El coraje de Olaizola

A pesar de que Javier Olaizola (San Sebasti¨¢n, 1969) se resisti¨® hasta lo imposible, una terrible lesi¨®n de rodilla se empe?¨® en tumbarlo el domingo pasado (2-2) en Riazor. As¨ª lo cuenta el defensa y capit¨¢n del Mallorca, ausente forzoso hoy (19.00, Teletaquilla) ante el Madrid, desde la cl¨ªnica de Barcelona en la que se recupera.

"Makaay, en el primer gol del Deportivo (m. 16), se me cay¨® encima y sent¨ª un fuerte dolor en la rodilla, que not¨¦ inestable". Pero sigui¨® jugando: "Unos 15 minutos m¨¢s tarde, fuimos a presionar a Fran y, cuando llegaba, o¨ª un chasquido y me ca¨ª. Como si me cortaran la pierna. Pens¨¦ que me hab¨ªan pegado una patada. Pero... no; me lo hice solo. Como est¨¢bamos con un jugador menos y acab¨¢bamos de empatar (1-1), decid¨ª continuar".

"O¨ª un chasquido y me ca¨ª. Como si me cortaran la pierna. Pero, con un jugador menos, segu¨ª"

El Mallorca se adelant¨® (1-2) y s¨®lo entonces Olaizola avis¨® a su m¨¦dico, Joan Peric¨¤s, para que le atendiera en el descanso. Sin embargo, le pidi¨® que le pusiera una venda y... Santas Pascuas: "Como soy un fatigas y quer¨ªa seguir jugando, no le dej¨¦ hacerme una exploraci¨®n. Comenz¨® el segundo tiempo y, al primer bal¨®n a¨¦reo, salt¨¦ y, al caer, el chasquido fue mucho m¨¢s grande". Por fin, hubo de abandonar el c¨¦sped: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, con el menisco y el ligamento lateral interno afectados; seis meses de baja.

?No fue una locura seguir despu¨¦s del primer crujido? "Yo soy as¨ª. Aun siendo consciente del perjuicio, habr¨ªa seguido", dice Olaizola, que es la primera vez que se lesiona: "No hab¨ªa tenido ni siquiera un esguince. S¨®lo, alguna brecha o golpe. En la pretemporada jugu¨¦ con 70 cent¨ªmetros c¨²bicos de sangre en el m¨²sculo por un hematoma y el m¨¦dico no lo entend¨ªa".

Pero, tarde o temprano, las lesiones llegan: "Yo pens¨¦ que nunca me iba a tocar a m¨ª. Y menos ahora, en un gran momento de forma y disfrutando". Su contrato expira en junio. "Estoy tranquilo. El presidente me ha dicho que no me va a dejar en la estacada", comenta Olaiozola, que no es precisamente un talento natural, sino un futbolista hecho a s¨ª mismo, super¨¢ndose d¨ªa a d¨ªa con fe y esfuerzo. Ha aprendido el oficio de central o lateral derecho. Siempre fue r¨¢pido y ha mejorado "much¨ªsimo" t¨¦cnicamente desde su etapa en el Eibar y el Tolosa, en los que "el f¨²tbol era m¨¢s directo". Curso tras curso, el Mallorca le busc¨® un sustituto, pero termin¨® jugando 35 partidos por temporada. Pese a que su familia est¨¢ muy vinculada a la Real Sociedad -su hermano mayor, Julio, fue su lateral izquierdo y su otro hermano, Mikel, es el utillero-, el camino de Javier fue m¨¢s tortuoso. Pas¨® por el Tolosa, el Eibar -"una escuela de la vida en la que, como todos compaginan el f¨²tbol con el trabajo o los estudios, lo valoran m¨¢s"- y el Burgos, con el que debut¨® en Primera para sufrir el descenso y la desaparici¨®n. Regres¨® apenado al Eibar antes de que le llegara la oferta de su vida, la del Mallorca, en 1995. Luch¨® dos a?os por el ascenso y, tras lograrlo, ha disfrutado de entrenadores como H¨¦ctor C¨²per -"ya advert¨ª que dirigir¨ªa a los grandes"-, Luis Aragon¨¦s -"el n¨²mero uno"- y Gregorio Manzano, de quien dice que ser¨¢ el sucesor de Luis: "Se parecen por sus ideas y lo bien que manejan el vestuario".

En sus seis a?os en Primera, Olaizola se siente orgulloso de sus marcajes a Rivaldo. En cambio, a Gustavo L¨®pez no supo por d¨®nde atraparlo. Y al que admira es a Ra¨²l. ?l s¨®lo ha marcado un gol: "Contra el Celta, de cabeza, hace dos a?os". Una de las numerosas muestras de solidaridad recibidas le ha sorprendido especialmente: la de Oli, del Oviedo, tras sus "mil peleas".