Espa?a aumenta el gasto por alumno, pero sigue por debajo de la media de la OCDE

Espa?a ha perdido una oportunidad de oro para reducir sus carencias educativas. El Gobierno del PP no ha aprovechado el crecimiento econ¨®mico de los ¨²ltimos a?os para impulsar las inversiones en educaci¨®n y Espa?a sigue estando en la zona baja de las estad¨ªsticas educativas de la OCDE, seg¨²n se desprende de los datos divulgados ayer. El gasto por estudiante ha crecido, gracias en buena parte a la ca¨ªda en el n¨²mero de alumnos, aunque el gasto p¨²blico educativo en 1999 fue dos d¨¦cimas inferior al de 1995 en porcentaje del PIB. En este aspecto, Espa?a ocupa el lugar n¨²mero 19 sobre 28 pa¨ªses.

En valor absoluto y a precios constantes de 1999, el gasto unitario por alumno ha crecido m¨¢s de un 20% entre 1995 y 1999 en pa¨ªses como Australia, Espa?a, Grecia, Polonia, Portugal y Turqu¨ªa, aunque la OCDE subraya que en el caso espa?ol, como en el de Jap¨®n, eso se debe a que 'una ca¨ªda de los efectos de m¨¢s del 9% ha dado lugar a un significativo aumento de los gastos de educaci¨®n por alumno'.

'Espa?a ha mejorado mucho en los ¨²ltimos 20 a?os, pero las distancias siguen siendo muy grandes', sintetiz¨® ayer el alem¨¢n Andreas Schleicher, jefe de la divisi¨®n de Indicadores y An¨¢lisis en educaci¨®n de la Organizaci¨®n de Cooperaci¨®n y Desarrollo Econ¨®micos (OCDE). Schleicher, que present¨® en Londres Education at a Glance, el informe anual de la OCDE sobre educaci¨®n, invit¨® a las autoridades espa?olas a ser m¨¢s ambiciosas al subrayar que 'Espa?a est¨¢ a¨²n lejos de la media y deber¨ªa compararse con pa¨ªses como Jap¨®n a la hora de fijarse objetivos'.

Las estad¨ªsticas presentadas por Schleicher muestran esa falta de ambici¨®n del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. La OCDE revela que el gasto p¨²blico en educaci¨®n en Espa?a cay¨® del 4,7% en 1995 al 4,5% del PIB en 1999. No es un fen¨®meno aislado. De hecho el gasto medio en la OCDE ha ca¨ªdo del 5,4% al 5,2% debido a que el gran crecimiento econ¨®mico de ese periodo ha aumentado la riqueza global a un ritmo m¨¢s r¨¢pido que el gasto en educaci¨®n.

Sin embargo, en el caso espa?ol el dato es pol¨ªticamente m¨¢s significativo porque, pese al desarrollo econ¨®mico y social de los ¨²ltimos dos decenios, sigue estando en la parte baja de la OCDE en ratios y gasto educativo. Espa?a ocupa el lugar n¨²mero 19 sobre 28 pa¨ªses en gasto educativo medido en porcentaje sobre el PIB. El 4,5% espa?ol est¨¢ muy lejos del gasto destinado en pa¨ªses como Dinamarca (8,1%), Suecia (7,7%) o Noruega (7,4%). Pero tambi¨¦n detr¨¢s de pa¨ªses como Portugal (5,7%), Polonia (5,2%) o Hungr¨ªa (4,7%).

Gasto p¨²blico

El gasto educativo espa?ol en relaci¨®n al gasto p¨²blico total alcanz¨® en 1999 el 11,3%, con una mejora de siete d¨¦cimas respecto a 1995. Pero a¨²n y as¨ª Espa?a sigue estando muy por debajo de la media de la OCDE (12,7%) y en la zona baja de la clasificaci¨®n: el n¨²mero 17 sobre 25 pa¨ªses. El gasto espa?ol contrasta con el 22,6% de M¨¦xico o el 17,4% en Corea, el pa¨ªs que ha dado el mayor salto cualitativo. Las cifras son tambi¨¦n altas en Noruega (15,6%), Suiza (15,2%), Dinamarca (14,9%), Australia (14,6%), Eslovaquia (13,8%), Suecia (13,6%), Irlanda (13,2%) y Portugal (13,1%).

Si se cruzan los datos de calidad de la ense?anza (medida en t¨¦rminos de rendimiento) y de equidad (diferencias de rendimiento) Espa?a est¨¢ en el cuadrante de los pa¨ªses con una calidad inferior a la media y una equidad superior a la media, justo al lado de Italia.

El informe de la OCDE pone tambi¨¦n de relieve que los maestros y profesores espa?oles est¨¢n entre los que m¨¢s cobran del mundo en t¨¦rminos relativos y menos horas lectivas tienen del mundo, al menos los de secundaria. Corea encabeza la lista en este aspecto.

El ratio del salario de un ense?ante espa?ol de la secundaria posobligatoria tras 15 a?os de trabajo es de 1,77 en relaci¨®n al PIB. Es un ¨ªndice s¨®lo superado por Corea (2,48), Suiza (2,18) y Turqu¨ªa (1,91). El de los ense?antes de secundaria obligatoria (1,65) s¨®lo est¨¢ superado por cuatro pa¨ªses y el de primaria (1,52) por seis. Pero mientras los maestros de primaria est¨¢n en la zona alta de horas lectivas (casi 900 al a?o), los de secundaria (menos de 600 horas) s¨®lo van menos a clase que sus colegas h¨²ngaros y japoneses.