Un funcionario de Lleida, juzgado por un desfalco de 8.000 euros
La Diputaci¨®n de Lleida, gobernada por Converg¨¨ncia i Uni¨®, ha sentado en el banquillo de los acusados de la Audiencia provincial al funcionario Jos¨¦ de la Iglesia Palomera, para quien la acusaci¨®n particular del organismo local solicita una pena de cuatro a?os de prisi¨®n y 10 de inhabilitaci¨®n absoluta por la supuesta apropiaci¨®n de m¨¢s de 8.000 euros de una oficina del Organismo Aut¨®nomo de Gesti¨®n y recaudaci¨®n de Tributos Locales. Un jurado popular tendr¨¢ que decidir si considera culpable al acusado, que nunca ha negado su acci¨®n y que ya ha restituido la tercera parte del dinero supestamente desfalcado. El ente provincial quiere que el caso que se juzga en la Audiencia de Lleida sirva de ejemplo para el resto de recaudadores.
Los hechos se remontan al a?o 1997 cuando el acusado, auxiliar de la oficina de recaudaci¨®n de T¨¤rrega, ofreci¨® a dos contribuyentes de esa ciudad la posibilidad de pagar de forma fraccionada sus deudas tributarias con la Diputaci¨®n, que ascend¨ªan a 5.980 y 2.464 euros, respectivamente. De acuerdo con el relato del fiscal, que pide 4 a?os de c¨¢rcel y 6 a?os de inhabilitaci¨®n para el supuesto desfalcador, De la Iglesia recibi¨® durante un a?o 21 entregas de dinero, pero no lo ingres¨® en la cuenta del organismo aut¨®nomo de recaudaci¨®n como era su obligaci¨®n. Los deudores, a su vez, recib¨ªan el correpondiente justificante de sus entregas a cuenta con su firma y el sello de la oficina de recaudaci¨®n.
Reclamaci¨®n reveladora
La Diputaci¨®n de Lleida no descubri¨® el desfalco hasta dos a?os m¨¢s tarde de haberse producido y fue cuando uno de los contribuyentes afectados present¨® una reclamaci¨®n porque la corporaci¨®n provincial pretend¨ªa cobrarle unas deudas fiscales que ¨¦l consideraba saldadas. Entonces se abri¨® una investigaci¨®n y el acusado acab¨® reconociendo que se apropi¨® de m¨¢s de 8.000 euros, de los cuales en la actualidad ya ha retornado 5.600.
Durante la vista oral, De la Iglesia explic¨® que se apropio de ese dinero 'por pura necesidad', ya que en aquellos momentos se acababa de separar de su mujer y estaba atravesando por una mala situaci¨®n econ¨®mica.
La defensa del acusado consider¨® exageradas las peticiones del fiscal y de la acusaci¨®n particular teniendo en cuenta que el mismo De la Iglesia ha reconocido la irregularidad e la que se le acusa desde el primer momento, ha colaborado en la investigaci¨®n y empez¨® a devolver el dinero sustra¨ªdo cuando las circunstancias personales se lo han permitido. Por ello, la defensa del funcionario p¨²blico solicit¨® para su cliente una pena de un a?o de prisi¨®n y seis meses de suspensi¨®n para el ejercicio de cargos p¨²blicos y adem¨¢s que se aprecien las atenuantes de estado de necesidad, arrepentimiento espont¨¢neo y voluntad de reparar el da?o causado.
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