El Gobierno catal¨¢n compr¨® hace seis meses la planicie de Castell por una cifra millonaria

La compra por parte del Gobierno catal¨¢n de unas 46 hect¨¢reas pr¨®ximas a la playa de Castell, en Palam¨®s (Baix Empord¨¤), por una cifra millonaria cuya cuant¨ªa no han querido concretar ni el Departamento de Medio Ambiente ni el de Econom¨ªa y Finanzas, ha abierto una pol¨¦mica por el presunto trato de favor otorgado a la inmobiliaria Camo S. A., que en el registro figura a nombre de Arturo Suqu¨¦ y su esposa, Carmen Mateu, propietarios de Casinos de Catalunya. Los partidos y grupos ecologistas que en su d¨ªa lograron que la zona no fuera urbanizable han calificado la compra de 'estafa a la ciudadana¨ªa' ya que consideran que para proteger el paraje no era en absoluto necesario comprarlo.

IC Verds, la plataforma Salvem l'Empord¨¤ y la entidad Salvem Castell, que han luchado por la protecci¨®n del paraje, consideran inexplicable que la compra se haya mantenido en secreto durante seis meses y que ayer todav¨ªa no se hubiera hecho p¨²blico el montante del dinero p¨²blico invertido en la operaci¨®n, que podr¨ªa rondar los 18 millones de euros. El Gobierno tampoco ha inscrito la finca en el Registro de Palam¨®s, donde deber¨ªa figurar la cuant¨ªa de la operaci¨®n.

Los cr¨ªticos con la compra, que se llev¨® a cabo durante el mes de marzo, consideran 'inexplicable' que la Generalitat adquiera el territorio con la intenci¨®n de protegerlo cuando una sentencia del Tribunal Superior de Justicia impide cualquier construcci¨®n en estos terrenos despu¨¦s de que una consulta popular convocada por el Ayuntamiento se decantara por no urbanizar la zona. Joan Boada, de IC Verds, calific¨® de 'err¨¢tica' la pol¨ªtica de compra de fincas del Gobierno catal¨¢n y asegur¨® que lo primero que se mira es si el propietario es 'una persona pr¨®xima a la ¨®rbita convergente'.

En el registro Mercantil figura como presidenta de la Inmobiliaria Camo S. A. Carmen Mateu Quintana y como vicepresidente su marido, Artur Suqu¨¦, influyentes empresarios a su vez propietarios de Casinos de Catalunya. Una fuente pr¨®xima a Suqu¨¦ declin¨® ayer en nombre del matrimonio hacer cualquier manifestaci¨®n sobre la venta.

Evitar suspicacias

Rafael Bonillo, portavoz de Salvem Castell, considera que el precio que supuestamente ha pagado la Generalitat por los terrenos es 'una aberraci¨®n'. Bonillo a?adi¨®: 'Creemos que es una estafa a la ciudadan¨ªa'. Salvem Castell mantiene que el 90% de los terrenos que forman parte del Plan de Espacios de Inter¨¦s Natural (PEIN) est¨¢n en manos privadas y no es necesario adquirirlos para asegurar su protecci¨®n.

El alcalde convergente de Palam¨®s, Jordi Pall¨ª, conoc¨ªa la operaci¨®n desde hace meses y cree que deber¨ªa haberse hecho p¨²blica para evitar suspicacias. Pall¨ª no quiso entrar en el precio de los terrenos. Asegur¨® que la compra constituye una alegr¨ªa para el municipio y culmina una de las demandas proteccionistas m¨¢s simb¨®licas. Para el alcalde, la titularidad p¨²blica de los terrenos es la ¨²nica que ofrece una garant¨ªa total. Admitiendo que la urbanizaci¨®n era actualmente imposible, alert¨® que en a?os venideros se hubiera podido plantear una recalificaci¨®n urban¨ªstica.

Pere Maluquer, director general de Bosques y Biodiversidad, ignora la fecha en que se acord¨® la compra, cu¨¢nto se ha pagado por los terrenos y los motivos por los que no se hizo p¨²blica la operaci¨®n. Aclara, sin embargo, que nadie debe dudar de la intenci¨®n de la Generalitat, que no es otra, seg¨²n ¨¦l, que buscar la protecci¨®n y la gesti¨®n m¨¢s efectiva. Maluquer conf¨ªa en que a finales de a?o pueda presentarse el plan especial de protecci¨®n de Castell-Cap Roig, en el que se incluyen tambi¨¦n las 30 hect¨¢reas del paraje de Castell, adquiridos por la Generalitat en 1999 por 2.400 millones de pesetas, tambi¨¦n con cierta pol¨¦mica.

Fuentes de la Generalitat apuntaron la posibilidad de que la compra fuera un compromiso del anterior titular de Medio Ambiente, Felip Puig, de ah¨ª que el nuevo consejero, Ramon Espadaler, no quisiera cargar con las cr¨ªticas que acarrear¨ªa hacer p¨²blica la noticia.

La compra ha causado sorpresa en otros colectivos ecologistas. Quim Rutllan, de Salvem Pinya de Rosa, record¨® que hace poco Artur Mas dijo que el Gobierno no ten¨ªa un cheque en blanco para comprar todo lo que hab¨ªa que proteger. 'Puesto que se ha vuelto a abrir el talonario, pedimos la compra de Pinya de Rosa', dijo.