Gaspart y Van Gaal, en el mismo saco, seg¨²n el Camp Nou
La directiva del Bar?a anuncia medidas para despu¨¦s del partido contra el Newcastle
"Trabajamos en silencio. Tenemos que hacer un diagn¨®stico y necesitamos actuar con serenidad. Anunciar ahora cualquier decisi¨®n ser¨ªa imprudente. Hay que aguardar al mi¨¦rcoles porque el martes tenemos un partido de la Liga de Campeones contra el Newcastle". Francesc Closa, vicepresidente del Barcelona y persona de la m¨¢xima confianza del presidente, Joan Gaspart, procura mantener la calma aun cuando el panorama invita a tomar decisiones. La lectura de los titulares de la prensa refleja el desencanto barcelonista. En la portada de Sport se lee: "?Dimisi¨®n! El grito de una afici¨®n frustrada tras la humillaci¨®n en Vallecas".
Los n¨²meros apoyan las palabras. El Bar?a ha protagonizado el segundo peor arranque de su historia en la Liga, despu¨¦s del que sufri¨® en la temporada 1941-42, cuando acab¨® disputando la promoci¨®n. Est¨¢ m¨¢s cerca del descenso que del l¨ªder (a 13 puntos) despu¨¦s de sumar m¨¢s derrotas (cinco) que victorias (cuatro); s¨®lo ha marcado un gol en los ¨²ltimos cuatro partidos, y no gana en campo ajeno desde el 14 de septiembre, d¨ªa en que se impuso en San Mam¨¦s (¨²nicamente cuenta cuatro puntos en siete salidas).
El entrenador pide un ariete como refuerzo, situaci¨®n que evoca el 'caso Morientes'
"Es una crisis deportiva que concierne al primer equipo y no al club", replican los directivos, que se remiten al entrenador; falto de autocr¨ªtica, Louis van Gaal, a su vez, se encomienda a los jugadores, y el equipo, ya muy maleado, cita a la gente para el pr¨®ximo partido, frente al Newcastle. La competici¨®n augura buenas noticias para los azulgrana, invictos en Europa y a un solo triunfo del r¨¦cord del Milan, que en la temporada 1992-93 firm¨® diez seguidos.
Hay serias dudas, sin embargo, sobre el factor campo, que no necesariamente juega siempre a favor del equipo local en el caso del Barcelona. La junta pide unidad, "como mejor medicina en tiempos dif¨ªciles", y un buen partido podr¨ªa resultar bals¨¢mico, pero la respuesta de la hinchada es a d¨ªa de hoy una inc¨®gnita, y m¨¢s si se atiende a que para el martes est¨¢ previsto el fallo del Comit¨¦ de Competici¨®n sobre el posible cierre del Camp Nou y se anuncia igualmente una reuni¨®n del Consejo de Pe?as despu¨¦s que m¨¢s de treinta hayan pedido la dimisi¨®n del presidente.
Gaspart, y Van Gaal, se encuentran ya en un mismo saco. As¨ª que ambos ser¨¢n sometidos al juicio sumar¨ªsimo de la grada. El presidente ha perdido credibilidad y el discurso institucional ya no tiene fuerza. Gaspart se la jug¨® con el fichaje de Van Gaal, pero le falta la frialdad y el sentido de la estrategia de su antecesor, Josep Llu¨ªs N¨²?ez, para ponerse a salvo. A Van Gaal tampoco le va mejor: a cada partido, se vuelve m¨¢s vulnerable en la cancha y en la sala de prensa, especialmente despu¨¦s de decir que el equipo no toc¨® fondo porque "no es el ¨²ltimo".
Por los gui?os del f¨²tbol, ser¨¢ sir Bobby Robson, entrenador ahora del Newcastle, quien eval¨²e a Van Gaal despu¨¦s que el holand¨¦s le sustituyera en el banquillo del Camp Nou tras una tormentosa temporada provocada por el estruendoso adi¨®s a Johan Cruyff.
No encuentra el Bar?a el punto de inflexi¨®n a su crisis y, a la espera de las medidas que tomar¨¢ la junta, el t¨¦cnico ha pedido un ariete como refuerzo, situaci¨®n que lleva al club al punto de partida y evoca el caso Morientes. Para amenizar la espera del partido del martes, hoy llega a Barcelona, invitado por TV-3, D'Alessandro, jugador del River Plate que interesa al Barcelona.
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