'El 'manga' da a conocer Jap¨®n al mundo', afirma la dibujante Yuu Watase
La autora de 'Fushigi Yugi' ha vendido 13 millones de ejemplares de sus ¨¢lbumes
Hay una diferencia sustancial entre la afici¨®n al manga en Espa?a y el mercado japon¨¦s. Una diferencia que no tiene nombre, sino n¨²mero. Yuu Watase (Osaka, 1970) ha vendido en Jap¨®n 13 millones de ejemplares de los 18 vol¨²menes publicados de la serie Fushigi Yugi (Juego misterioso), una de las apuestas editoriales de Gl¨¦nat Espa?a. Watase, quien opina que el manga 'da a conocer Jap¨®n al mundo', ha viajado a Barcelona para participar en el Sal¨®n del Manga, que se celebra en La Farga de L'Hospitalet de Llobregat.
El fen¨®meno de la afici¨®n al manga, tan extendido entre los j¨®venes, sigue siendo dif¨ªcil de explicar. Tanto como la reacci¨®n de algunos mangakas -dibujantes de manga- japoneses: Yuu Watase se tumb¨® en la mesa de la sala de prensa y recibi¨® unos masajes antes de iniciar la entrevista. En Espa?a, los otakus -aficionados al manga- suelen serlo por su afici¨®n a las series de dibujos animados japonesas -anime-. Cuando una serie de dibujos triunfa en televisi¨®n suele garantizar su ¨¦xito en c¨®mic. Pero en Jap¨®n, el proceso es inverso. El ¨¦xito del manga es el que permite su adaptaci¨®n animada. 'Hay que afinar mucho en la versi¨®n en dibujos, ya que muchos lectores tienen una expectativa de c¨®mo han de ser las voces de los personajes', explica la dibujante. El v¨ªnculo con el lector es otro de los factores que hacen del manga un fen¨®meno de masas en Jap¨®n, ya que los c¨®mics van dirigidos a sectores muy espec¨ªficos: amas de casa, oficinistas, aficionados al deporte, ni?os y adolescentes... Los mangas suelen leerse en los largos trayectos al trabajo o a la escuela, y una vez terminados, son lanzados a los contenedores p¨²blicos que suele haber en las estaciones de metro para esta funci¨®n.
'Si algo resume mi trabajo es lo importantes que son los sentimientos'
Las historias de Watase suelen dirigirse a las chicas -shojo manga- y en sus ¨¢lbumes establece una relaci¨®n directa con su p¨²blico con comentarios que se insertan junto a la narraci¨®n del c¨®mic. 'Las historias se publican originalmente en revistas donde hay unos espacios para la publicidad. Cuando se recopilan las p¨¢ginas en vol¨²menes, quedan estos espacios en blanco', cuenta Watase. En la serie El juego misterioso, encontramos estos espacios aprovechados por la autora para explicar al lector que en su vida real ha comprado un beb¨¦ de Yorkshire Terrier, y que se ha instalado un hilo musical con 440 canales, entre los que se incluye uno para insomnes, en el que se escucha una voz de hombre contando ovejitas, otro que emite continuamente aplausos y uno m¨¢s que recoge el sonido ambiente de una sala de juego japonesa. Tambi¨¦n los hay que emiten m¨²sica.
La afici¨®n de Watase por el c¨®mic fue temprana. 'A los cuatro o cinco a?os yo ya quer¨ªa ser dibujante de c¨®mics', dice. Su oficio incluso parece tener un cierto componente patri¨®tico. 'Soy consciente de que el manga ha triunfado en Occidente, por eso pienso que es una manera muy buena de dar a conocer nuestra cultura al mundo, lo que exige cierta responsabilidad de los autores de c¨®mic'.
El sistema de producci¨®n en Jap¨®n exige celeridad. Sin dejar de ser una obra de autor, el trabajo de Watase est¨¢ apoyado por tres dibujantes m¨¢s. 'Se encargan de los fondos, los efectos gr¨¢ficos y las tramas. Yo siempre dibujo los personajes', aclara.
Juego misterioso, su ¨¦xito actual en Espa?a, ha tenido su adaptaci¨®n televisiva que emite TV-3. La obra tiene su base argumental en un mito chino. Las protagonistas de la obra son unas amigas que al preparar sus ex¨¢menes en el instituto descubren un libro antiguo: El universo de los cuatro dioses. El hallazgo les transporta a un universo fant¨¢stico. El tema de las leyendas ancestrales se suele mezclar en el c¨®mic japon¨¦s con conceptos actuales y, sobre todo, con el impulso pasional de los personajes. 'Mi trabajo si se puede resumir en algo es en lo importantes que son los sentimientos'.
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