El plan de impulso econ¨®mico de Bush suprimir¨¢ los impuestos sobre los dividendos
La Bolsa de Nueva York sube cerca del 2% en la v¨ªspera de la presentaci¨®n del programa
George Bush propondr¨¢ hoy eliminar completamente el impuesto que grava los dividendos que reciben los inversores, dentro de un amplio paquete de est¨ªmulos econ¨®micos dirigidos a impulsar el crecimiento y crear empleo. La desaparici¨®n de la fiscalidad sobre los dividendos supone la mitad de los 600.000 millones de d¨®lares que costar¨¢ la iniciativa en los pr¨®ximos 10 a?os. La Casa Blanca considera que el inevitable incremento del d¨¦ficit, con su efecto sobre el alza de los tipos de inter¨¦s, es un riesgo asumible que debe ceder ante la m¨¢xima prioridad de activar la econom¨ªa. La Bolsa de Nueva York subi¨® ayer cerca del 2%.
Estados Unidos sufri¨® en 2002 la p¨¦rdida de 1,2 millones de puestos de trabajo, segunda cifra r¨¦cord en un a?o, s¨®lo superada por los 1,9 millones perdidos en 2001. Son los dos ejercicios que Bush lleva de presidente, en los que la tasa de paro ha subido hasta el 6% y la econom¨ªa ha renqueado a una tasa de crecimiento que las ¨²ltimas estimaciones dejan por debajo del 3% para el a?o reci¨¦n concluido. Para cambiar ese panorama, Bush se propone anunciar hoy un programa de actuaciones cuya pieza estelar es la eliminaci¨®n del impuesto que grava los dividendos que abonan las empresas, seg¨²n informaciones filtradas por la Administraci¨®n a lo largo del fin de semana. El fundamento ideol¨®gico es que esa tasa supone un doble gravamen: primero como beneficio empresarial y luego como renta del inversor. La Administraci¨®n ve un c¨ªrculo virtuoso en la medida: la eliminaci¨®n del impuesto atraer¨¢ inversi¨®n, la inversi¨®n har¨¢ subir los valores, una Bolsa revaluada incrementar¨¢ la confianza, el optimismo alentar¨¢ el consumo y el gasto de los consumidores incentivar¨¢ la inversi¨®n de las empresas, posible porque tendr¨¢n la liquidez inicialmente proporcionada por los accionistas. La Casa Blanca estima que la capitalizaci¨®n burs¨¢til aumentar¨¢ no menos del 10% e introducir¨¢ en el sistema entre 30.000 y 50.000 millones de d¨®lares para el consumo en los pr¨®ximos dos a?os.Precisamente ayer se supo que la actividad del sector servicios, el m¨¢s importante de la econom¨ªa de Estados Unidos, descendi¨® en diciembre, pasando de 57,4 de noviembre a 54,7 puntos, seg¨²n el Instituto de Gesti¨®n de Suministros. La Bolsa de Nueva York, que ya imprimi¨® una evidente influencia en la subida que tuvo cuando se conoci¨® el lanzamiento de este plan, sub¨ªa ayer cerca del 2% antes de cerrar la sesi¨®n, mientras el Nasdaq lo hac¨ªa por encima de ese porcentaje.
Cuento de la lechera
Para la oposici¨®n dem¨®crata y algunos economistas esta cadena es una variante del cuento de la lechera, donde el c¨¢ntaro se puede romper en cualquier momento: no hay garant¨ªas de que se vaya a estimular a corto plazo el consumo ni de que se vaya a incrementar la inversi¨®n en un sistema productivo que todav¨ªa trabaja al 75% de su capacidad.
Los dem¨®cratas son particularmente recelosos del destino final de este recorte fiscal, que consideran claramente escorado hacia los m¨¢s favorecidos. Seg¨²n algunas estimaciones, m¨¢s de la mitad de la nueva liquidez ir¨¢ a los bolsillos del 5% de los contribuyentes m¨¢s econ¨®micamente capacitados.
Para contrarrestar ese efecto pol¨ªticamente indeseable y extender los beneficios de la reforma, el presidente se propone tambi¨¦n anunciar medidas a favor de las clases medias y los menos favorecidos, entre las que se barajan incrementar el periodo de cobertura de desempleo, aumentar en 400 d¨®lares las deducciones a las familias con hijos menores de 16 a?os, adelantar a la declaraci¨®n de 2003 recortes fiscales que deb¨ªan entrar en vigor en la de 2004 y 2006 y acelerar el recorte del impuesto que grava a los hogares con dos fuentes de ingresos.
Son propuestas para los individuos a las que se agregar¨¢n otras dirigidas a las empresas como la capacidad de deducir amortizaciones y otros beneficios fiscales. Tambi¨¦n para los Estados, muy afectados por la ca¨ªda de ingresos, habr¨¢ medidas de alivio. La mayor¨ªa de los 50 Estados de la Uni¨®n tiene la obligaci¨®n legal de elaborar prepuestos equilibrados por lo que la crisis econ¨®mica les fuerza a recortar gastos o a subir impuestos.
La Casa Blanca se plantea descargar de forma desigual los beneficios del paquete de est¨ªmulos, con el ¨¦nfasis puesto en los primeros a?os. Un primer c¨¢lculo indica que entre 80.000 y 100.000 de los 600.000 millones podr¨ªa concentrarse en el pr¨®ximo ejercicio.
Participantes en el congreso que celebr¨® el domingo la Asociaci¨®n Americana de Economistas estiman que las esperadas medidas podr¨ªan contribuir a un aumento de medio punto en el PIB y a un recorte de entre una y dos d¨¦cimas en la tasa de desempleo. Otro efecto adicional, negativo, ser¨¢ el de incrementar el d¨¦ficit en el que por primera vez cay¨® la Administraci¨®n en 2002, tras varios a?os de resultados positivos. Los 158.000 millones en n¨²meros rojos del pasado a?o fiscal podr¨ªan superar los 250.000 en el actual, incluida la versi¨®n conservadora de lo que puede costar la guerra en Irak.
La Administraci¨®n quita valor a las tensiones al alza sobre los tipos que puede producir la necesidad de financiar ese d¨¦ficit y dice que el objetivo es incrementar el crecimiento. Una econom¨ªa recuperada, dicen los asesores presidenciales, permitir¨¢ adoptar m¨¢s tarde otras medidas, incluida la de volver a aumentar partidas de gastos dom¨¦sticos (educaci¨®n, transporte, subvenciones para los m¨¢s pobres o investigaci¨®n sanitaria) que este a?o se van a congelar para que no contribuyan m¨¢s al d¨¦ficit.
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