sea, que el Milan tiene ya una opci¨®n sobre Torres

R. No me dijeron nada de Torres. Sobre Torres s¨®lo me ha preguntado el Inter hace seis meses.

P. ?C¨®mo se gest¨® el fichaje de Albertini?

R. Albertini y Coloccini surgieron en medio de otras negociaciones. Coloccini, en la interminable de Javi Moreno. Lo de Albertini es porque yo habl¨¦ de Pirlo y me dijeron que iba a jugar retrasado. Entonces, pregunt¨¦: ?Y Albertini? As¨ª empezamos.

P. ?Y c¨®mo se negocian estas cosas? ?Como un ejecutivo de cualquier otra actividad?

R. No, hombre. Mi vida es el f¨²tbol. Es distinto hablar de un jugador que de un solar.

P. Parece que se le da bien.

R. Es mi vida. Firm¨¦ mi primer contrato a los 14 a?os. Nunca he tenido representante. S¨®lo un consejero, mi padre, y un abogado para dar fe. ?ste es mi mundo. Lo conozco de sobra.

P. Pero, aun as¨ª, a veces debe de ser muy duro negociar, ?no?

R. El fichaje m¨¢s rocambolesco y dif¨ªcil ha sido el de Javi Moreno porque parec¨ªa que estaba y luego no cuadraba alg¨²n n¨²mero, o con el Milan o con ¨¦l, y vuelta a empezar.

P. ?La clave est¨¢ en convencer a los jugadores?

R. S¨ª. As¨ª es m¨¢s f¨¢cil. Si Albertini o Contra no hubiesen dicho que s¨ª al Atl¨¦tico, habr¨ªa sido in¨²til hablar con el Milan. Por eso no vinieron Rui Costa o Rivaldo. No quisieron. La ¨²ltima palabra es la del jugador, siempre. Aunque a veces se les puede convencer, como yo a Hugo Leal hace dos temporadas. Le dije que un a?o m¨¢s, en Segunda, ser¨ªa tremendo y que ser¨ªa mejor, para el club y ¨¦l, que se fuera [al Par¨ªs Saint Germain].

P. ?Tanta falta hace el dinero?

R. Todos los clubes estamos en crisis. Y nosotros, m¨¢s por la intervenci¨®n judicial.

P. Hay retrasos en los pagos a la plantilla.

R. Hemos conseguido pagar pr¨¢cticamente toda la ficha del a?o pasado.

P. ?Sabe que Jes¨²s Gil le fich¨® para protegerse de la afici¨®n?

R. Gil estaba al borde del precipicio, s¨ª. Pero yo no lo vi as¨ª, sino como un reto. Interpret¨¦ que el club y ¨¦l me necesitaban.

P. ?Qu¨¦ hac¨ªa cuando recibi¨® la llamada de Gil?

R. Estaba tranquilo, con mi familia, reci¨¦n retirado y viviendo la vida. Pero cre¨ª que el club ten¨ªa que ser fiel a su historia.

P. ?Por qu¨¦ cree que cont¨® Gil con usted?

R. Por lo que he sido como jugador y porque sabe que puede confiar en m¨ª. Siempre ha habido un feeling muy importante entre los dos. Entre el amor y el odio. Pero, en el fondo, con un cari?o muy especial. Empezamos juntos: ¨¦l me llam¨® y no pude decir que no. Yo entonces era la perla del f¨²tbol europeo y podr¨ªa haber ido a cualquier sitio, pero vine al Atleti.

P. ?Ha sido duro negociar bajo la sombra de la intervenci¨®n judicial?

R. S¨ª. Tiene que firmar el interventor. Yo le llevo un contrato y a los dos d¨ªas me da la respuesta y firma o no. Tiene la palabra.

P. ?Ya se han arreglado sus relaciones con Miguel ?ngel Gil, el director general del club?

R. Son buenas. A veces, puede haber alg¨²n problema, pero es por el bien del club. Cada uno sabe d¨®nde tiene que llegar.

P. Hay quien dice que usted ambiciona ser presidente del Atl¨¦tico y que tiene dinero y carisma para ello.

R. No pienso en eso ahora. Entre otras razones, porque hay un presidente al que respeto. A m¨ª me gusta ir d¨ªa a d¨ªa. Tengo tres a?os m¨¢s de contrato y en ese tiempo quiero meter al equipo en la Liga de Campeones.

P. ?Por qu¨¦ eligi¨® la moqueta al c¨¦sped?

R. Ser entrenador ser¨ªa llevar las maletas siempre a cuestas.

P. Y ya est¨¢ harto de moverse.

R. S¨ª, he vivido en muy pocos a?os en seis pa¨ªses diferentes.