Reuniones secretas y mucho tel¨¦fono

Los sindicatos CC OO y UGT quieren contener la alegr¨ªa. Dicen que a¨²n habr¨¢ que ver la letra peque?a de lo que el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, ha prometido. Y que ser¨¢ preciso solucionar el tema del subsidio agrario. 'Pero tambi¨¦n somos conscientes de que es la primera vez en la historia de la democracia que con una huelga general el Gobierno rectifica algo que ya estaba implantado', sostiene el secretario de acci¨®n sindical de UGT, Toni Ferrer.

Lo que sigue es la historia de lo que la oposici¨®n considera la mayor rectificaci¨®n del Gobierno del PP vista desde el lado de quienes les hicieron rectificar y quienes han mantenido al menos cuatro reuniones secretas en los ¨²ltimos meses con un ministro. La marcha atr¨¢s se inici¨® el d¨ªa en que Eduardo Zaplana se sent¨® en su mesa del Ministerio de Trabajo. 'Pero Zaplana a¨²n no sab¨ªa que estaba dando marcha atr¨¢s', se?ala una fuente de CC OO.

'De cara a los medios, todo el mundo dec¨ªa que el di¨¢logo social estaba roto, pero Eduardo Zaplana quer¨ªa recuperar un clima de conversaci¨®n. Lo primero que hizo nada m¨¢s llegar al ministerio fue hablar con Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo y con C¨¢ndido M¨¦ndez [secretarios generales de CC OO y de UGT, respectivamente]. Reuniones informales de espaldas a la prensa ha habido por lo menos cuatro. Y conversaciones por tel¨¦fono, much¨ªsimas. No ha habido ministro que en dos meses haya hablado m¨¢s con los secretarios generales', a?ade la citada fuente.

'Al principio, Zaplana supl¨ªa la falta de conocimiento en la escena p¨²blica con debates m¨¢s ideol¨®gicos que sociales y pol¨ªticos... Aprovech¨® el verano y parte de septiembre para empaparse del decretazo... Juan Chozas [secretario general de Empleo] sigui¨® con Zaplana porque era el ¨²nico que conoc¨ªa el decretazo, todos los tejemanejes, la letra peque?a. Y poco a poco, Rato dej¨® de tener protagonismo en las negociaciones con nosotros, a pesar de que fue el primero que anunci¨®, durante el congreso del PP valenciano hace dos fines de semana, que el Gobierno estaba dispuesto a negociar', se?ala otro portavoz sindical.

'Nos consta', a?ade la citada fuente, 'porque nos lo ha dicho gente del PP, que hubo una reuni¨®n de militantes del PP valenciano con Aznar en la que le dijeron: 'No tiene sentido que haya sacado a Zaplana de aqu¨ª para quemarlo en dos meses en Madrid. Es absurdo que no tenga cierto margen de maniobra para negociar con los sindicatos'.

'El propio Zaplana no se ve¨ªa con margen de maniobra para negociar con nosotros sobre el decretazo. En los contactos que ten¨ªa con los sindicatos dec¨ªa que lo del decretazo ya estaba hecho y que su oportunidad para consensuar temas con nosotros ser¨ªa la mesa sobre siniestralidad laboral que se va a celebrar precisamente el lunes [por hoy]. Ah¨ª quiere dar el do de pecho y mostrarse como adalid del di¨¢logo', sostiene un portavoz de CC OO.

'Y nosotros, hasta hace 15 d¨ªas, las impresiones m¨¢s optimistas que ten¨ªamos es que hab¨ªa enmiendas de CiU y Coalici¨®n Canaria, lo que nos dejaba en un nivel de insatisfacci¨®n del 80%. El cambio se dio el s¨¢bado 28 de septiembre en Valencia, cuando Rodrigo Rato anunci¨® que el Gobierno iba a hablar con los sindicatos. No nos lo esper¨¢bamos', a?ade el citado portavoz. 'Entonces, Zaplana llam¨® a M¨¦ndez y a Fidalgo. Le preguntaron al ministro si la oferta iba a ir en serio o era un mero artificio publicitario. Y Zaplana dijo que la cosa iba en serio'.

'Y prueba de que Zaplana est¨¢ obsesionado por su imagen', contin¨²a la citada fuente sindical, 'es que el 5 de octubre habl¨® con los secretarios generales para decirles que no se les calentara la boca en los discursos de la manifestaci¨®n, no fuese que todo lo que iban a ofrecer les pareciese poco. Zaplana no quer¨ªa aparecer como que se baja los pantalones. La manifestaci¨®n, que estaba convocada desde 45 d¨ªas antes, result¨® ser la de mayor asistencia de fuera de Madrid. La anterior era la que se organiz¨® contra el Plan Hidrol¨®gico, que desplaz¨® 426 autobuses. En la de los sindicatos vinieron 1.300. Y, en efecto, C¨¢ndido M¨¦ndez y Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo han cuidado mucho el lenguaje, han dicho que no quer¨ªan vengarse de nadie, sino restituir derechos'.

Temas tab¨²

'Otro ejemplo m¨¢s de su insistencia en cuidar la imagen ante la opini¨®n p¨²blica y ante nosotros es que el d¨ªa que dijo ante los periodistas en el hotel Ritz que en este pa¨ªs hay temas tab¨² como el despido, de los que habr¨ªa que empezar a hablar, ese mismo lunes por la tarde, coincidi¨® con el secretario general de CC OO en el hotel Meli¨¢ Princesa, en la concesi¨®n de premios a la transparencia informativa, y le dijo a Fidalgo: 'Todo lo que se dice que he dicho yo esta ma?ana (estaba grabado, lo dijo), no tengo ning¨²n inter¨¦s en que forme parte de la mesa de trabajo; no hay nada de eso ni va a haber nada a la vuelta de la esquina', concluye una fuente pr¨®xima a los l¨ªderes sindicales.

Tanto en UGT como en Comisiones Obreras se muestran convencidos de que el Gobierno decidi¨® rectificar cuando se dio cuenta de que era muy dif¨ªcil prolongar un conflicto que 'estaba provocando una p¨¦rdida de cr¨¦dito pol¨ªtico y electoral. La ¨²ltima encuesta del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas se?alaba que hab¨ªa habido un 32% de participaci¨®n en la huelga general. Ya no era el 7%, ni el 12%, que es lo que el Gobierno sostuvo al principio. Y alguien en Moncloa supo dar la marcha atr¨¢s', asegura un portavoz de CC OO.

?Y qu¨¦ ha dicho el antiguo ministro de Trabajo Juan Carlos Rodr¨ªguez Aparicio sobre el rectificazo? 'Las relaciones personales de Aparicio con C¨¢ndido M¨¦ndez y Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo eran muy buenas. Se ha hablado con ¨¦l en la ¨²ltima semana en plan amigo. Y sus impresiones vienen a resumirse en la expresi¨®n 'ya lo dec¨ªa yo'. Aparicio sab¨ªa de lo que trabajaba, conoc¨ªa la legislaci¨®n laboral y la idea del decretazo no era suya, ni estaba de acuerdo con el esp¨ªritu de la ley. Cumpl¨ªa ¨®rdenes'.