El 'embrollo Aitor'
El futuro del ganador de la Vuelta pasa por enredos contractuales que pueden ser de lenta soluci¨®n
Siempre que le preguntan por su futuro, Aitor Gonz¨¢lez, el impresionante ganador de la Vuelta, repite la misma respuesta, que es libre, que ya ha terminado su contrato con el Kelme, que le encantar¨ªa correr en el Banesto, que es el equipo de sus sue?os, que tiene muchas ofertas y que le gustar¨ªa llegar pronto a alg¨²n acuerdo. Siempre que le preguntan por su representado, ?ngel Buenache, representante de Aitor, se emociona y se lanza, repite que lo tiene todo aparcado esperando que llegue la oferta del Banesto, que es el mejor equipo y que all¨ª tiene que ir Aitor, aunque s¨®lo le ofrezcan una temporada, lo que no deber¨ªa ser el caso, porque ¨¦l sabe, de buena fuente, que el equipo continuar¨¢ por lo menos hasta 2005 y que all¨ª se har¨¢ Aitor m¨¢s grande todav¨ªa. La cosa parece sencilla, pero no: si un amor tan apasionado no cuaja es porque hay elementos ocultos, desconocidos. Detr¨¢s de Aitor y su futuro hay un embrollo. Aparece, de repente, un italiano por la sala de prensa y susurra al o¨ªdo que Aitor firm¨® el 10 de noviembre de 2001 en Civitanova Marcha, en medio de los Abruzos, un contrato de tres a?os con Vincenzo Santoni, el patr¨®n del Acqua & Sapone, el equipo de Cipollini y Perdiguero, a raz¨®n de 40, 50 y 60 millones de pesetas por a?o.
Y no s¨®lo eso, a?ade que Santoni, hombre de negocios, especialista en la compraventa, ha depositado el contrato ante la Uni¨®n Ciclista Internacional y que piensa hacerlo efectivo. Buenache, preguntado por el asunto, no dice ni que s¨ª ni que no, dice que no hay nada firmado, que en todo caso no es un contrato v¨¢lido, pero a?ade que alguien le est¨¢ tocando las narices en la UCI, y que, como siempre, Aitor quiere ir al Banesto. Pero el Banesto todav¨ªa no ha dado pasos muy significativos hacia Aitor, entre otras cosas porque a¨²n no hay presupuesto para contratarlo. Hay otros equipos que ya han preguntado por ¨¦l, como los belgas del Quick Step, y que tambi¨¦n han preguntado a la UCI sobre el supuesto contrato firmado y depositado en Lausana. Y les han respondido. 'El abogado de la UCI me ha dicho que el contrato es legal y v¨¢lido', dice Alvaro Crespi, el m¨¢nager del Quick Step. Y Manolo Saiz, director del ONCE-Eroski, y miembro del comit¨¦ central de la UCI, lo corrobora: 'El contrato existe y es bueno. A m¨ª me gusta Aitor pero no lo fichar¨¦ y me llevo muy bien con Ech¨¢varri, el jefe del Banesto, y no quiero que nadie me utilice para encarecerle el producto'. La cuesti¨®n parece clara de nuevo, pero no, a¨²n hay m¨¢s.
Resulta que Santoni, tiene a Aitor pero no tiene equipo, o, m¨¢s exactamente, no tiene patrocinador seguro para la pr¨®xima temporada. Acqua & Sapone duda; Cipollini deja caer que seguir¨¢ m¨¢s a?os y que es muy amigo del patr¨®n de Renault Italia y que puede que por ah¨ª llegue algo; pero no hay nada seguro. Pero Santoni, que se maneja bien en los enredos, se mueve sin parar y lanza rumores. El ¨²ltimo dice que ha llegado a un acuerdo con Mercatone Uno, la empresa que ya se ha cansado de patrocinar a Pantani, para que monte un equipo alrededor de Aitor y Cipollini. El negocio a¨²n no se ha confirmado. Pero si no se confirma, no pasa nada. 'Conociendo a Santoni no dudo que me llame ma?ana para venderme el contrato de Aitor', sonr¨ªe Crespi, otro personaje al que se le da bien moverse por las turbulentas aguas contractuales del ciclismo. Y en su tienda espera Santoni que hagan cola el Banesto, el Quick Step, el Fassa Bortolo y cualquier equipo al que le interese Aitor. Si es que lo relatado es todo el embrollo de Aitor.
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