Un tren y un arcoiris
Cipollini tiene un maillot blanco con siete rayas cruzadas, los siete colores del arcoiris. Cipollini tiene 35 a?os y unos ojos grises que parecen profundos cuando habla, una voz extra?amente baja y suave. Cipollini est¨¢ en una nube. 'He cumplido el sue?o de toda una vida', dice y se mira el maillot tan bonito. 'Y cuando ya estaba ganando y ve¨ªa que nadie me pod¨ªa adelantar, cuando empec¨¦ a levantar los brazos, cuando ya los ten¨ªa as¨ª, a media altura, dud¨¦ un segundo, un instante imperceptible, '?y si esto no es verdad?', me dije, '?y si sigo so?ando?' Pero Cipollini se gira, en medio de la sala de prensa, y ve a su alrededor a media Italia arrobada, y un poco m¨¢s lejos a Lombardi feliz. 'Le ha hecho a ¨¦l m¨¢s ilusi¨®n lanzarme hacia el Mundial que a m¨ª ganarlo, que ya es decir', dice Cipollini.
?l ha cumplido un sue?o, el sue?o de toda Italia. El ¨²ltimo italiano que gan¨® un Mundial fue Gianni Bugno. Lo hizo en 1992, en Benidorm. En el 82 gan¨® Saronni. En el 72, Marino Basso. El 2002 ten¨ªa que ser italiano tambi¨¦n. 'Ha sido una tremenda responsabilidad', dice Cipollini. 'Porque yo era el l¨ªder ¨²nico de la selecci¨®n y hab¨ªa exigido lealtad absoluta a todo el equipo. Cargaba con la presi¨®n de la naci¨®n entera, as¨ª que he estado muy tenso toda la carrera. Ha habido mucha tensi¨®n y un poco de miedo. Tem¨ªa que llegaran los ¨²ltimos 200 metros y encontrarme con las piernas vac¨ªas, sin fuerza, tem¨ªa no poder sprintar'.
Cipollini es el m¨¢s grande, el m¨¢s fuerte, el m¨¢s r¨¢pido cuando sale lanzado, cuando el sprint es cuesta abajo, como ayer, pero Cipollini no est¨¢ solo. Cipollini tiene un tren. Tiene un amigo, el gigante Scirea, que se encarga de hacer limpieza, de amedrentar a los rivales, de eliminar de la rueda del jefe a quien no tenga invitaci¨®n, sea ¨¦ste Freire o quien se ponga; otro vag¨®n, el m¨¢s importante es el veloz Lombardi, el sprinter de Chueca, el lanzador que le deja ya ganador, que descorazona a los rivales. Y ayer hasta tuvo al segundo italiano m¨¢s veloz, al Petacchi que le desafiaba en la Vuelta. 'Pero no quiero que digan que gano por el tren o porque intimido o por lo que sea', afirma Cipollini, el hombre de las 181 victorias, el ciclista en activo m¨¢s laureado. 'Quiero que digan que he ganado porque soy el m¨¢s fuerte'.
Cipollini tiene tres sponsors que quieren patrocinarle el a?o que viene, Polartec, Oliocuore y Mercatone Uno; Cipollini quiere un equipo grande para hacer cosas grandes. Cipollini, que a los 35 a?os logr¨® ganar el Mundial de ciclismo, tiene un sue?o: 'Quiero ganar la Mil¨¢n-San Remo con el maillot arcoiris. Quiz¨¢s entonces ya digan que soy un campionissimo'.
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