En la senda de P¨ªo Baroja

Jon Juaristi ha dedicado la parte sustancial de su obra al estudio de la historia vasca y, en concreto, al estudio de su nacionalismo. Atendiendo nada m¨¢s a sus libros, en 1987 public¨® El linaje de Aitor, un estudio sobre la invenci¨®n de la tradici¨®n vasca centrado en el an¨¢lisis de la literatura hist¨®rico-legendaria del siglo XIX que ser¨¢ ampliamente utilizada por el posterior discurso sabiniano. En 1992 vio la luz Vestigios de Babel. En cierto modo, se trata de un estudio complementario de El linaje de Aitor en cuanto busca en ¨¦l las ra¨ªces de la literatura decimon¨®nica a trav¨¦s del intento de dar cuenta de la larga g¨¦nesis de los mitos nacionalistas puestos en circulaci¨®n con la crisis finisecular. En 1993 apareci¨® El bucle melanc¨®lico, centrado en el an¨¢lisis del primer nacionalismo vasco. El ¨¦xito de este libro se encuentra en la g¨¦nesis de Sacra N¨¦mesis. Nuevas historias de nacionalistas vascos (1998), una continuaci¨®n cronol¨®gica de la aproximaci¨®n a los componentes ideol¨®gicos y sociales del nacionalismo vasco. En 1999 public¨® El chimbo expiatorio, una descripci¨®n de la compleja transici¨®n de Bilbao del siglo XIX al siglo XX. Aunque no se agotan en estos libros las fundamentales contribuciones de Jon Juaristi a la historia contempor¨¢nea vasca, los mismos dan una idea bastante aproximada del lugar de ventaja que ocupa hoy el autor en el mundo de la historiograf¨ªa y el ensayo sobre la cuesti¨®n. A esta ya larga bibliograf¨ªa se suma este reciente libro, La tribu atribulada. El nacionalismo vasco explicado a mi padre. Se trata de un ensayo bien incardinado en la l¨ªnea argumental de su obra, pero que, sin embargo, supone una inflexi¨®n en el modo de tratar el tema. En este libro hace Juaristi un ejercicio de memori¨®grafo que le aleja del campo de la historiograf¨ªa y el ensayo para transitar por un g¨¦nero en el que sin duda camina con la misma seguridad que por otros territorios ya recorridos a lo largo de su carrera literaria.

Juaristi es un excelente conocedor y un amante de la obra de P¨ªo Baroja. Y es a don P¨ªo a quien recuerdan las p¨¢ginas de esta La tribu atribulada en las que se enfrenta al mismo tiempo a recuerdos personales, aproximaciones brillantes a la historia del nacionalismo vasco y a anotaciones agudas acerca de su vida intelectual y p¨²blica a lo largo de estos ¨²ltimos a?os. El hilo del libro, tambi¨¦n el pretexto, lo constituye el intento de explicar el rumbo del nacionalismo vasco a su padre. Se trata de una explicaci¨®n no demasiado ordenada. M¨¢s que una visi¨®n sistem¨¢tica de la cuesti¨®n, el autor ofrece una serie de brillantes apuntes autobiogr¨¢ficos e historiogr¨¢ficos que, si acaso no conseguir¨¢n el objetivo proclamado del libro, suponen una lectura apasionante para el lector interesado en la crisis vasca de los siglos XIX y XX.

Tres son los temas tratados

con m¨¢s detenimiento a lo largo del libro. El tema de la Iglesia vasca y sus relaciones con el movimiento nacionalista, el papel de los intelectuales y los demi- lettr¨¦s en la g¨¦nesis de la ideolog¨ªa nacionalista y el apunte final sobre las posibilidades de un movimiento de resistencia a ETA en la presente vida pol¨ªtica vasca. Tres temas que podr¨ªan haber sido objeto de un pausado tratamiento, pero que Jon Juaristi aborda al comp¨¢s de su pol¨¦mica con Juan Aranzadi y de la descripci¨®n de sus vacaciones y andanzas por la vida p¨²blica espa?ola. En este sentido, La tribu atribulada no es un fragmento de unas memorias, sino un mixto de recuerdos y ensayos que da al libro su originalidad y capacidad de sugerencia. En relaci¨®n a los ensayos anteriores, particularmente El bucle melanc¨®lico y Sacra N¨¦mesis, echar¨¢ en falta el lector la elaboraci¨®n y el m¨¦todo de estos trabajos. Pero con un poco de imaginaci¨®n, ver¨¢ compensadas estas ausencias por el apunte de lo que puede resultar una nueva versi¨®n de Desde las ¨²ltimas vueltas del camino. Una empresa para la que Jon Juaristi est¨¢ sin duda excepcionalmente dotado.