La magia de los Reyes Magos derrot¨® a la fuerte lluvia

Iban en carroza, pero pod¨ªan haber llegado en una de las barcas del estanque del Retiro. La cabalgata tuvo un cuarto protagonista del que ya se hab¨ªa avisado: la lluvia. Desde que la comitiva arranc¨® casi puntual a las seis menos cuarto de la tarde, el agua no abandon¨® a los Reyes Magos hasta que entraron en la plaza Mayor, 15 minutos antes de la hora prevista.

Y es que cuando en Madrid le da por llover hasta los Reyes de Oriente caminan m¨¢s deprisa. O al menos sus veh¨ªculos, que preced¨ªan a los dromedarios llenos de juguetes que han repartido durante toda la noche. Las 41 carrozas, que formaban el desfile de entrada de los tres personajes m¨¢s esperados por los ni?os durante el a?o, hicieron su recorrido desde el parque del Retiro hasta la plaza Mayor a toda velocidad. A ni?os y padres no les import¨® que la estrella de Oriente, el cometa de la ilusi¨®n, trajera consigo litros y litros de agua, aparte de los 15.000 kilos de caramelos que, m¨¢s o menos, se repartieron durante el desfile. Aguantaron por ver las caras de los tres Magos de Oriente.

El p¨²blico llev¨® escalerillas para que los peque?os gozasen de las mejores vistas

La comitiva real reparti¨® m¨¢s de 15.000 kilos de caramelos durante el recorrido

Pero tambi¨¦n hubo alguna que otra queja. Puede que el bosque de paraguas que se despleg¨® durante todo el recorrido de la comitiva hiciera rebotar m¨¢s de un dulce, porque una de las consignas m¨¢s gritadas por peque?os y grandes fue: "Menos papelitos, m¨¢s caramelitos". De hecho, cuando algunas de las carrozas se retiraban por la calle de Atocha, ya sin personajes, soltaban el excedente de caramelitos.

Y es que a las seis de la tarde nadie pensaba que pudiera llover m¨¢s, pero el aguacero se intensific¨® sobre las siete y diez, momento de nerviosismo en el que m¨¢s de uno estuvo tentado de abandonar. Pasaban los protagonistas y m¨¢s de un chiquillo le ped¨ªa a sus padres: "Venga, v¨¢monos a casa calentitos a esperar all¨ª a los Reyes". No fue el caso de Laura Rodelgo Blanco, madrile?a de 10 a?os: "Dice mi madre que he venido casi desde que nac¨ª". No hac¨ªa falta que jurara su veteran¨ªa. Iba pertrechada con un par de bolsas de pl¨¢stico para recoger todos los dulces que pudiera. "Ha habido a?os en que he llenado dos bolsas".

El escuadr¨®n a caballo de la Polic¨ªa Municipal no pudo lucir sus trajes de gala, pues salieron tapados por ponchos de color gris. Pero, por primera vez en estos 50 a?os de desfile, los municipales sacaron a la calle una carroza escoltada por motos de gran cilindrada que hac¨ªan presagiar un bonito desfile.

Y el desfile no decepcion¨®. Entre el p¨²blico destacaban los adolescentes, las escalerillas caseras tradicionales en este desfile, para que los m¨¢s peque?os gocen de las mejores vistas, y los inmigrantes que se sumaron a la llamada de los Magos con entusiasmo, sobre todo, los latinoamericanos.

En los balcones de la calle de Alcal¨¢ y los m¨¢s avispados en segunda fila utilizaban sus paraguas colocados al rev¨¦s, como cucharones, para recoger la mayor cantidad de caramelos. Es que los hay listos. La alegor¨ªa de Harry Potter, una de las cinco carrozas del Ayuntamiento de Madrid, fue de las m¨¢s aplaudidas. B¨²hos, castillos, efectos m¨¢gicos... Nada como la fantas¨ªa para arrancar aplausos.

El deportista Alberto Garc¨ªa, campe¨®n ol¨ªmpico de atletismo, fue la segunda celebridad en hacer su aparici¨®n. Lo hizo en el veh¨ªculo Madrid 2012, representante de la candidatura ol¨ªmpica de la capital.

Los bomberos del Ayuntamiento fueron tambi¨¦n de los m¨¢s aplaudidos. Encabezaba su participaci¨®n un veh¨ªculo antiguo, matriculado en 1949, seg¨²n V¨ªctor, su conductor, que lo hab¨ªa sacado del museo de los bomberos de la ciudad.

La carroza de Radio Nacional de Espa?a se llev¨® el premio a la m¨¢s solidaria. Bajo el lema "Un juguete, una ilusi¨®n" y por tercer a?o consecutivo junto a la organizaci¨®n Crecer Jugando, participan en una campa?a para enviar todo tipo de juegos y crear ludotecas en pa¨ªses como Nicaragua, Colombia, Bolivia y El Salvador.

"Ninguno se quedar¨¢ sin regalo esta noche, porque aguantar lo que ha ca¨ªdo aqu¨ª se merece un premio", dijo un rey, mientras algunos asistentes, algo despistados u ocurrentes, gritaban: "Gaspart, dimisi¨®n", al ver pasar a uno de los reyes.