El Madrid saca toda la artiller¨ªa

El Real Madrid tendr¨¢ que vigilar hoy, en Yokohama, el prestigio de la Copa Intercontinental y el efecto del resultado en el clima que se vive alrededor del equipo. Puede que no sea la Copa de Europa y hasta se admiten los inconvenientes de un partido muy mal ubicado en el calendario, pero el Madrid atraviesa una etapa en la que hace de los grandes t¨ªtulos una raz¨®n m¨¢s para proclamarse el l¨ªder del f¨²tbol mundial. El hecho de que esta final sea eso, un duelo de car¨¢cter planetario entre los campeones de Europa y Am¨¦rica, se?ala el valor simb¨®lico que tiene para el club, que no hace ascos a ning¨²n titulo. Basta el ejemplo de la Supercopa de Europa.

El partido tiene otro lado menos amable para el equipo espa?ol, que atraviesa una racha delicada, con malos resultados en la Liga y en la Copa de Europa. Una derrota en Yokohama alimentar¨ªa las dudas sobre la eficacia del Madrid, que no acaba de encontrar el juego y el gol. Le espera el Olimpia de Asunci¨®n, del que s¨®lo tienen referencias los m¨¢s conspicuos del f¨²tbol. Quienes le han visto resaltan su condici¨®n de paraguayo, que en el f¨²tbol consiste en un estilo rocoso, sin concesiones a ning¨²n rival, capaz de afear los partidos y ganarlos en cualquier campo. El Olimpia es cualquier cosa menos un equipo pusil¨¢nime. Para ganar la Copa Libertadores tuvo que imponerse en los campos de S?o Caetano, el Gremio y el Boca Juniors, lo que al menos habla de car¨¢cter. Y organizaci¨®n no le falta. Pumpido, el portero campe¨®n mundial con Argentina en 1986, ha encontrado su tierra de promisi¨®n en Paraguay. Sabe muy bien lo que significa este partido para su equipo, como suele ocurrir con los equipos suramericanos, que dedican un ardor a la Copa Intercontinental que muchas veces ha faltado en los campeones europeos.

El Madrid se ha encontrado con la entereza de los suramericanos en las dos ¨²ltimas finales que ha disputado. Venci¨® con dificultades y un maravilloso gol de Ra¨²l al Cruzeiro. Y perdi¨® en los diez primeros minutos del encuentro frente al Boca Juniors con Riquelme causando estragos y Mart¨ªn Palermo en lo que antes hac¨ªa con regularidad: marcar goles. El equipo sabe que ser¨¢ un encuentro complicado, pero las noticias que llegan son optimistas. Se habla del excelente estado de ¨¢nimo de la plantilla, que, por fin, podr¨¢ contar desde el principio con todas sus figuras. Jugar¨¢n Ronaldo, Zidane, R¨¢ul, Roberto Carlos y Figo. No hay rastro de lesiones ni de gripe en ninguno de ellos. Para Ronaldo ser¨¢ el regreso al escenario de su gran triunfo personal y profesional. Fue en Yokohama donde se proclam¨® campe¨®n del mundo el pasado verano despu¨¦s de marcar ocho goles en nueve partidos. Con ese recuerdo y con las cr¨ªticas que ha recibido en las ¨²ltimas semanas, Ronaldo ser¨¢ el personaje del partido.

A diferencia del Olimpia, que lleg¨® a Jap¨®n el pasado d¨ªa 21, el Madrid se enfrenta a los rigores de un calendario abrumador. Viene de jugar en Barcelona y Mil¨¢n. Lleg¨® hace cuatro d¨ªas a Tokio y algunos todav¨ªa andan a vueltas con los efectos del viaje y de la gripe que ha recorrido toda la expedici¨®n. A favor del Madrid est¨¢ su disposici¨®n a ofrecer su mejor rendimiento en los partidos donde hay grandes cosas en juego. As¨ª ha ganado las tres ¨²ltimas Copas de Europa, su territorio favorito. Cuenta adem¨¢s con el equipo completo, salvo que Makelele no est¨¦ en condiciones de jugar. El centrocampista, cuya ausencia pes¨® gravemente sobre el equipo en Mil¨¢n, se ha recuperado a toda m¨¢quina despu¨¦s de la aparatosa lesi¨®n que sufri¨® en el Camp Nou. Dicen los m¨¦dicos que tiene unos tobillos de goma, la flexibilidad que quiz¨¢ le permita disputar el encuentro frente al Olimpia. El regreso de Hierro tambi¨¦n es seguro. Nadie puede salir m¨¢s beneficiado de la presencia de Hierro que la delantera, obligada a penar en los ¨²ltimos partidos por la falta de alternativas a Zidane en la creaci¨®n del juego. Desde la defensa, Hierro es una amenaza para cualquier equipo por su capacidad como pasador, en corto y especialmente en largo, lo que debe suponer un alivio para Ronaldo.

La final se disputar¨¢ por primera vez en Yokohama despu¨¦s de una larga historia de partidos en Tokio. Los aficionados japoneses se sienten llamados por este encuentro o por la presencia de varios de los mejores jugadores del mundo. El estadio estar¨¢ lleno hasta la bandera.