Galeristas y artistas marcan las diferencias de los dos pabellones
Lo primero que se aprecia al entrar en Arco son los dos grandes cuadros de Barcel¨® -unas inmensas marinas mat¨¦ricas pintadas recientemente, a 300.000 euros cada una - que cuelgan en la galer¨ªa de Bruno Bichofsberger, su representante en exclusiva desde hace d¨¦cadas. Dan fe no s¨®lo de la presencia en esta edici¨®n de algunas de las m¨¢s potentes galer¨ªas suizas, sino que tambi¨¦n resultan premonitorias de este cierto retorno al orden, es decir, a la pintura, que empez¨® a vislumbrarse el pasado a?o y se afianza ¨¦ste.
"Es curioso porque parece como que vuelven los ochenta", comentaba Fernando Rold¨¢n, de la galer¨ªa sevillana Cavecanem. "Hay como una vuelta al inter¨¦s por la pintura, y me ha pasado a m¨ª, pero, por lo que veo, tambi¨¦n a los otros galeristas. Son cosas que est¨¢n en el aire".
"Es una edici¨®n espl¨¦ndida". La valoraci¨®n positiva de la nueva edici¨®n de Arco por parte del galerista Carles Tach¨¦, de Barcelona, era habitual entre los galeristas y artistas consultados, aunque las diferencias aparec¨ªan en el tratamiento de los dos pabellones. El recorrido por el 7 es una vuelta a los grandes nombres de las vanguardias hist¨®ricas y las principales corrientes de la mitad del siglo XX, mientras que en el 9 se vuelcan las tendencias y los artistas de las ¨²ltimas generaciones.
Como un museo
"Aqu¨ª se citan las mejores galer¨ªas con sus mejores fondos, y esto hace que cada Arco vaya mejorando hasta llegar a ¨¦ste, que es espl¨¦ndido", a?ade Carles Tach¨¦, que ayer ten¨ªa reservadas piezas de Scully y Colomer. "Hay grand¨ªsimas obras y est¨¢n colocadas de manera muy relajada, como si fuera un museo, y as¨ª se puede pasear y descubrir".
El pintor Eduardo Arroyo se negaba a salir del pabell¨®n 7. "Hay dos ferias, una con fotograf¨ªas sobre cartones y autonom¨ªas subvencionadas, y otra seria, no de mercadillo, con galer¨ªas internacionales potentes. El dibujo de la feria es m¨¢s f¨¢cil y las obras se ven con m¨¢s dignidad".
Ben Jakober y Yannick Vu, que exponen en Galerie de France (Par¨ªs) un botellero en homenaje a Duchamp, creen que hay optimismo a pesar de las amenazas de guerra, y destaca una vuelta a la pintura y la calidad de las obras en las galer¨ªas. El galerista Vostell (Berl¨ªn, Madrid) tambi¨¦n observa un Arco m¨¢s cl¨¢sico, con menos fotograf¨ªa, instalaciones y videoarte. "La pintura se vende mejor y ¨¦sta es una feria de arte donde domina el mercado". La calidad de las obras tambi¨¦n es se?alada por el galerista Guillermo de Osma (Madrid).
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