"El Gobierno se limit¨® a cumplir la ley"

Desde las filas de la izquierda y los sindicatos arrecian las cr¨ªticas al subdelegado del Gobierno en M¨¢laga, Carlos Rubio, por la actuaci¨®n de las fuerzas de seguridad del Estado el pasado martes, ante una manifestaci¨®n no autorizada para protestar por la reforma del PER. Rubio repite, sin embargo, que se limit¨® a cumplir la ley y a garantizar la seguridad de la cumbre bilateral que ese d¨ªa reuni¨® en M¨¢laga al presidente de la Rep¨²blica Francesa y al presidente del Gobierno espa?ol.

Pregunta. Izquierda Unida le ha denunciado por el "secuestro" de numerosos autobuses y desde el PSOE le acusan de poner la ciudad en "estado de sitio"...

Respuesta. Es una barbaridad. Se trata del cl¨¢sico gesto teatral para prolongar al m¨¢ximo el impacto medi¨¢tico de una manifestaci¨®n ilegal, que fue un fracaso.

"Es irresponsable el apoyo de Chaves a un acto ilegal; ha actuado como Gaspart"

P. ?Por qu¨¦ deneg¨® usted el permiso para la manifestaci¨®n?

R. Cuando se presenta la solicitud por parte de Comisiones Obreras y UGT, se resuelve que f¨ªsicamente no pueden celebrarse en el mismo sitio dos acontecimientos como una cumbre y una manifestaci¨®n. Si a eso unimos las razones de seguridad, la resoluci¨®n fue no prohibir, sino indicar un sitio alternativo a doscientos metros de la Subdelegaci¨®n.

P. Y usted defiende que su actuaci¨®n ha sido legal.

R. El Gobierno se limit¨® a cumplir la Ley. Y en contra de lo que han dicho los sindicatos o el presidente de la Junta no se ha prohibido ninguna manifestaci¨®n. La Ley permite modificar el horario, modificar el lugar o prohibirla. De las tres opciones la resoluci¨®n fue adecuada para lo que ellos pretend¨ªan: mantener el mismo horario, pero en otro lugar.

P. Entre los que se habr¨ªan equivocado se le olvida a usted mencionar al presidente del Gobierno, que en el mitin cena de Marbella, en la noche del martes, dijo que dos tribunales distintos hab¨ªan desautorizado esta manifestaci¨®n.

R. Fue una confusi¨®n, no lo dijo correctamente, pero ¨¦l conoc¨ªa cual era la realidad de los acontecimientos.

P. Los sindicatos recurrieron su decisi¨®n ante el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA).

R. La Sala rechaz¨® el recurso y reafirm¨® la resoluci¨®n gubernativa, que pas¨® a ser tambi¨¦n judicial. Por ejemplo, hac¨ªa suya la propuesta de la Plaza de le Merced para celebrar la manifestaci¨®n.

P. ?Ustedes plantean una incompatibilidad entre el ejercicio de la libertad de expresar una protesta contra el Gobierno y la seguridad de los dirigentes pol¨ªticos?

R. Jam¨¢s. En M¨¢laga suele haber muchas manifestaciones. En algunas ocasiones, en las que hemos modificado el recorrido, el Tribunal nos ha quitado la raz¨®n y se la ha dado al recurrente. Cuando el TSJA le da raz¨®n al recurrente, tenemos que aceptar los t¨¦rminos que establece. Si en esta ocasi¨®n el Tribunal hubiese aceptado el recurso de los sindicatos, ?qu¨¦ habr¨ªan dicho todas estas personas que ahora nos critican si en lugar de acatar la resoluci¨®n judicial les hubi¨¦semos impedido manifestarse?

P. Parece sorprendido por las cr¨ªticas.

R. Estas cr¨ªticas me han parecido un acto de irresponsabilidad grave por parte de muchos cargos p¨²blicos, singularmente por la m¨¢s alta representaci¨®n del Estado en la Autonom¨ªa: el presidente de la Comunidad. Manuel Chaves es el m¨¢ximo representante del Estado en Andaluc¨ªa y de una forma expl¨ªcita e incluso impl¨ªcita apoya la celebraci¨®n de actos ilegales o contrarios a la normativa, y est¨¢ dando respaldo al incumplimiento de una sentencia judicial.

P. ?Est¨¢ usted comparando al presidente andaluz con Gaspart?

R. S¨ª, Chaves ha actuado como Gaspart, me ha le¨ªdo usted el pensamiento.

P. ?Dio usted instrucciones a la Guardia Civil para que desviara los autobuses?

R. La Guardia Civil ten¨ªa instrucciones, y tambi¨¦n la Polic¨ªa, de hacer controles que garantizasen la seguridad de la cumbre.

P. Ese eufemismo significa que deb¨ªan procurar que no llegaran.

R. Todos llegaron, aunque alguno se retrasara. Calificar esto de secuestro me parece una barbaridad. La instrucci¨®n que ten¨ªan las fuerzas de seguridad era revisar cualquier veh¨ªculo que pensasen que pod¨ªa alterar el desarrollo de la cumbre. Eso llev¨® a la parada de veh¨ªculos y en alguno se encontraron instrumentos que fueron requisados, como hoces o palos.

P. ?Le ha sorprendido el impacto medi¨¢tico que ha tenido esta manifestaci¨®n?

R. Una manifestaci¨®n de 3.000 ¨® 4.000 personas dif¨ªcilmente hubiera tenido una repercusi¨®n nacional, como se consigui¨® con los incidentes con la polic¨ªa. No quiero avanzar si fue deliberado o no.