El mundo de la cultura, la universidad, la pol¨ªtica y la Iglesia despide a Miquel Batllori
"Ha muerto la figura m¨¢s rutilante de la intelectualidad catalana", afirma Jordi Pujol
Cientos de representantes de la cultura, la universidad, la pol¨ªtica y la Iglesia despidieron ayer a Miquel Batllori, que falleci¨® el domingo a los 93 a?os. El que la capilla ardiente de Batllori se instalara en un lugar de dif¨ªcil acceso, el Centro Borja, a las afueras de Sant Cugat, en medio de un frondoso bosque, y alejado unos 20 kil¨®metros de Barcelona, no impidi¨® que personalidades y amigos acudieran a dar su ¨²ltimo adi¨®s a este gran erudito de nuestro tiempo. El presidente de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol, lo defini¨® como "la figura m¨¢s rutilante de la intelectualidad catalana".
A partir de las 9.30 horas de ayer se abri¨® la capilla ardiente de Batllori, junto al vest¨ªbulo del Centro Borja, una sala extremadamente austera, donde los familiares del historiador y miembros de la jerarqu¨ªa de los jesuitas -orden a la que pertenec¨ªa el fallecido- recibieron durante todo el d¨ªa el p¨¦same de los visitantes. En la puerta, una esquela con una cruz y su nombre, y en el centro de la dependencia, una sencilla caja -primero cubierta s¨®lo con un lienzo de lino sobre el que, a primera hora de la tarde, se coloc¨® una bandera catalana- guardaba el cuerpo de Batllori. La primera corona de flores que lleg¨® fue la del Gremio de Libreros, luego llegaron ofrendas del Ayuntamiento de Barcelona, del Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, de la Universidad de Alicante, del Ayuntamiento de Gandia...
Pasaron por la capilla, entre otras personalidades, el presidente de la Generalitat de Catalunya, el consejero de Cultura, Jordi Vilajoana, el ex rector de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona y diputado del PSC-CpC, Josep Maria Vall¨¨s, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, el arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles, y el ministro de Ciencia y Tecnolog¨ªa, Josep Piqu¨¦. Todos ellos lamentaron la muerte de Batllori y elogiaron tanto su talante como su ingente obra, que abarca estudios sobre Ramon Llull y la familia Borja, pero tambi¨¦n sobre el siglo XIX.
Pujol dijo del estudioso: "Ha muerto la figura m¨¢s rutilante y m¨¢s esplendorosa de la intelectualidad catalana". Y le dio las gracias "por habernos hecho el obsequio a los catalanes de su vida y de su obra". Tras interesarse por c¨®mo pas¨® Batllori sus ¨²ltimos momentos, lo que le refirieron el provincial de los jesuitas, Pere Borr¨¤s, y el rector del Centro Borja, Ignasi Salvat, el presidente de la Generalitat rez¨® junto con los familiares de Batllori un Padre Nuestro ante el f¨¦retro.
Los momentos previos a la llegada de Pujol a la capilla ardiente, a las 15.30 horas, fueron de un cierto ajetreo, al reparar los servicios de Protocolo de la Generalitat que en la sala no hab¨ªa ninguna bandera catalana y s¨ª, en cambio, una vistosa cinta con la bandera espa?ola que adornaba la corona enviada por el Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte. Menos mal que el Centro Borja dispon¨ªa de una senyera y el olvido pudo subsanarse, colocando la bandera encima del ata¨²d, justo antes de que el presidente de catal¨¢n hiciera acto de presencia.
Miquel Batllori recibi¨® asimismo el cari?o de numerosas personas que lo conocieron y que firmaron en el libro de condolencia, destacando en sus dedicatorias la "generosidad" y el talante "dialogador" de este humanista del siglo XX.
Tambi¨¦n llegaron p¨¦sames de fuera de Catalu?a. Como el de la alcaldesa de Gandia -donde Batllori vivi¨® entre 1928 y 1930-, Josefa Frau, quien subray¨® "la excepcionalidad" de la figura del fallecido "como persona, estudioso, historiador y jesuita". Marian Soto, concejal de X¨¤tiva, municipio que le declar¨® hijo adoptivo, dijo que ¨¦ste "fue el mejor homenaje que en vida se le pudo hacer". El consejero de Cultura aragon¨¦s, Javier Callizo, se?al¨® que Batllori fue "uno de los mejores conocedores y especialistas en la historia de la Corona de Arag¨®n".
El funeral por el padre Batllori ser¨¢ hoy a las 11.30 horas en la Iglesia de Sant Pere de Sant Cugat del Vall¨¨s.
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