Sanidad investiga 3.000 servicios mal prestados por las ambulancias regionales

El servicio de ambulancias en la regi¨®n no funciona y la Consejer¨ªa de Sanidad, abrumada por la cantidad y la gravedad de las deficiencias, ya prepara las primeras sanciones econ¨®micas contra la Uni¨®n Temporal de Empresas (UTE) que gestiona el transporte sanitario en la regi¨®n. En s¨®lo tres meses, de junio a agosto, las ambulancias han cometido 3.000 posibles faltas sancionables y en otras 6.314 ocasiones los traslados han tenido que ser hechos por la Cruz Roja o las ambulancias municipales por la incapacidad de la UTE para efectuarlos en el plazo de tiempo previsto.

Los pacientes que necesitan una ambulancia llevan meses denunciando que tienen que esperar muchas horas para que estos veh¨ªculos sanitarios les trasladen al hospital. A veces, incluso, las ambulancias no llegan nunca o los enfermos pierden su sesi¨®n de di¨¢lisis o de rehabilitaci¨®n a causa de los retrasos.

Ante la avalancha de cr¨ªticas, la Consejer¨ªa de Sanidad aument¨® a principios de junio el control que ejerce sobre la UTE que gestiona el servicio. Los primeros resultados de esta mayor vigilancia son desoladores: una de cada seis veces que una ambulancia es requerida en la regi¨®n para un servicio urgente, o el veh¨ªculo llega muy tarde o no llega nunca.

As¨ª ha ocurrido en 6.314 de las 41.228 intervenciones urgentes requeridas en la regi¨®n entre los meses de junio y septiembre. En esas 6.314 ocasiones, Sanidad ha tenido que acudir a la Cruz Roja (o a algunos ayuntamientos) para que sean sus ambulancias las que efect¨²en los servicios que la UTE es incapaz de ofrecer.

Las 432 ambulancias que gestiona la UTE hacen cada d¨ªa unas 470 intervenciones urgentes (aquellas en las que el paciente est¨¢ herido o enfermo, pero en las que su vida no corre peligro) y unas 2.600 no urgentes (desplazamientos programados a sesiones de di¨¢lisis o de rehabilitaci¨®n, por ejemplo). La UTE no act¨²a en caso de riesgo para la vida. En estas ocasiones son los servicios de emergencia (el Samur, el Summa o el Sercam) los que intervienen.

Sanidad obligar¨¢ a pagar a la UTE el coste de los traslados hechos por la Cruz Roja en su lugar. Seg¨²n Leticia Moral, directora general del Instituto Madrile?o de Salud (Imsalud), esta medida costar¨¢ a la UTE 18.000 euros mensuales.

Esta sanci¨®n, sin embargo, podr¨ªa ser s¨®lo la primera de una bater¨ªa de medidas que Sanidad ha preparado para que mejore el servicio. 'Es cierto que los pacientes han sufrido molestias en los ¨²ltimos meses. No permitiremos que la situaci¨®n siga as¨ª', declara Moral. Entre las medidas barajadas est¨¢ la rescisi¨®n del contrato firmado con la UTE en mayo, de una duraci¨®n de dos a?os y un presupuesto de 53 millones en total.

Sanidad investiga, adem¨¢s, 3.000 faltas cometidas por las ambulancias. El Imsalud registra estas faltas mediante dos canales: las reclamaciones que los pacientes efect¨²an ante el Gobierno y las irregularidades detectadas por los propios trabajadores de la red sanitaria p¨²blica.

'Estamos investigando todas y cada una de estas posibles faltas y sancionaremos a la UTE en correspondencia a las irregularidades cometidas', a?adi¨® la directora general del Imsalud.

Seg¨²n el contrato firmado con el Imsalud, las faltas se dividen en tres grupos: leves, graves y muy graves. Las leves son aquellas que causan molestias al paciente, pero que no perjudican a su salud, y que provocan al Imsalud un perjuicio econ¨®mico de menos de 600 euros. Es el caso, por ejemplo, de una sesi¨®n de di¨¢lisis que debe retrasarse varias horas porque el paciente no llega por culpa de la ambulancia. Una falta leve tiene una sanci¨®n m¨¢xima de 1.500 euros.

Las faltas graves (cuando la salud del paciente puede verse afectada o los perjuicios al Insalud son mayores) pueden ser sancionadas hasta con 4.500 euros y, en el caso de las muy graves, la multa puede llegar a ascender a 12.000.

El Imsalud tiene abierto otro expediente contra la UTE, ¨¦ste por una falta considerada 'muy grave', seg¨²n fuentes de Sanidad, por disponer de unas 65 ambulancias operativas menos de las acordadas. 'El pliego de condiciones dec¨ªa que en todo momento ten¨ªa que haber al menos 432 veh¨ªculos operativos. Las inspecciones han demostrado que las ambulancias en marcha son un 15% menos de las fijadas', lament¨® Moral.

Los problemas del servicio, habituales en la regi¨®n desde hace a?os, se agudizaron el pasado mes de mayo, cuando entr¨® en vigor el nuevo contrato de gesti¨®n del transporte sanitario.

El nuevo modelo de gesti¨®n preve¨ªa la unificaci¨®n de todas las ambulancias de la regi¨®n bajo un mando ¨²nico. Con esta medida, aplicada por la UTE, Sanidad pretend¨ªa lo contrario de lo que ha sucedido: reducir el tiempo de intervenci¨®n. Esto iba a conseguirse con la desaparici¨®n de las fronteras interiores entre las zonas atendidas por la decena de empresas concertadas que operaban en la regi¨®n. Cada una ten¨ªa s¨®lo una peque?a ¨¢rea asignada.

Esta divisi¨®n hac¨ªa posible, por ejemplo, que mientras en una zona faltaran ambulancias, en otra zonas hubiera veh¨ªculos parados sin hacer nada. La UTE que gestiona las ambulancias no ha atendido las llamadas de este peri¨®dico para conocer su versi¨®n.